One-shots Blue Lock

Sae Itoshi.

El silencio era algo a lo que te habías acostumbrado. Estar en una relación con Sae no siempre fue una conversación las 24 horas del día, los 7 días de la semana. A menudo era un ambiente tranquilo y reconfortante. Donde te encontrabas a gusto con la compañía de tu novio. Pero el silencio entre tú y él ahora era tenso. Tenso de que cualquiera que pasara por la habitación pudiera sentir la gruesa capa de inquietud.

No fue tu intención cerrarle la puerta en la cara. No quisiste lastimar su rostro perfecto... bueno, tal vez sí lo hiciste en serio. Pero nunca quisiste estar llorando por un chico. Un chico que no se preocupaba por ti, un chico al que no le importaba lo que tenías que decir. No te molestaba cuando empezaste a salir, pero ahora estas características te lastiman.

Sollozas en silencio en la esquina de la habitación, las comisuras de tus ojos se vuelven rojas por tu limpieza agresiva de lágrimas. Sabes que te está mirando, sus ojos están clavados en tu espalda pero lo ignoras. Cuando decides echar un pequeño vistazo por encima del hombro, lo miras detenidamente. Estaba mirando al techo, sus ojos verdes sin emociones. No te diste cuenta de que más lágrimas se deslizaron por tus mejillas. No te diste cuenta que te encontraste agarrando tu mochila para salir de la habitación.

Pero te diste cuenta cuando una mano salió a agarrar la tuya. Su mano más grande envuelve la tuya y sus ojos se encuentran con los tuyos. Intentas hacer que te siente , pero no tiene sentido.

"Déjame ir"

"No"

"¿Que dices?, sueltame itoshi"

Al escuchar su apellido, su corazón se rompe.

"T/n.."

"No, sueltame Itoshi, antes que el moreton empeore" dices bruscamente.

"No soy Itoshi para ti" resopla

"Si eres itoshi, no mereces que te llame con tu nombre, nomas me refiero a las personas con su nombre cuando se preocupan por mi y ponen atención en mis temas de conversación."

El no responde. Sus ojos sin emociones se encuentran con los tuyos.

¡Oh, finalmente lo entiendo! ¡Cuando se trata de fútbol y tu ego engreído, inmediatamente tienes las respuestas! Pero cuando se trata de cosas simples relacionadas con la vida humana, te quedas sin palabras"

Finalmente sacas tu mano de la suya, la ira te llena. Sus tonos verdes se clavan en los tuyos, la tristeza se arremolina en él de repente por tu estallido.

"Dije lo de antes por que me preocupo por ti... Sae, no es para desanimarte, el fútbol no lo es todo, y pense..." dijiste apartando la mirada con tristeza

"Olvidalo"

"T/n espera"

Sabes que amas a ese chico, y te detienes.

"Sé que cuando me dijiste que me relajara era por cuidado, pero yo-"

"¿Pero yo qué? Simplemente no quieres que te digan nada que no te parezca correcto"

"Eso no es cierto"

"Mira, tal vez deberiamos-"

"No quiero perderte" frunces el ceño y suspiras ruidosamente en el aire.

"Lo siento... Fui un idiota y no debí haber gritado y actuado como lo hice y por favor, no quiero perderte".

Sonríes dócilmente y tomas sus manos. Te tira a sus brazos. Tu cabeza metida debajo de su barbilla, sus dedos frotan tu cabeza con cariño.

"Me importa lo que tengas que decir t/n"

"Está bien. ¿Lo prometes?"

"Promesa"

Se inclina para besarte lentamente, sus labios moviéndose contra los tuyos en un ritmo suave. Y cuando se aleja, no puedes evitar reírte "Lo siento por ese moretón"