Cuando es vulnerable ¦ Bakubowl

Prólogo

Su mirada delató todas las sonrisas que fingió.

La vulnerabilidad no siempre es algo malo en ocasiones es lo que más te acerca a los demás pero obviamente nadie disfruta verse vulnerable, se puede sentir patético y humillante dependiendo de la persona.

Mostrarse en el punto más bajo de nuestras emociones nunca será fácil pero se puede lograr si se hace con la persona correcta.

Los estudiantes de la clase A se despertaron con un peso sobre sus hombros, claro a excepción de Bakugou que sólo recordaba haber cumplido un reto y después se fue a dormir, aunque eso no pasó nadie lo contradijo cuando preguntó.

Ellos se sentían verdaderamente mal por provocar el estado de ebriedad de Bakugou en especial porque lo disfrutaron, la actitud que tomó fue tan linda y dócil, hubiera sido muy grosero de parte de ellos no corresponder ante los gestos tiernos de su compañero aunque dolió un poco que aquel rubio no recordará nada. Los recuerdos de esa noche no sólo fueron lindos y divertidos, también fueron amargos tan agrios que no se podían quitar el mal sabor de boca que les dejó aquella experiencia, ver a Bakugou con aquellas marcas que realmente parecían dolorosas los preocupo había una posibilidad de que se la pudo hacer hecho en combates de la escuela pero no era así ya que esa semana fue más estudio que nada además quien en su sano juicio mordía en los combates, nadie de la clase lo hacía como método de ataque, Iida había llegado a la conclusión que esa mordida en su hombro se había hecho con el único motivo de marcar a Bakugou pero antes de que le pudieran preguntar el solo sonrió como despedida...

Y esa sonrisa les había dolido tanto, no era como las primeras veces en donde realmente no estaban tan metidos en la vida de Bakugou y eso les preocupaba, puede que la mordía solo fuera hecha por alguien muy posesivo pero ¿y el golpe?.

Kirishima no tenía idea de lo que sucedía y eso que según la mayoría del salón era a quien Bakugou más le hablaba con sinceridad y confianza. Deku desde hace mucho tiempo no sabía casi nada de la vida personal de Bakugou y es que si el rubio quería mantener eso bajo secreto así se quedaría conocía muy bien al rubio para saber que este guarda de forma excelente los secretos. Nadie más tenía información, Mina fue la que propuso como idea hablar con su amigo finalmente desde aquel día en el que Bakugou estuvo para ella los dos comenzaron a juntarse más sin embargo el chico jamás le contó sobre alguien agrediendo lo y siendo sincera eso sonaba casi imposible de que pasara, digo por favor el es Bakugou Katsuki nunca se dejaría pisotear por nadie.

Por lo mismo de sus preocupaciones todos esperaron armar un buen plan con el único objetivo de descubrir que sucedía con su compañero y si lo podían ayudar, era verdad que Bakugou no era el más amable con ellos pero con el paso del tiempo poco a poco los fue aceptado más allá de sólo ser su competencia ahora se podía decir que era sus compañeros, sabían que los más cercanos y posibles fuentes más confiables para Bakugou eran su propio grupo seguramente con ellos sería un poco más fácil solucionar todo esto, querían ver la sonrisa de Bakugou sin una pisca de arrogancia.

Todos los alumnos decidieron que era buena idea prestar atención a las reacciones de Bakugou en lugar de ser quienes lo provocaban y realmente fue buena idea hasta hace unos días eso pensaron ya que Bakugou comenzó a ser mucho más distante con ellos al punto de no querer estar cerca. Hace apenas un año Bakugou se había tomado la iniciativa de pasar más tiempo con sus compañeros algunos momentos eran divertidos como cuando el y Kirishima salían y otros eran más incómodos como pasaba cuando convivía con Deku pero aún así Bakugou lo hacía ya que según el molesto héroe antes reconocido como el número 1 le dijo que eso lo ayudaría a ser mejor persona y pues Bakugou se lo tomó muy en serio viniendo de él. Al principio a todos les pareció extraño ese comportamiento pero poco a poco se acostumbraron a esas ocasiones que no sabían que un día solo desaparecerían dejando un vacío en sus rutinas.

Cada estudiante trató de ser ellos quien invitará a Bakugou, tal vez se le había olvidado lo que hacían juntos pero no era así.

Aoyama, Uraraka y Hagakure invitaron al rubio con ellos como cada martes a ver su serie que aún no terminaban pero Bakugou sólo les dijo que continuarán sin el porque estaba ocupado y ya no podría ir.

Kirishima, Denki y Sero lo invitaron a comer en el restaurante que tanto querían, casi siempre iban los viernes y domingos pero Bakugou les informo que no podría ir, al parecer el rubio no tenía antojo de algo picante, eso sí que fue raro.

Deku, Todoroki e Iida trataron de invitarlo a sus sesiones de estudio como usualmente hacían pero Bakugou les dijo que ya había hecho todos sus deberes y además que ya no necesitaba su ayuda para estudiar, sin siquiera dirigirles la mirada abandono el lugar.

Ojiro, Shoji y Tokoyami le recordaron sobre la nueva película que se estrenaría en los cines, como era una de terror esperaron a que Bakugou les confirmara su asistencia pero no fue así. El rubio no se molesto en aparecer ese día ni el siguiente, el mensaje fue bastante claro.

Sato y Mineta le avisaron que había un nuevo platillo que le gustaría preparar a Sato junto a él y obviamente a Mineta le interesaba ser el degustador, como lo era siempre, pero Bakugou le dijo que no podría, que debía estudiar sólo que ese día salió de la academia y regresó bastante noche, ni siquiera llevó sus libros.

Mina, Jiro y Momo lo invitaron a su "noche de chicas + Bakugou" y como ahora era costumbre se negó, simplemente se disculpo con ellas y se alejo de la habitación, claro fue una disculpa tan vacía de lamentos pero al fin y al cabo se disculpo.

Koda y Asui lo invitaron a ver la parejita del conejo de Koda, a Bakugou le encantaba ir a visitar a ese animalito pero en esa ocasión no fue tampoco aviso que faltaría, no se había molestado en avisar hasta el día siguiente.

Todo comenzó a ser más molesto y preocupante cuando en algunas ocasiones sus amigos y compañeros lo vieron con el sujeto pelinegro en algún lugar de la ciudad juntos pero ya no sólo había reacciones positivas como sus sonrisas y risas, claro que no, ahora cada vez que alguien atractivo pasaba enfrente de la pareja Bakugou automáticamente baja su vista al suelo y su acompañante lo miraba atento de cualquier movimiento que se atreviera a hacer. Cuando Bakugou estaba por irse el pelinegro lo sujetaba muy fuerte tanto que provocaba muecas dolorosas en el otro, múltiples veces sus amigos estaban por ir hacia ellos con tal de que dejara de lastimar a su amigo pero ellos casi al mismo tiempo desaparecían entre la gente y ahí se dieron cuenta.

Bakugou estaba pasándola mal y ellos fueron tan ciegos que no se habían dado cuenta.