El hechizo de amor~ (Ennchael)

Viernes y sábado~ 2/2

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Una disculpa por las faltas ortográficas y gramaticales.

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- Si vamos abajo, más rápida será la explicación en vez de quedamos aquí sin hacer absolutamente nada - Salió de la habitación -

Pese que Frederick solo alcanzó a sonreír poco forzado, había agarrado el brazo de Michael con un poco de fuerza para que al otro no le doliera, aún siendo un poco iluso con esos pensamientos.

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- ¡Hey! ¿Qué haces? - Preguntó confuso mirando la sonrisa del peli marrón-

- Te puedes caer - Fue lo único que dijo para caminar adelante de Michael -

- ¿Qué? -


Javier iba tranquilamente a la sala de estar, esperando que todo estuviera bien y ordenado, pero no todo en la vida se puede.

- ¡Vannesa! - Gritó llamando la atención de los tres chicos que corrían como niños pequeños jugando a las atrapadas -

- ¿Qué te pasa Javier? No grites de esa manera, asustas a nuestros invitados - Sonrió cansada -

- Esto es un poco extraño... - Susurró Simón para no llamar tanto la atención -

- ¿Acaso eres tonta o te haces? - Preguntó irritado a la chica -

- No, al menos creo que no lo soy tanto... En fin, voy a la cocina, ¿Alguien quiere alguna bebida? - Volvió a sonreír de una manera más amistosa reflejando su buen humor -

- Agua, por favor - Pidió Mark -

- A mi también, por favor - También pidió Simón -

La chica fue directo a la cocina sin esperar respuesta del mayor de todos ellos.
Aunque, había aparecido Frederick atrás de todos, bajando las escaleras sin intentar hacer ruido. Cuando Mark y Simón iban a empezar a charlar, o por lo menos a iniciar una conversación con Javier, Frederick se asomó y los asustó, pero, ¿Qué hizo para poner ansiosos a ambos chicos que solo querían pasar una tarde tranquila? Simple, él solo puso cara de desconfiado y un tanto molesto por la situación...

- ¿Se puede saber que están haciendo? - Preguntó fastidiado -

- Solo hablamos - Respondió Mark tranquilo -

- Solo preguntaré una sola vez esto, ¿Se puede saber que están haciendo? - Habló con voz realmente molesta -

- Nada -

- ¡¿Nada?! ¿Son imbéciles? Están en una propiedad ajena, se comportan como si todo fuera lo más normal del mundo, además de olvidarse de la razón por la que estamos aquí. Par de estúpidos - Insultó bajando la mirada para suspirar - Igualmente, no es como si fuera su culpa...- Susurró lo último -

- Oh, lo siento por hacerte sentir enojado, Frederick. Pero, necesitas empezar a relajarte un poco - Tranquilizó a su amigo -

- Mark, esto es serio, yo estoy hablando en serio. Deberían entender en qué clase de situación estamos, no podemos andar confiados todo el tiempo - Se puso nervioso y preocupado -

- Yo también estoy hablando en serio, Frederick. - Suspiró molesto y miró fijamente al nombrado -

- Ya, ya, chicos... El culpable de alguna... Situación especial que llegue a suceder seré yo, y no se preocupen por nada, estaré a cargo de todo. - Sonrió confiado apareciendo por fin la persona que tanto buscaban, Michael -

- ¡Sabía que estabas bien! - Sonrió Mark volviendo a su humor feliz -

- ¿Pueden callarse? Solo tenemos que esperarla a que llegue con unos malditos vasos con agua y listo, no es tan difícil mantenerse callado - Interrumpió el único que no encajaba ahí -

- Tranquilo Javier, puedes unirte a nuestra conversación mientras tanto - Se acercó Simón al mayor de todos ellos con confianza para alejarse riendo -

Pese a la falta de buen humor de Frederick y un tanto Michael, solo iniciaron una pequeña charla entre Mark, Simón y Javier. No sé conocían tanto, es verdad, pero ellos eran tan idiotas como para dejarse llevar en esas tipos de ocasiones sin darse cuenta en absoluto.

Vannesa, por otra parte; ella solo escuchaba todo lo que hablaban y el problemita que estaban los de la sala, se había olvidado preparar los tres vasos de agua, para sus invitados y nuevos amigos, como decía ella. También, o bueno, el otro vaso de agua era para ella misma por tener sed, aunque podía tomar en la cocina directamente, no era suya esa habitación ni mucho menos vivía ahí, no se sentía incómodo pero no sé acostumbraba a ese lugar.

- Regresé - Trajo tres vasos, le entrego uno por uno, hasta solo quedarse con el último que lo tomaría ella -

- Bien, empecemos con la explicación. Siéntense, será una conversación muy larga... - Avisó Javier de manera que se entienda por las dudas de algunos de ellos que eran tan tontos como para no entender -

- Entonces, solo van a hablar de la persona que estaba arriba, ¿Verdad? - Preguntó Frederick antes de iniciar -

- Mhm, sí, hablaremos de eso y de otras cosas más. Michael, siéntate a mi lado - Ordenó el mayor -

- Claro - Contestó un amistoso y desaprobado Michael -

Javier estaba en el medio, Michael a su lado y Vannesa del otro. Después, Mark también iba en el medio con Simón a su lado izquierdo tomando agua, Frederick a su lado derecho mirando fijamente serio a los tres que tenían enfrente.

- Bien, comenzaremos con lo más importante, o por lo menos lo que hizo toda estás situación. - Comentó un poco nervioso pero con la mirada seria - Bueno, como nadie va a decir algo más voy a seguir hablando. El día martes Michael trajo un libro que si no mal recuerdo estaba en eso de latín, ¿Me equivoco? - Preguntó mirando al nombrado -

- No, no te equivocas, y sí estaba en latín y lo encontraron mis hermanos en ese "castillo" que les comenté. - Dijo recordando -

- Mientras yo estaba comiendo escuchaba la conversación de Noah y él, - Miró fijamente a Michael - no parecía nada malo antes de escuchar los gritos de fangirl de Vannesa. Aunque ahora me parece normal, estoy cien porciento seguro que antes me parecía realmente molesto... Pero me sigue molestando - Susurró lo último levantándose a la cocina -

- Mierda, ojalá te hubiera preguntado que querías. - Sonrió la única chica con los brazos cruzados -

- Por idiota - Respondió Javier sonriendo desde lejos -

- Mi fallo, lo siento. - Se disculpó -

No tardó mucho realmente, solo puso agua en un vaso y listo. Regresó tranquilo siendo observado por todos.

- Ya, ahora continuemos. - Tomó un poco y se sentó - Como decía, desde mi punto de vista todo lo que hacían era aburrido, no tenía ni la menor idea de que se trataba todo aquello. Por un momento pensé en irme, pero ahí escuché esas palabras... Unas que, ni yo me imaginaba. Por cierto, Vannesa, se me olvido decirte que el titular del libro decía: "Hechizos" - Sonrió por ver la reacción de la chica media confunda media enfadada -

- Michael, ¿Ustedes abrieron el libro en una página cualquier o la primera - Preguntó Mark -

- Creo que fue una página al azar... Sí. - Confirmó pensativo -

- Ehh, eso es todo. Al menos la primera parte, cuando leyeron el libro... Después vendría a ser la parte en que se empezaron a comportar muy... Jodidamente asqueroso, sin ofender. - Soltó una risita para continuar - Y ahí ya solo me organice con ella, fin. - Finalizó dejando con dudas a los presentes e igualmente señalando a la chica -

- Espera, espera... ¿Es todo? - Preguntó Simón -

- ¡Sip! - Contestó acariciando a Simón mientras Mark le daba una mirada fulminante -

- Mmm, yo... Solo recuerdo estar con Noah, después aparecí aquí... Un poco raro porque no conocía a Vannesa, solo a Javier pero con la personalidad un tanto cambiada - Dijo Michael atrayendo la atención de todos -

- ¿Entonces? - Siguió Frederick -

- Entonces pensé que era un tipo de broma, y empecé a fingir como lo hacía Noah... Aunque estaba extrañado de la actitud de él. Sin embargo, cuando fui al baño de la habitación de Noah algo muy... raro sucedió... - Se detuvo al pensar que de ninguna manera le creerían -

- ¿Por qué paras? Se supone que es este momento en el que tienes que hacer el ambiente tenso, ya sabes. - Comentó Vannesa aburrida -

- ¿Sé que no me creerán! ¿Por qué crees que no digo nada, ni dije nada. - Dijo como si fuera lo más obvio -

- No te presionaré, pero sería bueno que contarás y no te guardarás el secreto - Esta vez habló Simón -

Michael se lo pensó unos segundos, no estaba seguro si decirlo o no, ya que por obvias razones no le iban a creer, a pesar de no sentirse presionado, no tenía ganas de decirlo, pero la reacción de sus amigos le daba curiosidad y de igual manera quiso querer intentarlo.
Pero, lo hizo.

- Tontos... - Suspiró Michael - Cuando me estaba despertando para desayunar con... Bueno, Noah, fui al baño para, ya saben lavarme la cara y hacer mis necesidades. - Hizo una breve pausa a las miradas curiosas de los chicos - Hasta que algo extraño ocurrió, y puede que aquí ya no me crean pero apareció un doble yo, como una copia mía pero alarmada y confusa a la vez. No hicimos mucho, solo hablamos de lo que había pasado, y es que él o yo pasamos medio por lo mismo, aunque después de eso un señor apareció de la nada y se lo llevó a mi otro yo. - Finalizó sin decir las cosas no-necesarias -

Nadie respondía, aún estaban cargando toda la información en su cabeza, entendían nada..
Hasta que el mayor de todos ellos habló con una respuesta que podría ser la correcta.

- Entonces, quizás haya más información en el libro. - Fue caminando hasta el piso de arriba para recoger el libro y bajar -

- ¡Que divertido será esto! ¿No lo crees? - Preguntó entusiasmada la única chica del lugar -

- P-Por supuesto... - Sonrió nervioso y sonrojado Simón por la repentina cercanía de la chica -

- Ya podemos seguir. - Sonrió y dijo Mark observando fijamente a los dos chicos que estaban un poco cerca...-

- Sí, sería mejor que me sentará en tu lugar, ven, siéntate aquí. - Se levantó y caminó hasta el asiento del chico que anteriormente había hablado con cierto tono celoso -

- No tengo problema, además, no creo que pueda confiarme mucho... Pero supongo que tengo que aceptarlo. - Sonrió ante sus propias palabras sacándole una pequeña risita a su amigo -

Ambos estaban juntos, uno al lado del otro, y aunque no importará del todo, no se hablaban no charlaban por la situación que había pasado unos minutos antes. Podría ser que el silencio en aquella sala fuese cómodo, pero por parte de Simón no era del todo buena, es decir que a él no le agradaba pero tampoco le fastidiaba, así que se podría decir que estaba conforme con aquello.

- Ya vine, y... - Bebió de su agua y se volvió a sentar - Bueno, revisando todo, no dice nada referente a lo que acabas de comentar, pero también dice algo curioso. - Habló detenidamente como siempre hacía y siguió con la plática - Bien, según el libro existen varios hechizos, tanto de amor, de odio y muchos más. Pero, ustedes eligieron como en parte, una página al azar, pese a no estar seguro de ello vamos a suponer que de eso se basará nuestra teoría, ¿Está bien? -

- Sí. - Contestó Frederick con atención -

- Puede que, haya sido de otro universo, o que él sea del nuestro y tú del tuyo. - Intentó no confundir y confundirse -

- No lo sé... Es muy poco creíble. - Habló dudando la chica de cabellos castaños -

- Sí que lo es, pero como dije antes, solo era una teoría loca, o capaz es que sucedió algo más que no hayamos logrado saber. - Comentó un poco desconcertado - También, mañana hay que hacer algo simple, y es que no podemos dejar a Noah sin comer o beber, entonces se me ocurrió una idea que podría funcionar con facilidad. - Dijo -

- Yo tengo una leve idea de cómo podría ser, a mi forma, por supuesto. - Acabó atrayendo miradas hacia él -

- Bueno, creo que la mayoría se hace un idea, Mark. - Susurró Simón -

- Yo opino que... supongo que tendremos que hacer la tarea más fácil de todo esto. Podemos separarlos como estamos haciendo ahora y para mañana como no quiero que mi hermanito se quede sin hacer nada por aproximadamente más de cinco días, los sacaremos a pasear, sí, como perros. - Sonrió ante su idea -

- Bien, ¡Está decidido! ¿Quieren quedarse? - Preguntó la chica levantándose y empezando a relajarse mientras recibía una mirada amenazadora del mayor -

- Emm, lo siento mucho, pero nos tenemos que ir... ¿Qué tal tú, Michael? - Está vez preguntó Frederick -

- Creo... que me quedaré aquí, si van cruzando por mi casa por favor díganle a mis padres que el lunes regreso. -

- Uhm, supongo que está bien... ¡Adiós! - Se despidió rápidamente Mark para agarrar el brazo de Simón y llevárselo afuera -

- Tsk, luego me dicen "el idiota miedoso". - Se despidió con una seña de mano alzada y se fue cerrando la puerta -

- Son raros, eres raro... Me gusta. - Sonrió la chica - Aunque está vez también consideraría irme, ¡Mañana regreso! - Se fue corriendo -

- Pero...- Se quedó sin palabras el único que se quedó con Michael -

- Bueno, tendremos que esperar hasta mañana, aún es muy temprano. - Sonrió con confianza -

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Solo quería avisar que ocurrió una situación que haga que no vuelva a escribir por un tiempo, tampoco es que tenga muchas ideas para el domingo, pero me aseguraré de mejorarme para seguir escribiendo uwu

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PD: Ahora voy a poner ''Vanessa'', es que... no tengo excusa, pero lo haré xd