Mitsuki no entendió muy bien cómo había terminado con su lengua completamente dentro del trasero de su compañero de equipo pero no iba a cuestionar las bendiciones del universo.
Porque estar así, con la persona que más apreciaba en el mundo era un sueño hecho realidad. Estaban ocultos detrás de un frondoso árbol, habían ido a ese lugar para entrenar más cómodamente pero una cosa llevo a la otra y comenzaron los roces, luego caricias y, por último, los besos cargados de deseo, un deseo que los llevo a parar semidesnudos en un campo de entretenimiento, uno bastante alejado de la gente, pero un lugar público a fin de cuentas.
Tenía a su compañero en una posición conocida como 69 y podía sentir como su Sol hacia lo posible para satisfacerlo pero lo más que podía eran algunas lamidas débiles, debido a la gran cantidad de placer que la larga lengua de su Luna le provocaba.
Solo podía pensar en que quería más sensaciones, más placer, quería verlo destruido.
Así que, le indico a que se parará y este lo hizo, sin antes soltar un gemido de insatisfacción, era un gran amante de las mamadas y no había nada que le gustara más que ver y sentir a su compañero sucumbir por el placer que le generaba, pero podían hacer eso más tarde, ahora Mitsuki quería algo más.
Guió a su compañero a una posición más cómoda en el suelo duro y sucio y lleno de pasto del campo de entrenamiento, - con sus caderas hacia arriba y su torso hacia el suelo, sus manos a un lado de su cabeza, dando soporte a su cuello- su compañero era una visión completamente erotica, con la boca ligeramente roja, su cabello desparramado por el suelo y sus ojos, que lo miraban expectantes, sus ojos llenos de deseo y amor, que exigían que su amante continue y le de el placer que ambos anhelan.
Admiro por unos segundos más hasta que sus Sol comenzó a impacientarse, no podía evitarlo, quería grabar en su memoria para siempre la vista tan perfecta que tenía en frente, fue ahí que comenzó a entrar dentro de su amado, viendo fijamente como su rostro cambiaba a medida que entraba, y cuando por fin estuvieron unidos, dieron un pequeño suspiro, la calma antes de la tormenta.
Son jóvenes que viven en constante peligro, cada momento es extremadamente valioso y así también lo es, cada vez que hacen el amor, no importa cómo, ni dónde, porque en cada encuentro hay amor, uno que los lleva a probar cada vez más de si mismos.
(ustedes no saben lo mucho que odio la frase "hacer el amor" pero la ptm no había otra manera de llamarlo 😭😭💔)
Bueno, quiero entregar, ndeah, este pequeño drabble picante jsjsjajs seguro habrá más y mejores en el futuro
En este fic tienen como 17-18
