Yo era feliz, o eso creo recordar. Vivía en un pequeño pueblo a gusto con mi familia, tenía una hermana mayor y dos padres que me querían. La vida era tranquila, se podía decir que éramos de clase media, no nos sobraban los recursos pero tampoco nos faltaban, nuestros vecinos se portaban bien con nosotros, vivíamos en una comunidad en la que todos se ayudaban mutuamente, era una montaña hermosa donde habían riachuelos a los que ir a pasar el rato. Podría decirse que era parecido a un paraíso por la calma que había, la paz que se respiraba en el ambiente. Sin embargo, a temprana edad aprendí que la felicidad no suele durar mucho, al menos así fue en mi caso, otra lección que me dieron a la vez fue que los que más sufren son los que menos lo merecen. El caso es que una noche mientras todos dormían tranquilos, se oyeron gritos por todo el valle alarmándonos, nos asomamos por la ventana viendo dos cuerpos ya sin vida salir volando de una de las casas acompañados por una especie de monstruo caminando. Mi hermana me encerró en un armario, me susurró algo que no llegué a entender, me besó en la frente y se fue. Nunca más volví a verla. Cuando ya había pasado todo, el silencio se hizo, recuerdo ver todo oscuro hasta que alguien abrió la puerta del lugar donde yo estaba, un señor con una máscara tengu me sacó de allí, yo solo me dejé llevar ya que al parecer desde que me cogió en brazos yo me desmayé.
Después de todo lo que había pasado, perdiendo a mi familia, a mi querida hermana quien me protegió como pudo de los demonios, aquel hombre que me salvó, me acogió. Urokodaki Sakonji, se convirtió en mi mentor, seguía con su máscara tengu roja rara, con nariz grande, una vez mi amigo y yo se la quitamos, se enfadó montón porque tenía cara de buena persona y él quería aparentar ser serio y estricto. Él me ha estado enseñando la respiración del agua, además de todo lo que tiene que ver con los demonios, debilidades, fortalezas, absolutamente todo, siempre me demuestra lo orgulloso que está de mí ya que me dice que la he dominado en poco tiempo, no sé si es verdad pero ha sido mi figura paterna en los años que han continuado y le estoy eternamente agradecido. Entrenaba en el monte con mi mejor amigo Sabito, era un chico pelinaranja, con ojos amables de color entre grises y lilas claro, destacaba una gran cicatriz que tenía en el lado derecho de su cara, aunque no por eso dejaba de sonreír, su sonrisa era cálida y fraternal, perdí una hermana pero la vida me dio un hermano. Nos pasábamos el día entero intentando mejorar, él era algo mayor que yo aunque siempre nos llevamos bien, era un referente para mí ya que según mi criterio él era mucho mejor espadachín que yo, entonces él y Urokodaki-san se convirtieron en mi nueva familia.
El entrenamiento que hacíamos era algo duro, teníamos que volvernos uno con el agua, bajar la montaña llena de trampas que cada vez iban cambiando, todo esto sumado a llevar en cima una katana, repetir lo mismo una y otra vez durante montón de años era lo que nos tocaba si queríamos llegar a ser cazadores. De vez en cuando hacíamos duelos con el maestro aunque él usaba una katana de madera por si a caso, obviamente sus habilidades estaban por en cima por lo que no quería tener ningún descuido provocado, seguramente, por nuestra culpa. El sueño de Sabito era llegar a ser el mejore hashira de respiración de agua y así se convirtió en mi meta seguir sus pasos, a pesar de que pensábamos que solo tenían permitido a un pilar de cada elemento, usábamos esa excusa para tener una rivalidad positiva entre nosotros. Era bastante divertido cuando tocaba ejercitarnos juntos en vez de individualmente, el próximo objetivo que nos habíamos propuesto era pasar la prueba para acceder al cuerpo de cazadores de demonios. Esta consistía en sobrevivir 7 noches en la Montaña Fujikasane la cual estaba infestada de demonios que se encontraban atrapados ya que el monte estaba rodeado de flores de glicina, que son venenosas para ellos.
De nuevo mi falsa felicidad duró poco, el día de la prueba, Sabito se fue ilusionado prometiendo volver pronto, creía estar preparado. Nunca volvió. Urokodaki me mencionó que existía un demonio en aquella montaña bastante peligroso que él había encerrado y que de dedicaba a matar, entre otras personas, a alumnos suyos como si fuera una especie de venganza por haber sido él, el culpable de su cautiverio, me prohibió participar a pesar de que estuviera listo para superar la prueba. Nunca fui de desobedecer las palabras de mis mayores pero me agarré a la rabia que sentía partiendo a la prueba esperando encontrarme con aquel maldito que mató a mi mejor amigo, para mi desgracia no pude hallarlo. Solamente me llevé de aquella apestosa montaña su haori, el cual si pude divisar y recoger antes de que nadie más pudiera hacerlo, a partir de ese día entré en el cuerpo de exterminio de demonios demonios, llevando mitad del haori de mi hermana mayor, este lo había cogido mi maestro cuando ocurrió aquel accidente al verla en la habitación en donde yo estaba, y la otra mitad del de Sabito. Había superado la prueba. Cuando volví Urokodaki me abrazó fuertemente, al día siguiente comenzaría mi aventura como matademonios.
No merecía esto en realidad, no debería de ser yo el que estuviera aquí en esta posición. Vivo. Este objetivo pertenecía a Sabito, no a mí, por esa razón mi actitud cambió ante todo, me sentía vacío, despreciable incluso, no tenía ningún motivo para sonreír así que no lo hacía, simplemente seguía adelante para intentar honrar a las personas que habían perecido por mi culpa y proteger a los inocentes que no merecían ser devorados por esos monstruos, en el fondo sé que eso es lo que me habrían pedido mis seres queridos antes de partir si hubiesen tenido el tiempo para despedirse.
Así fue que en poco tiempo terminé convirtiéndome yo mismo en el pilar del agua.
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¡Holaaa! Bueno siento el rollo, los dos primeros capítulos se van a basar en esto, es decir, el pasado o comienzo de cada uno, como lo queráis decir.Prometo que después se pone más interesante, o eso espero. Espero que esté bien escrita porque hace mucho que la tengo en borradores y no sé...🥲
Pido respeto ante todos los ships por favor, si no te gusta no lo critiques.
Un abrazo enorme para todos, siento haber estado inactiva, hasta la próximaaa💖💖💖