Narradora:
Para las 22:30pm,la mayoría ya estaban durmiendo dentro de los coches,pues así estarían más seguros y en ese lugar los únicos que permanecían despiertos era la caótica pareja,pues ellos no tenían sueño.Deok su-pensando- que bien que se hayan quedado dormidos,necesito relajarme un poco o al final terminaré perdiendo la cabeza
Narradora:
Y en ese momento como si le hubiese leído la mente,ella le dijo que también necesitaba relajarse y aprovechando que no había nadie más despierto,se tumbaron sobre el suelo de la gasolinera y sin dudarlo se pusieron a darle al tema.(y con darle al tema,ya sabéis a lo que me refiero)
Narradora:
Los gemidos de ambos resonaban por toda la gasolinera,aunque no eran lo bastante audibles para los zombis pudieran oírlo.Gemidos fuertes
Narra deok su:
En ese momento los dos nos necesitábamos más que nunca,pues desde que comenzó este infierno no habíamos tenido ningún momento de intimidad,pero ahora queríamos descargar todo el estrés que habíamos acumulado durante días.
Narradora:
Ante tanta pasión desenfrenada,aquella mujer no podía reprimir sus gemidos.Mi nyeo-gimiendo- ah ah ah ah ahh bebé dame más
Narra deok su:
Esos gemidos eran un deleite sexual para mí,es por eso que atrapé su cuerpo semidesnudo entre mis brazos,para después tumbarla suavemente contra el suelo,sin duda se veía tan indefensa bajo mis manos que sin pensarlo mucho me quité los pantalones y los calzoncillos,para después dejarlos encima del mostrador y ella al verme solo con los calcetines se puso muy roja y se tapó la cara con sus manos,aquello hizo que me entrara la risa y rápidamente le destapé el rostro haciendo que me mirase a los ojos.Deok su- no te tapes,quiero verte
Narradora:
Ante eso ella le miró tímidamente,su cabello se deslizaba hasta su cuello con los mechones apartados,sus hermosos ojos negros le miraban con deseo y ese leve sonrojo en sus mejillas resaltaba sobre su blanca piel al igual que en el tatuaje,aquello le daba un aspecto provocativo pero a la vez muy adorable.
Narradora:
Llegó un punto en el que cambiaron de postura,haciendo que esa mujer se quedase encima de su marido,acto seguido empezó a cabalgar sobre él,lo que hizo que los gemidos de los dos saliesen disparados después de 15 minutos que parecían interminables,al final terminaron tumbados en el suelo de la gasolinera semidesnudos y totalmente despeinados,tras vestirse y coger algunas almohadas y unas mantas se quedaron profundamente dormidos.
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Pesadilla apocalíptica
HorrorPara esta historia he hecho una combinación de el juego del calamar y de estamos muertos.