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- Ran-niiii! - gritaba un pequeño adolescentes a su hermano quienes estaban de compras.
- ¿Qué pasa, bebé? - lo mira con una linda sonrisa.
- Quiero eso- apunta a una prenda algo compromete dora.
Ran ya se estaba imaginando las maravillosas cosas que haría con aquella prenda que su hermano le estaba pidiendo.
(...)
Estaban ambos Haitani de compras debido a que cierto chico caprichoso quería ir de compras con su hermano favorito y pues ahí los podemos ver, Ran siendo el cargador de las compras de su pequeño hermano caprichoso y quién se podía negar a los bellos encantos del menor cuando se trata de ir de compras.
Estaban pasando por el áreas de chicas cuando el Haitani menor vio justamente en esa sección algo que siempre había deseado pero le daba pena comprarlo, miraba a lo lejos la prenda y quería decirle a su hermano mayor que lo quería, dudaba bastante en decirle a su hermano ya que es un tremendo pervertido y está más que seguro que no durará mucho tiempo con esa comprometedora prenda.
- Ran-nii - voltea a ver a su hermano.
- ¿Qué pasa bebé? - se voltea a verlo y acariciarle una mejilla cuidadosamente.
- Quiero una prenda, pero no si sea una buena idea - mira hacia otro lado algo sonrojado.
- ¿Qué prenda es, pequeño? - sonríe dulcemente.
- Ven conmigo - lo toma de la mano llevándose a su hermano mayor a la sección de mujeres.
Ran solo veía como su pequeño hermano lo llevaba aquella sección ya imaginándote que prenda es la que quería su lindo hermanito, solo sonríe de lado mirando como es que llegaron a una prenda en específica, se veía que ya la tenía a la vista pero no quería decirle nada debido al miedo.
- Quiero esa, nii-san - señala un prenda púrpura con algunos detalles en dorado.
- Es muy bonita, Rin - le acaricia la cabeza suavemente.
- Lo sé, ¿Me la puedes comprar? - lo mira con un color carmesí en sus mejillas.
- Tómalo, bebé, yo te lo compraré - le da un pequeño beso en la mejilla viendo como el menor sonreía bastante feliz buscando su talla en las prendas.
Rin realmente estaba bastante emocionado, nunca había creído que su sueño de tener una de esas prendas comprometedoras se haría realidad, antes de poder ir a pagar se acercó a su hermano Ran dándole un pequeño beso en los labios agradeciéndole porque le compraría la prenda mostrando en sus bellos ojos violetas un brillo reluciente, a Ran se le hizo bastante tierna la escena robándole otro beso llevándolo a pagar la prenda antes de que se le ocurriera comprar más cosas de las que ya había comprado.
