Buenas noches papás :)

Cuando tenía seis años mis primos se quedaron a dormir en mi casa en total éramos cinco niños, los mayores se encerraron a jugar videojuegos en el cuarto de mi hermano mayor y mis primos de menor edad se quedaron conmigo en mi cuarto, nos divertimos mucho vimos televisión y jugamos a que éramos príncipes y magos e incluso jugamos a la lucha libre, la pasé increíble pero mis primos se cansaron mucho de tanto jugar así que se quedaron dormidos. 

En la tele estaban pasando mi caricatura favorita, como me gusta me quedé despierto otro rato viéndola, ya era muy tarde y pensé que era el único despierto en la casa, ya me estaba preparando para dormir cuando de repente la puerta de mi habitación se empezó a abrir pero no era nadie estaba muy asustado, pero junté al valor para pararme y cerrar la puerta cuando ya la había cerrado pude escuchar la risa de dos chicos, me sentí aterrado pero rápidamente me calmé y no puede sentir nada más que calma al darme cuenta de que mi hermano y mi primo mayor solo estaban conversando y jugando, ya era muy tarde yo ya estaba bastante cansado por lo que no lo pensé mucho y me quedé dormido pero desde ese día algo cambió en mí, cada que llegaba la noche no podía evitar recordar el terror que había sentido empecé a odiar ser el último en irme a dormir, sentirme envuelto en la absoluta oscuridad y el silencio me hacía temblar las cosas empezaron a ponerse escalofriantes y por un tiempo tuve que dormir en el cuarto de mis papás, pero claro que no podía dormir para siempre con ellos así que al pasar un par de meses me dijeron que tenía que superarlo y regresar a mi cuarto. 

Todo estaba bien mientras me durmiera temprano pero cuando me despertaba mi papá se tenía que quedar en mi cuarto hasta que me quedara dormido, pasaron los años y nunca pude conciliar el sueño rápido porque la idea me aterraba cuando llegó la graduación de mi primaria y la costumbre era que todos los graduados se fueran de campamento un fin de semana yo estaba muy emocionado, creí que estaría bien ahí rodeado de todos mis amigos pero cuando llegó la noche tuve que llamar a mi papá para que fuera por mí pasaron los años y seguí creciendo pero el miedo nunca se fue de mi lado finalmente era un día de marzo había llegado mi cumpleaños número 17 y yo decidí que ya era suficiente las cosas no podían seguir así me preparé durante un par de semanas platiqué con un profesional sobre mis miedos hice algunas meditaciones y llené mi habitación de cosas que me hicieran sentir más cómodo y seguro, estaba listo para cuando llegara la noche en que fuera la última despierto en mi casa. 

A las pocas semanas llegó ese momento era un día anterior a mi examen final de la prepa así que decidí quedarme despierto a estudiar y me encerré en mi habitación listo para enfrentar mis miedos mis papás y mis hermanos sabían que me desvelaría estudiando para mi examen y fueron muy comprensivos se quedaron despiertos hasta muy tarde, sabían que el ruido de la casa me haría sentir más tranquilo y funcionó todo el movimiento calmó mis nervios el ruido de mi hermano menor corriendo por las escaleras, los sonidos de los videojuegos de mi hermano mayor y el ruido de mis padres en la sala e incluso los ladridos de mi perro en el patio todo el movimiento logró calmar mis nervios y pude estar tranquilo, tanto así que estaba seguro de que sacaría un 10 absoluto. 

Al día siguiente terminé de estudiar, alrededor de las 3 de la mañana ya todo se había calmado y decidí servirme un cereal antes de acostarme a dormir, mis papás estaban en la sala, la luz estaba encendida y podía escuchar sus murmullos parecía que estaban leyendo no los quise molestar así que cuando regresaba de la cocina a mi cuarto sólo les dije hasta mañana papás que disfruten de su libro y ellos me sonrieron. 

Mientras que caminaba por el pasillo la luz de la sala se apagó detrás de mí, para mi sorpresa cuando pasaba por el cuarto de mis padres ellos salieron bostezando y sobándose los ojos, me dijeron, nos alegra mucho que superaras tu miedo de quedarte despierto solo por la noche, todos nos acostamos a dormir temprano a eso de las diez, como sabíamos que estabas muy concentrado estudiando para tu examen final ni siquiera te dijimos buenas noches para no molestarte.