Amarte es mi debilidad [Jenlisa]

Cap 16: Terminamos

Capitulo 16.

Pov Lisa.

Interrumpí - ¿Y que? ¿Vas a golpearme?

Desafiandola. Ay no, viene hacia mi ¿Que hago? ¿Que hago?

Se paró enfrente de mi y su expresión ya hace temblar mis piernas a tal punto que me caí encima del sofá

- ¿Asustada?

Pregunto ella. Claro que estoy asustada

- No, no lo estoy

- Me parece bien porque justo ahora estoy a punto de castigarte

- ¿Que?

Mi corazón se va salir!!

¡Estoy enferma!

- Volteate

- No quiero

- Si te volteo yo será peor, hazlo

Esta loca si cree que voy hacerlo

- ¿Enserio vas a golpearme?

- No, jamás he golpeado a una mujer

¡Gracias Dios!

- Está será la primera vez... Date prisa, Volteate

Wtf!!

Ayuda!.

- ¡No eres mi madre! ¿Quién te crees para querer golpearme?

- Soy tu novia

- Claro que no - con un tono nervioso - Nunca dijiste que si en el hospital eso significa que no lo somos

- Lo somos desde... Hace unos minutos atrás, no puedo permitir que mi novia este mirando hombres de esa manera... Mereces ser castigada, necesitas aprender la lección caso contrario lo harás nuevamente

- ¡No lo haré!... Lo prometo, además estoy operada

- Eso ya debió sanar ¿No te darás vuelta?

¡Ay diosito sálvame!

Solo pude quedarme en silencio, ella me miró fijamente - Muy bien, no te gires yo lo haré

Vino a mi y me besó, no sé cómo explicarlo por primera vez la sentí dominante y enojada, incluso mordió mi labio inferior.

- ¡Jennie! - gemi del dolor solo quería que se detuviera

Ella me tomo de las caderas y me giro, así es ¿Cómo lo hizo? No se, Jennie  quedó sentada en el sofá y yo encima de ella pero eso no fue todo, ella sonrió y acaricio mi cabello

Aprovecho mi descuido y me acostó encima de ella, así es me tiene como quería. Mi trasero quedó encima de su regazo, yo trate de Voltearme pero ella me dio una nalgada

- ¡Quieta! Si te mueves será peor

- Esto no es normal, déjame

Dije viendo hacia un punto fijo a la pared ya que no puedo verla.

- Lo que no es normal es que tú estés coqueteando con otros chicos - sentí como bajo mi pantalón - Necesito que tengas claro que sí lo haces otra vez, serás castigada

Sus manos acariciaban mis pompis, se sentían heladas y suaves, por suerte no bajo mi pantis. No les voy a mentir, estoy nerviosa pero se siente bien

- ¡Ahh! - exclamé del dolor al sentir un golpe en mis nalgas

¡Tiene manos pesadas!

- Jennie mira hay que hablar, no lo haré otra vez, lo prometo mira yo.¡Ahh!