Lazos del destino

Capitulo 19: Confesiones pt1

*Narradora*
Kai se acomodo de una manera en la que ambas chicas pudieran dormir plácidamente y antes de caer dormido, le dió una última mirada al cielo que estaba decorado por millones de estrellas. Durante la noche, el enorme y peludo cuerpo de Kai fue cambiando hasta volver a su forma humana. Al día siguiente, Moroha había Sido la primera en despertar y miró en donde estaba dormida y no pudo evitar sonrojarse: Kai había vuelto a la normalidad, sin embargo, Moroha pudo notar todas las heridas que tenía el chico así que con cuidado tomó a la pequeña Karim entre sus brazos, usó su capa para crear una cangurera y ahí la puso para luego tratar de levantar a Kai.

Kai: (despertando) Ahh ¿Q-que pasa? ¿¡Y Karim!?

Moroha: L-lo siento solo quería ayudar a levantarte para curar tus heridas y no te preocupes, Karim está aquí.

Moroha le enseñó como seguía durmiendo la pequeña en la capa de ella así que Kai sonrió con dulzura pero cuando trató de levantarse, todo su cuerpo le dolía bastante y entonces terminó cayéndose así que no hubo de otra y la chica lo ayudo. Al dar las 12, Karim ya se había levantado y tenía mucha hambre así que Moroha llamó a sus primas y a su guardaespaldas para que les ayudarán en traer comida. Al cabo de media hora, las dos gemelas llegaron a "la guarida" en compañía de el guardia de Moroha que llevaba 3 enormes cajas.

Moroha: Towa, Setsuna!

T/S: Moroha!

Ambas se dieron un abrazo fuerte mientras que unos lobos las rodearon, asustando así a las gemelas pero el silbido de Kai los tranquilizó; toda la tarde se la pasaron trabajando en como podrían sobrevivir en la guarida hasta que "la marea se calmará" pues sabían que ir a casa en esos días significaría regaños peligrosos. Al cabo de unos 2 días, ya estaban equilibrados y hasta parecían ya tener una vida independiente pues tenía todo controlado pero un día tranquilo habían llegado Riku y Hisui con la intención de ayudar.

Kai: Pero si son ustedes, que alegría, adelante pasen.

Riku: Gracias amigo. trajimos un poco más de comida y ropa para tu pequeña prima 

Hisui: Si, además pudimos traer postres para que los comamos de una vez 

Todos ordenaron la mesa que tenían y cada quien agarró un postre para cada quién, pasaron la tarde con risas y bromas con cada una de las parejas que estaban presentes hasta que llegó la noche y durmieron en habitación y en parejas. En una de esas habitaciones estaban Moroha y Kai, alistándose para dormir con tranquilidad; cuando se "durmieron" Kai se despertó y se volteó para ver como dormía plácidamente la cuarta demonio , a lo que sonrió suavemente y se acercó más a ella, haciendo que durmiesen abrazados. Al día siguiente, unos golpes en la puerta levantaron a todos y entonces los chicos decidieron bajar para tratar de ver quien tocaba la puerta con brusquedad pero quedaron paralizados cuando vieron a sus padres a las afueras de la guarida así que subieron rápidamente y les avisaron a las chicas, quienes no tardaron en cambiarse.

Setsuna: Moroha, tú decides si salimos ahora y ver que pasa o escaparnos.

Towa: Cualquier cosa que hagamos nos llevará a lo mismo sinceramente pero...

Riku: Si nos apoyamos nos irá bien ¿no lo creen?

Kai: Así es, por mi parte no me importa que ocurra.

Moroha: *suspiro* Esta bien, Kamisama ahí te voy de nuevo 

Lo último causo risas en los demás así que con valentía Kai abrió la puerta encontrándose con lo que a alguien normal lo mataría de miedo; Sesshomaru, Kirinmaru e Inuyasha mantenían una mirada tan fría hacia el grupo de amigos pero ellos los confrontaron, una batalla de miradas.