nòicarepseseD

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Namjoon

Llevaba toda la semana masajeando o tocando mi muñeca derecha, me sentía raro, incómodo, al no tener la pesada muñeca

_Te pasa algo? -me pregunta Hwasa mirándome a los ojos-

_Discutí otra vez con Jin -digo echando mi cabeza hacia atrás- ésta vez creo que le he cagado de verdad -digo poniendo mis manos en mi cara-

_Bueno... Siempre discutis, ya estará acostumbrado

_No... Ésta vez debo arreglarlo -digo poniéndome de pie y yendo a la sala dónde vi por última vez a Jin-

Cuando entré pisé una de las cuentas las cuales casi me hacen resbalar, me agacho y recojo todas las que veo y cerrando los ojos con fuerza llamo a Jungkook

_Jungkook! -chillo-

_Me ha llamado señor? -me pregunta a los segundos-

_¿Dónde está Seokjin? -pregunto acercándome a él-

_Se fue -dijo simple-

_A dónde? -pregunto extrañado-

_Se fue hace unos 4 o 5 días a las clases para donceles, ¿No le avisó?

_Puede que lo hiciera, pero lo más seguro es que estuviera ocupado

_Sí, cómo siempre... Si eso era todo, me retiro -dice pero le agarro suavemente del brazo-

_¿Sabes cuando va a volver? -digo soltandole el brazo sin agresividad-

_Dijo que durante 1 o 2 dos semanas, aunque no era seguro

_Vale gracias, y Jungkook -lo vuelvo a llamar- Crees que tenga solución -digo mostrándole las bolas de la pulsera, estando algunas rotas-

Jungkook se acerca y observa tocando con la llena de los dedos algunas de ellas

_Lo dudo mucho, éstas cuentas son de madera de roble echa a mano, y los colores solo se encuentran por Europa, podríamos intentarlo pero seguramente solo la empeoraríamos más

-Vale, gracias puedes retirarte -digo para sentarme en una silla recordando el día en que me la regaló-

Las pequeñas manos de Jin estaban llenas de pequeñas tiritas (curitas), en algunos casos se le podía ver las heridas y pequeñas gotas de pintura en su ropa. Me mostró la pulsera, la cual te tenías que fijar dos veces para ver que estaba hecha a mano. Valoré el tiempo y el dolor que tuvo que pasar Jin más que la belleza de ésta. Me maldecí una y otra vez por haberle dicho eso a Jin y con angustia en mi cuerpo mandé a toda la guardia real que lo buscaran y que lo trajesen ante mí

Doncel -Namjin-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora