𝐂𝐀𝐏Í𝐓𝐔𝐋𝐎 𝟑

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He de admitir que no ha sido la mejor impresión de la chica nueva pero es culpa de Esperanza no sé quién se cree que es con esa sonrisa malvada , esa mirada de superioridad, esa carcajada cuando alguien falla...joder ,¿ me está gustando? No me puedes estar gustando mi profesora ughhhhh.

T/n concentrate.

En mi segunda clase con el de economía (k literalmente parece Cristian Grey) me dejó ir al baño.

Ya entrando captó un olor extraño.
¿Alguien se estaba fumando un porro?

No pude seguir pensando porque alguien me agarró por los hombros y me estampó contra la pared.

–Nah, solo eres la nueva–dijo una voz quitando importancia.

Mire hacia sus ojos mientras me retenía.Era una mujer de ojos oscuros y de cabello rubio teñido.

–¿Y tu quién coño eres?–pregunte miestras forcejeaba sobre su cuerpo.

–¿Crees que no se de tu pequeña obsesión conmigo? –me preguntó con una sonrisa pícara.

–Pero...

–Bah , es mentira , pero si se una cosa , te gusta Esperanza–me sonrió.

–No se de qué me hablas–dije esquivando sus ojos intimidantes.

–¿Crees que no me doy cuenta? Aunque esté en el fondo , guapa , no soy estúpida –comentó egocentricamente.

Esa sonrisa...quise borrarsela.

La empujé con toda mi fuerza , pero como soy T/n soy una chica delicada y la aparte pero ella apenas se inmutó.

–¿Pero sabes que es lo más gracioso?–volvió a sonreír.

–¿El que?–farfullé con molestia.

–Que te pone Torres.

Oh Dios mío, ¿de dónde salió esta chica?

–¡No te metas en mi vida privada!–espeté y me dirigí hacia la puerta para irme pero la chica me tocó el hombro.

–Candela.

–¿Candela?

–Me llamo.

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Ya es tercera hora y mi compañero Abraham Mateo me ha ofrecido esta tarde a dar un paseo con nuestros helicópteros de oro , en fin , cosas de millonarios.

Cuando acabó la hora me fui a sala de guardia y allí me esperaba Esperanza.

Cuando entré no se percató de mi presencia, estaba de espaldas con el móvil , donde pude ver que buscaba en internet "tangas de Mickey mouse".

Carraspeé y se dió la vuelta, me miró , se sonrojó y guardo el móvil .

–T/n , siéntate aquí, tu castigo consistirá en hacer ecuaciones hasta lo que dure el recreo.

Bufé y me senté .

Esta mujer no paraba de sorprenderme , literalmente estaba al lado mía observando las ecuaciones .

–Otra vez , te equivocaste aquí–me señaló con aires de superioridad.

La miré a los ojos , luego a sus labios.

Controlate...

A la mierda el control.

𝘿É𝙅𝘼𝙈𝙀 𝘿𝙀𝘾𝙇𝙄𝙉𝘼𝙍 𝙏𝙐 𝘾𝙊𝙍𝘼𝙕Ó𝙉 (𝙏𝙤𝙧𝙧𝙚𝙨 𝙮 𝙩ú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora