Capítulo 1 - Belleza color morado

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«Cayó el crepúsculo: el cielo se tornó de un púrpura claro y oscuro, lleno de diminutas estrellas plateadas». 
J. K. Rowling.

El tiempo pasaba mientras observaba con cuidado el lugar en donde se encontraba, frente a él un gran lago lleno de Lotos hacían presencia en el hermoso paisaje. Habían pasado ya cerca de cuatro o cinco años desde que su denominado maestro lo arrojó al llamado Abismo sin fin, sin dejar que se justificara o hablara acerca de su gran secreto de ser del linaje demoníaco.

Probablemente lo que más le dolió en ese momento es el cómo durante años fue el discípulo favorito y de repente sin aviso fue desechado cuando ya no era necesario. A pesar de los años pasados, se negaba a creer que simplemente era un objeto y que su Shizun, Shen Qingqiu probablemente guardaba dentro de él un poco de remordimiento.

Por el momento, simplemente se encontraba viendo y disfrutando un poco de tranquilidad antes de pensar en lo que iba a hacer, había estado cuestionando durante mucho tiempo si debía de regresar a la secta de la montaña Cang Qiong, ya que no sabía si sería bienvenido ahí después de que lo más probable es que su maestro haya revelado su identidad a toda la secta.

Tenía tanto tiempo en el mundo demoníaco que no se había dado cuenta de cómo extrañaba lo que ahora estaba en sus manos. Pronto se encontró caminando por las tan transitadas calles, había un gran bullicio, gritos, niños jugando y por lo que podía verse el pueblo estaba custodiado por una secta de la cual en sus tiempos de discípulo nunca logró escuchar, la llamada secta se denominaba Yummeng Jiang.

Antes de adentrarse más al pueblo decidió camuflar totalmente su esencia demoníaca, por el momento esperaba no ser detectado y tal vez disfrutar un momento de paz antes de que tuviera que enfrentarse a su shizun. Se dio cuenta que la secta que custodiaba estaba totalmente vestida de colores morados y que por lo que parecía y había escuchado es uno de los únicos clanes que tiene totalmente abiertas sus puertas a las personas.

Luo Binghe siendo ya un completo maestro en reconocer las mentiras y saber manipular después de los años de entrenamiento dentro del abismo se decidió a preguntar acerca de su ubicación exacta y la forma de llegar al que era su destino final.

—Disculpe me podría decir cuál es el camino a seguir para llegar a la secta Cang Qiong

El vendedor ambulante lo miro y con seguridad le dijo:

—No creo haber escuchado nunca acerca de esa secta, joven maestro ¿es alguna secta menor?

Luo Binghe con asombro analizó al vendedor para saber si sus palabras eran verdad o no, pero se veía que aquel decía la verdad. Lo que lo hizo preguntarse en dónde exactamente se encontraba, tal vez era un territorio del que no se tenían registros o algo parecido. Por lo cual negó en respuesta.

—Con que es así, podría ir a preguntar a alguno de los discípulos del clan Yummeng. Ellos sin duda han de conocer acerca de ella.

Luo Binghe continuó merodeando las calles, pero después de un largo tiempo y de haber recibido un par de respuestas negativas acerca de la existencia de Can Qiong decidió retirarse del lugar. Se dirigió a un bosque cercano estando ya un poco alejado de ese lugar sintió las intenciones de Xin Mo, constantemente ella le pedía sangre de personas para poder contener sus intenciones. Era totalmente estresante en ocasiones pero gracias a ella había podido sobrevivir durante largo tiempo por lo cual la guardaría, le podía ser útil en algún momento.

El cielo pronto comenzó a oscurecer dando lugar a una vista cautivante, aunque no más que la que anteriormente vio. En algún momento sintió la presencia de múltiples personas y con ella una gran intensidad demoníaca que solo había sentido en el abismo, y aunque con duda se dirigió al punto en donde sentía aquello.

Al llegar pudo observar a distintos discípulos que vestían las mismas túnicas moradas de la secta que dejó atrás. Y pronto vio a aquella figura que en alguna ocasión se enfrentó en el abismo, el llamado Gorila Venenoso Solar¹ aquel ser era uno de gran calibre el cual no dudaba a matar a cualquiera que se le atravesara y por su nombre igual era venenoso.

Al ver a aquella criatura decidió ir a enfrentarse directamente a ella, pero antes de que pudiera dar un paso vio cómo rápidamente llegaba una persona montando una espada aquella figura parecía ser imponente aunque claramente inferior a él. Rápidamente sin voltear a ver a nadie más que la bestia frente a el ordeno con una voz amarga y fría.

— Aléjense rápidamente de aquí, no quiero muertes innecesarias, avísenle a Jiang Meng— Todos los discípulos presentes dejaron salir un gran suspiro —No me di a entender, ¡Lárguense, o les romperé las piernas!

Pronto todos los presentes se fueron con sus espadas al lado de donde había venido aquella persona misteriosa que parecía ser algún superior de los discípulos. El joven vestido de violeta se acercó con pasos seguros, su túnica jianxiu² fluyó suavemente y su mano presionó la empuñadura de su espada. Volteo a ver a Binghe con una mirada rápida la cual hizo contacto con su mirada, pareció escanearlo para luego desviar la mirada nuevamente y proponerse acabar con lo que tenía de frente.

—Será mejor que te vayas si no quieres terminar muerto

Fue la oración que dijo para posteriormente ir a la lucha la cual era sin duda caótica aquel joven parecía tener un gran cultivo, envainó su espada con firmeza y seguridad mientras buscaba acabar los antes posible su trabajo. Sus movimientos eran elegantes, en algún momento aquello le recordó a Shen Qingqiu, pero la fuerza era brutal, sanguinaria y cautivante.

Decidió unirse a aquella persona para facilitar el trabajo y además porque Xin Mo necesitaba consumir al menos una poca de sangre para poder controlarla. El joven que ya luchaba resopló mientras seguía con lo suyo. A pesar de aquello lo dejo unirse a él.

Ambos supieron coordinarse de manera extraordinaria, luchaban ferozmente, intercalando golpes para acabar lo más rápido posible. Pronto aquella persona desprendió de su mano derecha una segunda arma espiritual, un látigo violeta de gran calibre y con ambas armas continuó con su lucha.

El color morado contrastaba con el rojo y negro, ambos luchando.

—Su debilidad es el cerebro, un golpe lo demasiado profundo hará que acabemos con él.

Dijo mientras seguían luchando, el otro simplemente hizo un sonido con su boca para decir que escucho lo que dijo. Y después de algunos minutos más ambos pudieron dar el golpe final y derrotar a la bestia.

Ambos estaban jadeando y la persona con la que había luchado lo analizaba con duda.

—Jiang Wanyin, ¿tu?

Bruscamente salieron esas palabras de su boca, Binghe lo observó dudando si en verdad decir su nombre o inventar alguno pero al parecer nadie lo conocía por lo que opto por decir la verdad, relamiéndose los labios para después decir:

—Luo Binghe

***

¹ Gorila Venenoso Solar: Perdón, sinceramente no sabia que nombre poner y me guie en el nombre del rinoceronte que debía aparecer cuando Luo Binghe es aventado en el abismo sin fin.

² Jianxiu: Este es un tipo de ropa con mangas que son más anchas en el hombro y se vuelve bastante estrecha cuando llega a la muñeca.

Este seria el primer capitulo. En el transcurso de la semana subiría el segundo capitulo (solo me falta editarlo), espero les haya gustado. 

Gracias por darle una oportunidad a este fanfic n.n

Violeta Carmín  - LuoChengDonde viven las historias. Descúbrelo ahora