16. VUELTA A CASA.

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SANEM:
Me levanto antes que Can. Está agotado. Son como las 10:00.
Decido darme una ducha y arreglarme.
Al desnudarme me he dado cuenta de cómo tengo el pecho, anoche disfrute muchísimo pero hoy me duele. Me fijo también en que tengo una zona del cuello con un pequeño moratón. El roce de su barba y la intensidad de sus besos han magullado mi delicada piel.

A pesar de que al verme las marcas a mi cabeza viene el recuerdo de lo bien que lo pasé, no me agrada que alguien que no sea Can me vea así.
Me ducho y al terminar salgo con la toalla enroscada. Me siento en la silla del tocador y me pongo una de mis cremas para aliviar el dolor.
Estoy concentrada. Cuando de repente veo a Can detrás de mí a través del espejo y salto del susto. Me me tiene que sujetar.

-Sanem: Cannnn!
-Can: Lo siento.
-Sanem: Mira.

Muestro todas las rojeces. El mira con curiosidad y cuando ve las marcas del cuello se agacha y me besa la frente con cara de preocupación.
-Can: Lo siento, está vez se me ha ido de las manos. No quería hacerte daño.
-Sanem: Ya lo sé.

Le cojo la cara con mis dos manos, está preocupado.
-Sanem: No pasa nada. Sólo que si me rozo me duele un poco. Y además no me haría mucha gracia que alguien se fijase en las marcas del cuello, pero con esta crema bastará y hasta que se cure, nada de locuras.
-Can: Me siento fatal, puedo ayudarte?
-Sanem: Sí. Pero hazlo despacio, que me duele.

Can me besa el cuello y yo hago una mueca de dolor.
-Can: Joder Sanem, me he pasado, esta vez me he pasado.
-Sanem: Can, tranquilo. Se nos fue un poco de control. Estoy bien mientras no toque la zona.

Me pone un poco de crema en el cuello y en el escote sin llegar al pecho, cierra el bote. Me da la mano y me deja sentada en la cama junto a la ropa que había preparado.
Me besa en la frente y luego las manos y se va a la ducha. Me termino de vestir y me maquillo un poco, hoy es nuestro último día. Mañana saldremos a primera hora hacía Estambul.

Aprovechamos todo el día para estar en la calle, terminar de ver los lugares que nos faltaban y terminar las últimas compras. Hemos comprado algunas cosas para la casa y para nuestros sobrinito también. Nos tomamos el último helado y vamos de vuelta al hotel. Can recibe un mensaje, esta tarde ha llegado como estaba previsto el barco a Estambul. En unas horas estará en el muelle.

Hacemos las maletas y guardamos cómo podemos todas las bolsas de compras y regalos para la familia. Mañana antes de dejar el coche de alquiler tendremos que comprar una maleta más para cargar con todo el extra que llevamos. Creo que me he pasado.

Por la noche, bajamos cerca del hotel a cenar algo y Can baja su cámara, tomamos las últimas fotos y nos vamos directamente a la cama.
Como ya es costumbre, Can pone una película y nada más empezar me dejo dormir en su hombro. No falla.

Nos levantamos pronto. Vamos a desayunar y acomodamos todo nuestro equipaje, devolvemos el coche en el aeropuerto y nos sentamos a tomar algo en lo que sale nuestro vuelo.
-Can: Hasta aquí nuestra luna de miel.
-Sanen: Can, ha sido muy bonito todo.
-Can: Ha sido perfecto.
-Sanem: Qué haremos al llegar a casa?
-Can: Creo que vamos a querer descansar, Nos quedan un par de horas de vuelo.

CAN:
Llegamos a Estambul, me he pasado el trayecto en el avión leyendo. Sanem, que iba sentada por el lado de la ventanilla se ha quedado hipnotizada.
Sólo dejaba de mirar para apuntar notas en uno de sus cuadernos. Y cada vez que me miraba sonreía emocionada.
Estoy ansioso por decirle que la casa de la finca ya es nuestra. Sólo falta su firma para que sea oficial.
A Sanem le va a dar algo, tengo que pensar una forma especial de decírselo.

El Viaje De Nuestra Vida.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora