Capítulo 2 - Revelación carmín

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"El rojo brillante era el color del sacrificio de sangre, así como un símbolo del mismo pecado por el cual se suponía que el sacrificio debía expiar".

- Amy Butler Greenfield.

No confíes en sus palabras

Te va a utilizar

Te desechará

Mátalo, mátalo, mátalo

La presencia de Xin Mo era abrumadora, los pensamientos no se detenían. Pero no podía culpar completamente a la espada, probablemente aquella tenía razón y aquel cultivador que a su lado lucho en cualquier momento podía traicionarlo por la espalda nuevamente.

Se encontraba parado observando a aquella persona con la cual anteriormente pudo alinearse a la perfección, sin embargo las intenciones de su espada no hacían más que irritarlo y aquel dolor de cabeza tan frecuente desde que fue lanzado a aquel abismo se hace nuevamente presente. Probablemente ella tenía razón y aquella persona solo iba a ocuparlo, utilizarlo, probablemente si mataba a aquel cultivador las palabras se irían y la intención de matar se esfumaría con ella.

Pero antes de que pudiera hacer un movimiento sintió nuevamente energía demoníaca, parecía ser como si un nuevo abismo se hubiera abierto y nadie estuviera enterado. Algo impactante, no había tenido noticias de algo parecido y ni Mobei-jun ni Sha Hualing había intentado comunicarse con él en todo este tiempo.

Pudo ver cómo el nombrado Jiang Wanyin igual sintió la gran presencia ya que automáticamente su cuerpo se tenso mostrando conmoción y duda en su rostro, mientras que miraba hacia el punto en donde se acumulaba aquella energía.

¿Era acaso posible que las bestias y demás demonios que solo dentro del abismo sin fin había visto también se encontrarán aquí?

Sin más preámbulos la persona a su lado se dirigió rápidamente al lugar de dónde provenía la energía, él lo siguió a unos pasos de distancia. Cuando llegaron al lugar pudo ver otra nueva criatura parecida a la que minutos antes habían derrotado.

Casi como si fuera un acuerdo tácito ambos se dispararon a luchar juntos nuevamente ahora la pelea fue corta pero no menos impactante que la anterior, ambos lucharon con sus armas pero con movimientos más precisos.

"¿Qué son estas criaturas? Nunca las había visto". Pregunta Jiang Wanyin mientras mira con incertidumbre al cadáver de lo que acaban de matar. "Impresionante"

"¿Nunca las habías visto?". Pregunta con el fin de afirmar la respuesta.

"¿No es acaso lo que acabo de decir?". Jiang WanYin se gira para observar mientras levanta una ceja, su respuesta es totalmente sarcástica y con un tinte de ser burlona.

¿Qué le sucede a esta persona?

Acaso valora tan poco su vida como para faltar el respeto a la primera persona que ve, ha matado a personas y demonios por menos que eso. Sus pensamientos se ven interrumpidos por la llegada de una persona montando una espada a una velocidad impresionante.

"Lider Jiang". Habla casi al mismo instante en el que aterrizó, hace una reverencia y con eso se da cuenta que la persona con la que estuvo combatiendo es un líder de una secta, automáticamente voltea su rostro al contrario.

Aquella persona puede tener la elegancia y el porte de un líder, pero sin duda alguna su temperamento, modales y edad no están de acuerdo a su puesto. Parece ser de una edad similar a la de él.

"Habla". Es firme y contundente al hablar, no dice más palabras de las necesarias y su tono es frío y distante. Casi parece ser similar al de su Shizun antes de su desviación de Qi.

"Se han registrado alrededor más ataques de criaturas que desconocemos, múltiples discípulos se han dirigido a su encuentro"

Era un hecho que probablemente un nuevo abismo o portal se había abierto. Tal vez lo más sensato era irse y dejar que aquellas personas solucionaran el problema pero el aura de la persona era tan atrayente y parecida a la de su maestro por lo que de alguna manera sentía la necesidad de quedarse más tiempo y observar el desarrollo de la situación.

Con curiosidad y dando una sonrisa irónica Luo Binghe habló:

"Podría tener este estimado líder de secta la respuesta".

Aquel discípulo y Jiang Wanyin voltearon su mirada hacia Binghe. A pesar de tener las dos miradas sobre él, conocía su fuerza y poder, sin duda alguna era capaz de derrotar a ambos en un parpadeo pero se encontraba intrigado hacia la persona y el porque las criaturas del reino demoníaco se encontraban en este lugar.

Por esa razón es que ahora hallaba un poco entretenido el escenario en donde se encontraba, quería saber cual sería el actuar de esta persona. No le interesaba demasiado faltar el respeto a aquel líder.

"¿Quien exactamente eres tú?". Pregunto observando con detenimiento. "¿Cómo es que sabías la debilidad de aquellas cosas?". A pesar de que se veía la incertidumbre en su rostro, Jiang Wanyin levantó la barbilla mirando con altanería. El otro discípulo se encontraba petrificado mirando a Binghe con una mirada de lástima.

"Un simple cultivador errante, en respuesta a lo segundo es por libros, con un poco de lectura sabrías la respuesta."

Jiang Wanyin habló sombríamente:

"No te mataré por el simple hecho de que me fuiste de ayuda, ¡ahora vete!"

Jiang Wanyin claramente estaba lleno de ira, cómo era posible que ahora no solo la secta Nie, Lan y Jin le faltara el respeto si no que ahora también los cultivadores errantes. Él entrecerró los ojos, su mano izquierda acariciando casualmente el anillo en el dedo índice de su mano derecha.

El discípulo a su lado a pesar de ya estar acostumbrado a ello aun así sabía que aquella era una señal peligrosa. La mayor parte de cultivadores sabían que el anillo era un arma mágica fuerte y amenazante. Cada vez que el Líder del Clan Jiang comenzaba a tocarlo, significaba que tenía la intención de matar, pero esto no lo sabía aquel cultivador errante, aquel discípulo sentía un poco de pena.

"Puedo ser de ayuda"

Binghe dijo ahora con seriedad y sin intenciones de pelear con aquel líder, igual sabía que podría obtener las respuestas que quería si solo llamaba a Mobei o a Sha Hualing, pero de alguna manera consideraba mas interesante de esta forma.

Violeta Carmín  - LuoChengDonde viven las historias. Descúbrelo ahora