Capitulo 1

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Ante la salud 
y la enfermedad prometo
amarte hasta el final de mis días
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Pequeño, travieso, curioso, explorador y sobre todo adorable, era asi como lo describia a Izuku su madre. Esa mañana se habían quedado sin provisiones para el invierno su clan, los Toshinori, liderado por su alfa el señor Yagi, asi que solo se encontraban los omegas y betas con sus crias o embarazados, se encontraban de paso hacia su destino, las cuevas que las rodeaban las 3 montañas sagradas, se rumoreaba que era rica en caza y comoda

-Mami, ¿cuando podre obtener mi forma humana?-hablo la pequeña cria de pantera

-Mi pequeño Izuku, no seas tan impaciente, obtendras tu forma a los 5 años asi como tu segundo genero- dijo la cariñosa madre

- ¿pero porque hasta los cinco años? Shinsou y Mirio ya la obtuvieron- dijo formando puchero en su rostro

- Eso es porque ellos son Jaguares, su anatomia es muy diferente a la de nosotros- le encanta lo curioso que era su hijo, eso lo hacia unico

- Es mucho esperar, ya quiero ver como sere con mi forma humana, de seguro sere como tu mami- dijo orgulloso Izuku

- Estoy segura que sera muy hermoso, tan hermoso como tu padre- dijo recordando a su fallecido padre y sus increibles rizos

- ¿Como era mi papi?- pregunto curioso

- Él era el alfa mas hermoso que eh visto- escucho un bufido por parte de su hijo- claro, tu tambien eres hermoso cariño, lo heredaste de tu padre

-¿Y era muy fuerte él?

- Claro que lo era, todos los dias me traía una pequeña caza para cortejarme, y lo hizo muy bien- dijo algo nostalgica recordando al amor de su vida

Se escucharon unos pequeños rugidos de cachorros ocasionados por sus amigos, este hecho hizo que volteara el menor

-Mami, ¿puedo ir a jugar?- decia mientras saltaba de un lado a otro lleno de imperatividad

-Claro, solo que no te vayas mucho mas allá del bosque o los limites- estaba tranquila de lo seguro que era su clan al estar custodiado por algunos alfas que no fueron a la caza por el hecho de proteger a los embarazados y sus crias 

-Vamos Mirio- dijo mientras dejaba atras al jaguar mayor 

corrieron todo lo que podian sus pequeños cuerpos hasta llegar a su área juegos, aquella pequeña cueva que descubrieron cuando intentaban buscar un refugio en una ocasión que los sorprendio la lluvia en medio de su rutina de juegos

-¿a que jugaremos hoy?- pregunto el pequeño Shoto

- ¿podriamos jugar a las escondidas?- sugirio un timido cachorro llamado Tamaki

-El mas menor cuenta- dijo Kyoka alegremente

- ¡oye! eso no se vale, ya saben que yo siempre son el menor en todo- dijo resoplando el primogenito de la señora Inko

- ¿quien mas vota porque el mas pequeño de la manada cuente?- pregunto Ashido divertida mientras veia que la mayoria de los cachorros alzaba su garrita derecha

Un mismo destinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora