Cuando es vulnerable ¦ Bakubowl

Parte 3

5

Todos habían llegado a un punto muy alto de estar preocupados , no sabían cómo explicarlo pero querían sacarlo de su sistema lo más rápido posible, no querían alterar más de la cuenta a Bakugou así que le pidieron a Uraraka que solo sacara algo si el tema iba por ahí y si no que las preguntas no surgieran.

— Hola Bakugou...

— No estoy, no molestes — antes de que el girará hacia el otro lado Uraraka rocío el polvo morado en su rostro — ¡Achu! ~

— ¿Tienes frío, Bakugou?.

— Sip, pero no importa, si me abrigo me veo gordo...

Apartir  de ahí la conversación simplemente fue una Uraraka halagando a mas no poder a Bakugou sobre su físico y que el no se veía gordo en ningún aspecto antes de que tiempo se acabará la castaña le invitó un café para que se le fuera el frío y esos fueron los mejores momentos de su pequeño paseo, Bakugou se veía muy lindo sonrojado por el aire que golpeaba su cara, antes de que el efecto se fuera el rubio paso su brazo por el hombro de la chica, Uraraka quedaba fascinada del aspecto tan relajado que tenía ella estaba muy segura que sí Bakugou no se mostrará siempre enojado tendría a media escuela a sus pies.

Una vez el efecto paso Bakugou no se apartó de ella simplemente caminaron en silencio tomando su café aún sin el efecto, Bakugou no rompió el abrazo que tenían.

Pará Uraraka el rostro de Katsuki era divino.

6

Ojiro tenía en mente no hacerle ninguna pregunta, en realidad el solo quería compartir tiempo con él como los demás que ya habían usado el polvo morado. Sabían muy bien que Bakugou aún no mostraba sospechas aunque se mostraba un poco menos hostil que antes, muchos de preguntaron si ese era un efecto consecuente del uso constante del don pero tras una pequeña llamada descubrieron que no era por eso,habia otra razón.

Ojiro decidió sentarse a su lado al finalizar un entrenamiento del profesor Aizawa obviamente antes de rociar le el polvo morado en su rostro se fijo muy bien de que el profesor se haya ido completamente, la mayoría de sus compañeros se quedaron solo para observar el rostro relajado de Bakugou.

— ¡Achu! ~ — Bakugou se encogió en su asiento, tenía ganas de hacerse bolita pero su pena interior lo evito — Mhg ~

¿Eso había sido un gemido? Ojiro miró aturdido al rubio junto a él, Bakugou tenía un gran sonrojo en su rostro además de que sus orejas y parte de su cuello estaban del mismo color, se acercó un poco más a él para saber si se sentía mal o algo.

— ¿Bakugou te encuentras bien?.

— No ~ — al mirar a su compañero tenía sus ojos vidriosos — me pasas el bolso que esta ahí, por favor ~ Mhg.

Okey si el continuaba haciendo eso sonidos al pobre le comenzaría a sangrar la nariz. Se estiró lo más posible y se lo acercó, de ahí sacó unas pastillas, la tomó con ayuda de su agua. Después de eso sólo miró como niño pequeño la parte sobresaliente del don de Ojiro que era muy interesante.

— ¿Para que las tomas?.

— Pará el dolor — Bakugou recargo su cara en las piernas de Ojiro y comenzó a jugar con su cabello — tu eres muy lindo, me gustan las personas lindas...

— ¡Hey Bakugou!.

Los dos chicos miraron a quien les grito a la distancia, era un joven de estatura estatura media, no sabían quién era pero sólo llamó únicamente al rubio.

— Bueno, debe irme — Bakugou le dedico una sonrisa adorable mientras se levantaba y tomaba su bolso para irse con aquel estudiante pero antes de que fuera Ojiro lo sujeto no le podía permitir irse en el estado que estaba seguramente lo notaria.

Un pequeño forcejeo inició era muy sutil hasta que el rubio cenizo le explotó la cara ahí se dio cuenta que el efecto había pasado.

Pará ojiro los secretos de Katsuki eran peligrosos.