𝚃𝚊𝚕𝚔 𝚝𝚘 𝚖𝚎 [𝚃𝚛𝚘𝚕𝚊𝚛𝚍𝚢]

Cap 5: No tienes que ser un prodigio para ser único

Alejandro despertó habían dormido exactamente una hora los brazos de Sebastián lo tenían aprisionado en su pecho

Alejandro se dejó abrazar, iba estar un rato más o hasta que Sebastián se despertará

Pasaron unos 10 minutos y Sebastián despertó

-Hola- Dijo Alejandro mientras se levantaba ya que finalmente Sebastián le soltó

-Hola- Contestó Sebastián sentándose como si lo que acababan de hacer fuera algo de lo más normal siendo casi extraños

Alejandro se tiró en el piso al costado de la cama Sebastián se sentó a su lado

-¿Tienes hambre?- pregunto Sebastián mirando a Alejandro quien tenía la mirada perdida

Alejandro sonrió mientras soltaba una pequeña risa

-¿Tu tienes hambre?- Pregunto Alejandro aún riendo

Sebastián se puso un poco rojo ya que sabía que solo le había preguntado porque el tenía hambre y quería comer con el

Sebastián asintió suavemente y Alejandro prosiguió

-¿Vamos a comer?- Dijo Alejandro saliendo de su trance

Sebastián asintió suavemente aún levemente sonrojado

Alejandro sonrió

Ambos bajaron a cenar donde la mirada de los padres de Sebastián era poco discreta, son embargo a Alejandro no le importaba en absoluto

Sin embargo Sebastián estaba un poco incómodo ya que pensaba que a Alejandro le podría incomodar en cierto momento y decidiría ya no visitarle por aquella razón

Alejandro noto esto y le tomo la mano por debajo de la mesa

Para suerte de ambos los padres de Sebastián no lo notaron

Alejandro estaba tranquilo en la compañía de Sebastián, al terminar de comer volvieron a la habitación

Sebastián encendió la televisión más su atención estaba en Alejandro, lo veía sonreír de vez en cuando en algunas partes de aquel programa de televisión

Alejandro se volteo encontrando la mirada de Sebastián en el quien al notar que fue descubierto apartó la mirada

Se escuchó una leve risa por parte de Alejandro haciendo crecer el sonrojo en el rostro de Sebastián

Alejandro le abrazo dejando que la cabeza de Sebastián reposará sobre la suya

-No entiendo cómo lo haces . . .- Dijo Sebastián

-¿Hacer que?- Dijo Alejandro

-Como eres listo, a mí me cuesta mucho trabajo comprender, de hecho estoy repitiendo este año- Dijo Sebastián apenado

-De hecho me es bastante fácil, pero sabes . . . No tienes que ser un prodigio para ser único- Dijo Alejandro tranquilamente

Sebastián se sonrojo un poco más

-¿En serio no te importa? Es decir soy prácticamente un imbécil por reprobar- Dijo Sebastián tomando la mano de Alejandro

-El que repruebes una vez no define tu inteligencia- Dijo Alejandro mientras sonreía

Damn otro golpe en el enamoramiento de Sebastián ese amor seguía creciendo

Sebastián inconscientemente acarició la mano de Alejandro, haciendo que Alejandro tuviera un pequeño sonrojo

-Sebas, creo que ya debería irme . . .- Dijo Alejandro empuñando su mano la cual Sebastián aún sostenía

-Yo no quiero que te vayas- Dijo Sebastián tartamudo con un sonrojo de lo más notorio

-No quiero incomodar a tus padres- Dijo Alejandro igualmente

La madre de Sebastián "justamente pasaba por allí y lo escucho todo"

-No incómodas Alejandro, puedes quedarte aquí a dormir con Sebastián- Dijo la madre de Sebastián guiñando un ojo a Sebastián quien se sonrojo aún más sabiendo las intenciones de su madre

Sebastián fue a cerrar la puerta, ¿Que no se cansaban de ponerle nervioso?

Sebastián levanto a Alejandro sin mucho esfuerzo y le abrazo

En ese momento la diferencia de estatura era de lo más notoria

-Bájame- Dijo Alejandro intentando soltarse del agarre de Sebastián

Finalmente Sebastián le soltó quedando Alejandro y Sebastián rompiendo un poco sus espacios personales

El tiempo se paraba nuevamente con un sonrojo, quedaron a pocos centímetros de la boca del otro hasta que el padre de Sebastián irrumpió en la habitación

-Oye Sebas has visto mi–- Dijo el padre de Sebastián quedándose callado viendo la posición en la que estaban ambos chicos de 18 años

-Papá! Eh yo- Dijo Sebastián tartamudo

-Perdona no fue mi intención- Dijo el padre de Sebastián cerrando la puerta de golpe

Se escuchó un grito pero no de rabia si no más bien de emoción

Sebastián miro a Alejandro quien se tapaba la boca con un rojo fuerte

-Mejor vayamos a dormir- Dijo Sebastián apartando la mirada

Alejandro asintió suavemente

Sebastián tomo la mano de Alejandro y se lo llevó a la cama

-Me iré a la sala- Dijo Sebastián

Alejandro le tomo la mano a Sebastián antes de que se fuera

-No quiero estar solo- Dijo Alejandro

Sebastián se recostó en la cama con Alejandro dejando leves caricias de vez en cuando

Por suerte al día siguiente era viernes y la madre de Alejandro tuvo mucha razón al poner un uniforme y sus libros en la mochila sin que Alejandro se diera cuenta