¡ Snap Out of it ! [Edgar x Fang]

"Es cuestión de relajarse y tener confianza"

-Edgar, Edgar... -

El chico de cabello negro volteaba a todas partes, abrió los ojos como platos al levantarse y observar que se encontraba en un lugar de nubes suaves y esponjosas, a la distancia, había una luz brillante e hipnotizante que lo incitaba a ir hacía ella. Torpemente se levantó y saltó de nube en nube hasta el destello.

Una voz melodiosa llamaba desde el subconsciente al chico de la bufanda, cómo una sinfonía angelical, le decía que debía despertarse, poco a poco la voz comenzó a volverse grave y fuerte. Fang estaba sacudiendo el cuerpo de su compañero descontroladamente para hacer que se despertara ya que eran las 6:32 de la mañana y su hora de entrada era a las 7:00 en punto.

El karateka sacudía bruscamente de los hombros al contrario mientras que este seguía soñando que estaba sobre nubes, tenía un sueño realmente pesado.

-Edgar, Edgar~ -

-Dios, ¿eres tú? -dijo ilusamente el joven dentro de su sueño.

-¡EDGAR, POR AMOR A LA MANTEQUILLA BARATA, LEVÁNTATE PEDAZO DE INÚTIL! -

-¡AH! -ante el grito de Edgar, la bufanda había reaccionado según el estado de su dueño y debido a que el grito lo tomó por sorpresa, su primer reflejo fue obviamente atacar. Con un golpe fuerte a la cara de Fang, lo mandó a volar de la fila G hasta la fila I haciéndolo caer en un asiento con los pies al aire y la cabeza colgando en el asiento. Edgar se levantó con un coraje de los mil demonios.

-!Tarado¡ ¡Dónde vuelvas a hacer eso te mando a volar hasta la pantalla¡ -dijo gritándole desde su asiento mientras que el pobre chico de cabellos morados solo alzaba su pulgar en señal de que "estoy bien".

Edgar se levantó de su asiento limpiándose todas las porquerías que se había comido la noche anterior, refunfuñando y sacando humo de las orejas, se fue de la sala murmurando y maldiciendo lo mucho que odiaba a Fang.

Mientras tanto, Fang se levantaba rápidamente de su asiento para alcanzar a Edgar, se arreglaba la gorra y se acomodaba las cintas de su pantalón en sus hombros como debía ser, se tropezó y estuvo a nada de caerse por correr torpemente a la salida de la sala de cine pero aunque quiso, no logró alcanzar a Edgar quién y ya estaba fuera del cine.

Ni un adiós o un hasta pronto, Edgar simplemente salió sin despedirse pero como siempre, nuestro querido karateka no iba a dejarlo así, Fang salió del cine casi sofocándose mientras se sostenía del barandal de la entrada del cine, con las fuerzas que pudo, le gritó a su compañero que ya estaba a nada de perderse a la vista del amanecer.

-¡Fue una buena noche! -dijo sonriendo como siempre, Edgar se detuvo por unos segundos para voltear a verlo, aún seguía enojado pero le brindó una mirada para después voltearse e irse, en idioma Edgar eso significa "supongo que tienes razón".

Ambos chicos siguieron caminos diferentes, mientras que Edgar caminaba aún irritado, Fang entraba al cine saltando de emoción, lanzando patadas a todas direcciones, se sentía tan aliviado de que la noche hubiera sido un éxito y aún mejor, habían dormido juntos de alguna manera. De tanto que saltó y pateó el aire, un zapato suyo salió volando hasta la cabeza de un bot que estaba en la entrada para romperle la cabeza y dejarla en el suelo.

-Oops...Lo siento bot 173... -

El robot fue corriendo a buscar su cabeza mientras Fang se reía en un tono bajo, tenía que volver a trabajar con o sin zapato.

Mientras tanto, Edgar llegó a la Gift Shop abriendo las puertas estrepitosamente y haciendo sonar la campana de la entrada por todo el lugar, tanto como Colette como Griff se le quedaron viendo cuando entró, no saludó a nadie y simplemente se dirigió a el cuarto de empleados con una jeta pesada.