REVENGE

1: Sed de venganza.

-Chloe Butterfield apúrate, la cena esta por empezar- dijo mi madre afuera de mi cuarto, yo ya estaba lista, para mis padres el momento de cenar era algo importante, yo no entendía pero para ellos era así, teníamos que cenar juntos aunque no sea nada especial.

-Ya voy mama- le dije, salí y ahí estaba ella, me acaricio el cabello y bajamos juntas, papa ya estaba en la mesa esperándonos.

-Rob, cariño ya estamos listas- hablo mi madre y mi padre nos sonrió.

Nos sentamos y en la mesa se encontraba nuestra comida, mama la sirvió en nuestros platos y comenzamos a comer, de pronto un ruido se escucho en las afueras de la casa, pero no tan lejos, mis padres se miraron entre si y luego me miraron a mi, no comprendía porque esas miradas, no se hoyó nada y mis padres se tranquilizaron notablemente, seguimos comiendo pero otro ruido nos interrumpió, esta vez sonando más fuerte y muy alarmante, mis padres se pararon de la mesa.

-Chloe no te muevas y no salgas, te lo explicaremos luego- se giró hacia mi padre y le asintió con la cabeza, ambos sacaron unas pistolas del cajón que se supone que tendría papeles del trabajo de ellos y yo no tenía el permiso para ver algo ahí, ahora comprendía el porque, bueno sinceramente no comprendo nada, NADA.

-¿Que deben ex- un sonido me interrumpió, me quede extrañada, mis padres fueron acercándose hacia la puerta principal.

No alcanzaron a llegar porque de repente entraron unos hombres con armas que les doblaban el porte a las que mis padres tenían, iban entrando amenazantes a la casa, eran muchos y mis padres no tenían muy buena cara, comenzaron a disparar y unos cuantos hombres cayeron al suelo, mi padre se iba acercando a ellos con la intención de quitar sus armas, pero se oyó un disparo más, pensé que había sido mama pero no, mi padre sangraba.

Le habían dado en el hombro, aún seguía queriendo pararse pero mama lo detuvo, mientras yo miraba aterrada la situación, quería comprender, pero nadie lo hacia, mis pensamientos se vieron irrumpidos por un fuerte golpe.

Tenían a mama contra el suelo, agarrada del cuello un hombre estaba a horcajadas sobre ella mientras forcejeaba, me escondí bajo la mesa mientras miraba la situación con temor y pensando lo peor, las lágrimas se derramaban sin cesar y un sollozo salió de mi boca, la cubrí para que no me escucharan, apuntaron un arma hacia papa, y un hombre entro por la puerta, mama lloraba, y me destruía verla así.

-¿Me recuerdas Rob?-pregunto a mi padre el hombre que entraba recién- ¿Y tu Marisol?- se dirigió a mama.

-Cállate Harris- grito mi padre mostrando su dureza para luego encogerse de dolor por la bala que yacía en su hombro.

-¿Siempre eres así?, ¿sabes lo que te pasara por responderme así?- le apunto un arma a la cabeza y halo el gatillo, mama grito destruida y yo temblaba, llorando.

-¡Déjenlos!¡Por favor, no más!- dije con gritos ahogados y con lágrimas incesables.

-Oh, verás a tu madre morir tal como a tu padre querida- me miro mientras yo salía sollozando con pocas fuerzas de abajo de la mesa.

-¡Vete hija, Huye!, ¡Ahora!- mi madre me gritaba repetidas veces y yo lo hice, pero no huí tan solo me escondí nuevamente tras un pequeño muro que había, y seguía viendo toda la escena.

-Vámonos- ese hombre de nuevo.

-Pero señor- uno de los hombres trato de interrumpirlo.

-¡Vámonos dije!- todos asintieron y salieron este señor se quedo al último, pero poco a poco iba saliendo- Adiós querida- dijo y desde la puerta apunto con su pistola a mi madre, me gire y lo que menos quería sucedió, halo el gatillo, me gire al escuchar ese último disparo y vi como mis padres yacían en el suelo. Muertos.