Capitulo 18-Confesiones Bajo La Lluvia (Parte II)

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Hera

—¿Cómo fue que decidiste entrar a Woodrow?—Pregunta Hades, mientras toma un sorbo de chocolate. 

—Para tener un mejor futuro, pero sobre todo para darle uno a mi hermana—Contesto hacia él, con una sonrisa. 

—Comprendo, ¿Cómo se llama tu hermana?

—Se llama Hannah, tiene 6 años—Contesto, mientras tomo un sorbo más de chocolate caliente para luego dejarlo en el piso.

—Tiene un lindo nombre al igual que el tuyo—Comenta Hades con una ligera sonrisa, haciendo que me ruborice un poco.

¡Qué linda sonrisa tiene!

¡Hera compórtate!

—Tú también tienes un nombre bastante original al igual que Atenea.

—Los nombres vienen de familia, hablando de Atenea ¿Cómo conociste a ella?—Comenta Hades, mientras gira en su lugar para quedar enfrente mío. 

—Ella es mi compañera de cuarto, luego ambas comenzamos a hablar y nos dimos cuenta que tenemos varias cosas en común, asi que ahora somos amigas muy parlanchinas—Comento hacia Hades, recordando como nos conocimos. 

Atenea es una gran persona...

—Si, mi hermana habla mucho más que yo—Comenta con una risa.

Hades se queda pensando por unos momentos y continua hablando.

—Cuando estábamos pequeños, siempre le preguntaba ¿Dónde esta tu botón de apagado? Si crees que ahora habla más, no tienes idea de como era de pequeña—Ambos reímos ante el comentario.

—Si me imagino, pero por lo menos no te aburrías—Comento con tono de risa.

—Si, en eso tienes razón—El rie.

—Una vez Atenea quería jugar a la mosquetera y necesitaba al villano, asi que ella me hizo un disfraz de un pulpo gigante color negro con ojos rojos. Al principio, no quería ponerme ese disfraz, pero ella me convenció y asi que lo hice. Claro, ella gano la pelea contra el pulpo y a mi se me cayo un diente—Comenta Hades con una gran risa. 

—¡No lo puedo creer! Atenea es muy traviesa—Respondo con tono de risa.

¡Cuanto daría por ver una foto de ellos dos disfrazados!

—Ella de pequeña decía que quería ser presidenta, usar un traje color rosa con brillos y haría una ley en donde los estudiantes solo fueran 1 día al año a la escuela—Comenta él. 

—¡No lo puedo creer! Me hubiera encantado esa ley, es más yo hubiera votado por ella—Comento riéndome. 

¡Todos aclamen si no amarían esa ley!

¡No Hera no fomentes la mala educación!

Aunque suene bien, tenemos que ir a la escuela, si o si.

—Si, entre mis primos y amigos le hicimos su campaña publicitaria, usamos cartulina y crayola en ese momento—Dice Hades, mientras se ríe. 

—Deberíamos de parar, ambos estamos llorando de la risa—Comento, mientras me limpio una lágrima de mis ojos a causa de la risa.

 —Tenia mucho tiempo que no me reía asi—Dice Hades. 

—También yo—Respondo.

Ambos nos tranquilizamos un momento después de este gran ataque de risa, gracias a los recuerdos de su infancia.

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