Capitulo 53-Decisiones Del Corazón

9 2 6
                                    


Hera

—El siempre pedía lo mismo de siempre—Sonrie—Una hamburguesa hawaiana con mucha piña y una malteada de chocolate, era su comida favorita—Comenta mi tía con una sonrisa y mirada perdida.

—¿Y que más paso?—Pregunto intrigada con la historia.

—Las primeras veces que nos vimos, no hablamos, solo me limitaba a hacer mi trabajo, ya sabes, llevar la comida a la mesa—Dice mi tía mientras cruza sus piernas sobre la arena.

Asiento con la cabeza.

—Un día salí del trabajo y estaba demasiada cansada, así que decidí ir por el camino corto—Expresa mi tía, mientras apoya sus manos sobre sus piernas.

Ahora entiendo por dónde va esto...

—Iba caminando por la calle, hasta que vi una sombra por el reflejo del piso y acelere más el paso—Dice mi tía con voz temerosa.

Entiendo perfectamente esa sensación, por qué no es la única que lo ha vivido.

¡Cuídense, por favor!

—A medida que aceleraba el paso, la sombra se acercaba más a mí, tenía demasiado miedo—Pausa—Es un sentimiento que nunca debería de pasar nadie, pero en el momento menos esperado apareció mi Ángel.

Puedo observar como cambia el semblante de mi tía a una sensación de alivio y tranquilidad.

—Guillermo se acercó a mi lado y comenzó a platicar conmigo, al principio no entendía que estaba pasando hasta que vi a la sombra alejarse de nosotros.

Guillermo salvo a mi tía...

—Ambos nos detuvimos a unos pasos de llegar a mi casa y fue cuando él me explico todo lo sucedido—Mi tía acomoda un mechón de cabello atrás de su oreja—El me acompaño hasta la casa, para que dejarán de seguirme y desde ese día siempre me acompaño cada noche.

Al escuchar esas palabras, hace que miles de preguntas vengan a mi cabeza pero en especial una.

¿Cómo fue que Guillermo paso de ser esa persona que menciona mi tía, a hacer la persona que es hoy en día?

Tal vez solo había una respuesta para todo esto...

Thomas Wilson Woodrow

—Pero, si te acompañaba ¿Cómo no lo noto mi mamá y abuela?—Pregunto con voz suave.

—Siempre me dejaba una esquina antes y en cuanto entraba a la casa, el se iba—Responde a mi pregunta.

—Entiendo—Asiento con la cabeza.

—Nos fuimos conociendo a medida que pasaba el tiempo pero jamás nos dijimos nuestros apellidos, solamente éramos amigos, pero...—Mi tía ríe a medida que va contando su historia.

—¿Por qué te ríes?—Comento con una ligera risa de nerviosismo.

¿Ahora de que nos reímos?

—Paso algo similar a lo tuyo, solo que con unos ligeros cambios—Ella ríe abiertamente—Nos besamos en un callejón, estaba lloviendo y después de eso, no te puedo contar que más paso—Expresa mi tía riendo más fuerte.

¡¡Triple OMG!!

¿Esta es mi tía? ¡¿Están seguros?!

¡¡Guillermo pudo haber sido mi tío!!

—¡Esa es mucha información para mí pobre ser!—Formo una "O" con mi boca—¡OMG! ¿Guillermo? ¿El instructor Guillermo?—Grito como loca mientras me levanto de la arena.

WOODROWDonde viven las historias. Descúbrelo ahora