𝚅𝚒𝚛𝚊𝚑𝚊 - 𝚈𝚘𝚘𝚗𝑀𝚒𝚗

𝐴𝑟𝑟𝑖𝑏𝑎

Miraba por la ventana de nuestro departamento, intentando apreciar lo que solía ver JiMin cada mañana, el tiempo que pasaba en la ventana parecía irreal ahora que no esta aquí, siempre creí que amaba la vista, pero era tan triste que no podía creer que esa fuese su razón.

Solo se notaban los techos limpios de los edificios más bajos, y las calles repletas de personas, cables de luz, y automóviles, más allá no había más que techos y edificios.

Suspiré con el corazón pesando dentro de mi cuerpo.

Había despertado el día después de navidad sentado a un lado de la puerta de la habitación en casa de mis padres, de dónde JiMin no había salido en toda la noche o eso había creído.

Desde ese día no había dejado de sentirme tan estúpido e imbécil por todo lo que le hice y dije, pero por mas arrepentido que estuviese, la puerta nunca se abrió por él, y en cuestión de segundos después de arruinarlo todo no tarde en ver que era ha quién verdaderamente amaba.

Durante la noche, tuve que llamar a JungKook para que se quedará sentado por mi, mientras salía por un regalo de disculpa para JiMin que, Jesucristo, se merecía el mejor de los regalos del mundo por haberlo echo pasar esta mierda, solo para darme cuenta en cuanto el termino conmigo y me saco de la habitación, que estaba siendo el hombre más estúpido por dejarme influenciar por una mujer, y mi familia, dejando a JiMin a un lado y haciéndo estupideces en su propia cara.

Si fuera JiMin, nunca me perdonaría por hacerle esto, pero aún así quise arreglarlo al instante.

Al volver a casa, JungKook estaba dormido al lado de la puerta que seguía cerrada, me había costado conseguir algo debido a la hora y a la fecha, pero una vieja amiga tenía una tienda de arreglos florales y no dudo en ayudarme.

Había pasado poco tiempo al no escuchar nada dentro de la habitación decidí tocar suavemente, por si estaba dormido.

Pero tras unos segundos más de silencio decidí probar si estaba abierta la puerta, dando con una respuesta positiva que hizo mi corazón latir con fuerza.

Antes había llevado a JungKook a su cama porqué no había podido despertarlo de su sueño.

Empuje la puerta con lentitud para que no hiciera ruido y podía imaginarme a mi pequeño JiMin envuelto dentro de las cálidas mantas, en medio de la cama, con sus ojitos inchados y sus labios rojos de tanto llorar por mi culpa, aunque JiMin había dicho que me perdonaba, yo nunca podría hacerlo, nunca podría perdonarme el haberlo echo llorar de esa manera.

Lo primero que vi fue la cama perfectamente acomodada y la puerta del baño abierta y con la luz apagada, con prisa me acerqué a buscarlo sintiendo mi corazón y mis nervios tan alterados que me estaban mareando.

—JiMin— dejé el arreglo floral en la cama y camine al baño, el cuál estaba vacío, cerré los ojos con fuerza y me negué a creer lo que era evidente.

Caminé de prisa al armario y lo abrí con las manos temblorosas al igual que mi esperanza,JiMin no podía haberse...

—¡JiMin!— grité sin importarme la hora o que todos estaban dormidos y me acerque con esperanza al cuarto de MoonByul, ninguno de los dos estaba.

Rápidamente baje las escaleras pasando por la cociba hasta la sala.

—Ji..— papá estaba con MoonByul que no dejaba de llorar —JiMin, papá— no pude hablar más al ver su mirada reflejarme lo que era yo en ese momento, una decepción.

—Él salió por un tema urgente, creí que te había dicho— agradecía que papá no era cotilla cómo JungKook y mamá, pero prefería que me dijera todo lo maldito que era ha que ignorará el problema que yo había causado.

—E-él se fue, y-yo s-solo sali-i p-por ..— no pude seguir hablando debido a mis lágrimas y el llanto que ya no podía retener.

—Creó que no es necesario decirte lo que tu ya entendiste, realmente creí y creo que JiMin era perfecto para ti, pero no puedo decir lo mismo de ti hijo, el parecía tan desesperado por salir de esta casa, como lo ha estado desde hace unos días, pienso que el aguanto mucho por ti, y tu solo lo jodiste, pero para hacerte sentir mal ya tienes tus recuerdos, ahora si quieres hacer las cosas bien, aunque no mereces su perdón, ve con él y deja de comportarte como un imbécil por que yo no crié cabrones, y aunque no pude enseñarte muchas cosas bien, nunca te he dado ejemplos cómo la estupidez que hiciste— papá salió por la puerta de la cocina con MoonByul, que había dejado de llorar para caer completamente dormida.

Me dejé caer de rodillas sin poder dejar de llorar, JiMin se había ido, había terminado conmigo aunque yo lo termine primero y dije estar confuso de mis sentimientos cuando no era así y fueron malditos minutos de diferencia que me hicieron perderlo.

¿Porqué tenía que cagarla tan mierda?

Estaba frente al edificio dónde vivíamos o esperaba al menos siguiera siendo así, habían pasado más de cuatro horas porque ya no habían vuelos disponibles hasta ocho horas después, entonces decidí hacer el viaje en auto, las calles estaban solitarias y a pesar de lo rápido que conducía para llegar, sin hacer una sola parada, me habían tomado cuatro horas que podían significar todo.

Y luego de ese tramo eterno, estaba frente a nuestro hogar.

Subí con prisa y con los nervios carcomiendo vivo, había poca posibilidad de que JiMin siguiera aquí pero el solo tenía este lugar y a sus amigos que estaban de vacaciones según me había contado días antes de que nos fuéramos a Daegu.

Digite el pin de la puerta con rapidez y las manos sudando, cuando abrió sentí que mi corazón podría detenerse de lo rápido que latía.

Busque a JiMin primero en la sala, la cocina, el baño, mi oficina y su sala de baile, pero no había nadie, solo me quedó la habitación, pero tenía menos esperanza porque había notado que ciertas de sus cosas no estaban en su lugar a como habíamos dejado todo antes de salir de viaje.

En definitiva, JiMin no estaba, había cierta cantidad de ropa, que me hizo revolotear los nervios de esperanza, también había dejado gran parte de sus cosas que mantenía en la mesita de noche y en el mueble con espejo a un lado de la habitación.

Me senté en la cama, tomé mi celular, había perdida la cuenta de las veces que había llamado sin tener respuesta alguna, aún sabiendo lo herido que estaba, no podía evitar guardar esperanza de que me contestara.

Sonó como apagado y deje otro mensaje de voz.

—JiMin, porfavor, se que no quieres hablarme pero necesito saber si estas bien, llegué a nuestro departamento pero no estabas y entiendo si quieres tiempo, pero, solo quiero hablar, JiMin, porfavor—

Y durante el resto de los días seguí intentando contactar a JiMin, en vano.