Capítulo 21

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Mientras me la chapaba, la esposa yo a ella, le besé el cuello, muy sexy...le hice chupetones, se lo lami, baje un poco más a sus preciosos pechos, los amase los chupe, los lamí, me pare abrí un cajón y cogí sirope de chocolate, mordí mi labio inferior y le eche sirope por su cuerpo

Mauro: Vas a ser mi cena
_______: Te tengo muchas ganas
Mauro: Callate, o te callo yo

Vi su sonrisa pícara puesto por la situación era obvio cómo la callaria, y ella es re viciosa, yo creo que por ella podría estar haciéndome petes todo el día, lamí todo el sirope que deje en su precioso cuerpo, puse más sirope pero está vez cerca de su intimidad, volví a lamer, mi lengua acariciaba su piel y ella se tensaba cuando me acercaba a su zona, lo notaba en como forzaba las esposas, ahora sí, eche sirope en su intimidad, ella se retorció porque estaba frío, mordí su oreja en plan sexy

Mauro: Te doy calor?
_______: Uffff siiii está muy frío
Mauro: Dale mamita

Abrí sus piernas y las coloque por encima de mis hombros, me acerque y arrastre mi lengua saboreando el sirope, le di varias pasadas, haciendo la re fuerza en su clítoris, el cual al poco empecé a besar y morder, poco a poco metí mis dedos en su interior mientras yo, acariciaba fuerte con mi lengua su clítoris, le di fuerte a mis dedos y cada poco metía uno más hasta meter tantos que diera el ancho de mi polla, suerte tener los dedos largos, le llegue a meter cuatro y el pulgar quedó en guerra con su clítoris, no lo acariciaba con un rasca y gana, era lento, fuerte, pero cuando quería ser algo cabron más lento. La mire a los ojos tal que así pero con sonrisa sensual

Ella al verme apartó la mirada, cada que me miraba se retórica más, me la chape, necesitaba sus labios e iba a hacer que se corra y grita mucho, mi mano trabajaba en darle placer, al chaparla no podía gritar, pero vi como su cuerpo se retorcía  co...

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Ella al verme apartó la mirada, cada que me miraba se retórica más, me la chape, necesitaba sus labios e iba a hacer que se corra y grita mucho, mi mano trabajaba en darle placer, al chaparla no podía gritar, pero vi como su cuerpo se retorcía  como apretaba sus manos, y se vino, la deje de chapar y volví a sonreír, baje, a ella le temblaban las piernas, la relami entera para limpiar su corrida, mientras apretaba fuerte su cintura, ella gemía.

Volví a subir, mire mi polla, hice como un amago de paja , para ver que todo siguiese bien y ya estaba para dar guerra, ella la miraba de arriba abajo mordiendo su labio, eso me hacía sentir bien...sentir sexy, ella susurró algo que no llegue a escuchar, la mire a los ojos

Mauro: Que dijiste?
_______: Nada nada
Mauro: Nena, que has dicho?
_______: No te lo diré
Mauro: Dímelo o te lo saco yo
_______: Inténtalo

Sonreí pícaro, le volví a enseñar mi polla, como dándole permiso a chuparla, la desespose, ella me estaba volviendo a comer, y como si de un niño se tratase, le quite la piruleta, mirándola a los ojos, ella me miró, con cara de que hijo de la re mil puta -algo que decir?- comenté yo, ella quedó callada -muy bien- la agarre la puse en la cama a cuatro, se la metí de una de lo mojada que estaba deslizaba, le jale el pelo y empecé a darle sin piedad, la azotaba dejándole algo de marca escuchaba sus gemidos y los míos mezclados, ella tenía los ojos en blanco, como lo sé? Justo como la puse hay un espejo delante, ella me ve a mi y yo a ella, yo tengo mirada posesiva, la estoy haciendo mía, a ella le pone mucho verme, no me mira ni a los ojos. La jale del pelo más fuerte.

Mauro: Mirame a los ojos mientras te follo
_______: No puedo
Mauro: No es una pregunta, hazlo -me miró por el espejo- Así muy bien
_______: Sos un hdp

Le di más duro aún, ella me miraba a los ojos y yo a ella, no había piedad, la estaba rompiendo. Cada vez que entraba en ella ponía los ojos en blanco y chorreaba corrida, pero yo no paraba hasta que dejó de chorrear

Mauro: Esto no acaba aquí yo aún no me vine...y tengo que venirme
_______: Te hago una cubana?
Mauro: No seguimos follando y después de este polvo me la haces

Puso cara de susto yo solo sonreí, la puse boca arriba acostada en la cama, levanté sus piernas poniéndolas en mis hombros, se la metí y ella gimió cada cm de polla, yo la azote para que callase, le empecé a dar muy duro, mientras con mi mano frotaba su clítoris, ella examinó mi cuerpo mis ojos...mi boca...mi cuello, lo miro mucho, mis pectorales, abdomen y bajo un poco más y vio como entraba y salía de ella

Mauro: Sos mía -dije dándole más duro-
_______: Que rico papiii, enterita tuya

Yo sonreí pícaro estaba por venirme y ella también lo notaba, pero me vine antes, de tan duro que le daba justo me corrí estando fuera y salpique en su barriguita y su coño por fuera la metí y seguí dándole quería ese orgasmo suyo y se vino muy rico

Mauro: Perdón por correrme así
_______: Fue excitante en verdad
Mauro: Si, si, bueno ahora te toca, esa cubanita deliciosa

Ella se puso de rodillas fuera de la cama y yo estaba sentado en la cama, me siento tan sexy cuando hace esto, apretó mi polla con sus tetas, más bien la aplastó y no tuvo piedad, mi glande estaba apretado por sus labios y cuando bajaba su pecho entraba en su boca, era super delicioso, la agarre el pelo para que no la molestase y le dio muy rico apartó un segundo la boca y ahí fui, me corrí en sus tetas, me puse rojo del placer la mire y la vi limpiando todo lo que le deje, con un dedo recogía y lo llevaba a su boca lo chupaba y lo limpiaba, nos acostamos rendidos y quedamos sobados

Un giro de 180° (Lit Killah)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora