𝗢𝗠𝗘𝗚𝗔𝗩𝗘𝗥𝗦𝗘 | ¿Pequeño? Sus sueños y deseos siempre fueron pequeños pues nunca pidió fortuna, una vida llena de lujos, no, siempre quiso que fuera feliz, que llegara alguien que lo amara y que pudieran formar una bella familia. Su deseo fue...
Mientras los niños seguían reunidos en un círculo la mayor hablaba mientras los infantes escuchaban con atención.
—¡Niños a almorzar!—. Una tercera voz se escuchó haciendo que los infantes se quejaran ya que aún faltaba parte de la historia. Una Omega había llamado a los niños la cual sonreía viendo como los niños se iban.
—¿Tan pronto?—. Se levantó la alfa para acercarse a su Omega y besar castamente sus labios—. Ya casi terminaba la historia—.
—Esa historia es bastante fuerte para unos cachorritos de 8 años ¿No crees?—. Se cruzó de brazos. La alfa asintio.
—Lo se, pero también es bueno que desde esa edad sepan cómo es el mundo exterior, no todo serán cuentos de adas—. Sujeto la cintura ajena mientras sonreía.
—Lo se Ji-min, pero...duele volver a escuchar esa historia—. Bajo la mirada para después recargar su cabeza en el pecho de su alfa.
—De eso estoy consiente, así que no te preocupes no les diré todo lo que pasó, les modificaré un poco, ¿Cómo sigue la abuela?—. Preguntaba mientras sobaba la espalda baja de la Omega.
—Se encuentra bien hasta ahora, hoy se cumplen 80 años de la muerte de la bisabuela—. Suspiró nostálgica—. Dentro de una semana se cumplen 120 de el tatarabuelo Kim—.
—Aun llevo la cuenta. No estés triste, ya todos están reunidos, además de que su próxima desendencia viene en camino—. Sonrió sabiendo que su esposa tenía cuatro meses de gestación.
—Pero...es triste, es triste saber que fueron separados después de aver conseguido la felicidad, la abuela me dijo que su madre fue obligada a casarse con alguien que no amaba ya que su padre Kim no estaba y su padre Jeon estaba devastado por lo que sucedió—. Y comenzó a llorar. Ji-min la abrazo no tan fuerte—. Es injusto que ellos hayan pasado eso, no quiero que a nuestro cachorro le pase lo mismo—.
—No le pasará, solo fue una vez, todo cambio ahora—.
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Mientras las maestras permanecia hablando entre ellas, un pequeño Omega curioso se fugaba hasta la biblioteca donde había un libro que relataba la historia de los príncipes en el palacio Jeon.
Aquel libro se encontraba en la estantería cuatro, muy alto para él así que tomo la escalera y se subió para tomar el libro el cual estaba bastante grande y con muchas páginas, él solo quería saber el final, ya todo lo sabía.
Bajo con cuidado cada escalón y al estar en el piso otra vez corrió hasta unas bancas que se encontraban para después sentarse y abrir el libro en una de las últimas páginas y así, se encontraba la línea que había dicho la maestra Karina así que comenzó a leer.
Cuando alzó la voz el rey Jeon Jungkook se abalanzó hacia la Omega para derribarla y comenzar a golpear su rostro mientras gritaba.
"¿quien te crees para decirle que hacer y que no a mi Omega?."
Eso ocasionó que su padre lo tomara del cuello y lo arrojará hacia TaeHyung. El cuerpo pesado del alfa cayó sobre el cuerpo delicado del Omega. Todos quedaron en silencio cuando algo quebrarse se escuchó.
JungKook inmediatamente se levantó de encima de su Omega para encontrar el pecho de su Omega abierto por una madera que habían dejado las sirvientas. TaeHyung escupía sangre por la boca mientras su alfa trataba de ayudarlo pero si lo movía podría desangrarse.
Los dos mayores responsables de lo que había pasado huyeron del lugar dejando a Jungkook llorando mientras pedía a cualquier santo que lo ayudará, su Omega estaba muriendo.
"por favor TaeHyung, no me dejes."
Pedía el alfa mientras veía como la sangre seguía brotando tanto de la estaca como de la boca.
"¡Ayuda!."
Su grito había hecho que varias sirvientas llegarán y unas llamaron a la señora Min para que llegara rápidamente, pero cuando está llegó, Taehyung había perdido la vida.
"¡TaeHyung!."
Los gritos que el rey Jeon había soltado ese día fueron tan desgarradores que los presentes habían llorado y sentido la granganta seca al igual que JungKook.
La pequeña Yu-ju siempre preguntaba por su padre Kim y el por qué se había ido. Su padre para no lastimaria a tan corta edad había dicho que se encontraba relalizando su sueño de ser bailarín por todo el mundo.
Así durante 17 años vivió con aquella mentira la pequeña Yu-ju, cuando fue comprometida su padre le dijo lo que había pasado con TaeHyung y la noticia la devastó, todo había sido un misterio para la Jeon ya que nunca había escuchado el nombre de su padre y Jungook no era el mismo. Su abuelo ya no había regresado, todo se había vuelto tan frío durante esos años.
Conto Jeon Yu-ju que ella esperaba cada noche que su padre Kim regresará para darle las buenas noches, para hacerle su desayunó, para que la abrazará, pero no pasó. Cuando tuvo su primer hijo lo mostró a la luna como su padre Kim hizo con ella. Le pidió que cuidara de la pequeña niña que había traído al mundo.
Años después Yu-ju falleció debido a una enfermedad no detectada antes, su padre JungKook falleció un año después por la tristeza que su corazón había acumulado con el pasar de los años.
Se había prohibido el mostrar a sus hijos a la luna y pedir por ellos ya que después de años la madre Omega moría por alguna razón.
La última palabra que JungKook escuchó de TaeHyung fue.
"Me duele que no haya más tiempo, pero esperaré por ti en la eternidad"
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Muchísimas gracias por aver leído "Mi pequeño deseo" sigue siendo para mí un honor tenerlos como lectores, espero les haya gustado, sigo sin saber cómo escribir un buen final pero estoy mejorando, mis próximos proyectos ya serán a su tiempo! 🤎🌱
