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La alarma sonaba como cualquier otro día, su cabeza dolia y su vista era borrosa, pero el característico aromatisante de su habitación no se hizo presente, en su lugar había un fuerte olor a colonia mezclado con alcohol. La chica miro a su alrededor aun con la cabeza dándole vueltas, no estaba en su habitación, tallo sus ojos y hecho otro vistazo para asegurarse de que no estaba soñando, definitivamente no estaba en su habitación.

Estaba en una habitación de paredes de un color gris azulado con detallen en blanco, algunos posters y pinturas hechas a mano en las paredes y cosas tiradas por tosas partes, era un desastre.

Entre las cosas que estaban en el piso, pudo divisar el pantalón y las botas que llebava anoche, entro en pánico cuando se dio cuenta que solo llevaba su ropa interior dentro de las sábanas de la cama -mierda- dijo para si misma.

La alarma de su teléfono volvió a sonar, pudo ver que su teléfono estaba en el suelo junto a una camiseta blanca, fue por el y la apago rápidamente al sentir a alguien moverse a su lado. Se levantó de inmediato tropezando con un par de cosas que se encontraban en el suelo, ni siquiera se digno a mirar quien era su acompañante, solo se dedico a buscar su ropa para salir de ahí lo más pronto posible.

Mientras se ponía las botas, el chico se giro aun dormido dejando ver su rostro, Andy quedo petrificada y sin tan siquiera saber que había tomado todas sus cosas salio de la habitación.

Bajo por las escaleras topandose con Yeji ya despierta, aun se miraba aturdida, seguro anoche también había tomado.

— ¿An?, ¿Qué haces aquí? — cuestiono la de cabello largo algo confundida.

— Yo... me quede dormida en el baño — mintió

— ¿De verdad? Juraba qué ya había hechado a todos — con su mano removió un poco su cabello

— ¡Bueno, adiós! — se apuro a decir para salir lo más rápido de ahí

— ¡Nos vemos en la escuela! — añadió Yeji antes de ver salir a la de cabello corto por la puerta principal.

Andy camino con dificultad hasta la parada donde anoche se había encontrado con Jisung para enviarle un mensaje a este mismo, no recordaba nada de lo que había pasado anoche, pequeñas manchas de colores pero todo lo demás estaba en blanco y negro, lo último antes de perder completamente la noción es que solo estaban ella y su amigo en la cocina tomando. Miro la hora, afortunadamente aun faltaban 40 minutos para entrar a clases, así que se apuro a llegar a su casa para alistarse.

— ¿Donde estabas? —. La voz de su madre se hizo presente en cuanto abrió la puerta de su casa.

— ¡Por dios mamá! Me asustaste... — replicó ella cerrando la puerta detrás de si.

— Te pregunte algo Andrómaca — dijo imponente y de manos cruzadas, estaba cambiada, así que Andy supuso qué iría a trabajar.

— Fui a una fiesta — respondio dándole la espalda yendo hacia las escaleras.

— Te ves terrible... — Andy se detuvo en seco al escucharla — ¿Dormiste con alguien? — pregunto la mayor haciendo qué la chica volteara rápidamente.

— No mamá, no tuve sexo con nadie — dijo con algo de molestia ante las palabras de su madre.

Se quedaron así por unos segundos, la madre de Andy la examinaba con su mirada mientras la menor solo esperaba a qué se fuera.

— Aun así hay pastillas en el botiquín por si necesitas, también hay analgésico para el dolor de cabeza — se dio la vuelta para irse  — Iré al trabajo, nos vemos en la noche — dijo sin más saliendo de la casa.

Red lights ;; Hwang Hyunjin [en proceso]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora