‹ Four.

535 59 3
                                    

— No mamá, estoy bien solo es un poco de fiebre no necesito que vengas. — observó cada medicamento que sacaba de la bolsa de plástico. — No, sólo no menciones a Felix, se que él estará bien y lo encontraremos pronto.

Veía el techo moverse, muchos pájaros daban vueltas mientras tiraban mucha naranjada, tan lindos.

Sentí cómo me incorporaba y quitaba el termómetro de mi axila, ¿cuántos dias llevaba así? ¿5? ¿6?

— Tienes 38 grados. — suspiró tomando una botella de alcohol etílico. Me volvió a recostar y quito mis calcetines para con sus manos huntar el alcohól y dar masajes al mismo tiempo que hizo tronar mis dedos, puso más en mis brazos, pecho y cuello; me cubrió totalmente con suéteres, calentadores y me cubrió con una frazada hasta mi cuello dejando solo mi cabeza a la vista. — Toma esto, es para la temperatura y toma canela, no puedes quitarte nada tienes que bañarte en sudor y eso te ayudará o es lo que me dijo mi mamá.

— Me da gracia cómo hablas como si nada con tu madre aún cuando me tienes aquí secuestrado. — reí observando nuevamente los pájaros. — Déjame jugar con los pájaros, ya se, hagamos algo. Te daré muchos hijos, todos los que quieras si me dejas ir.

Él rió con ternura y me dio la pastilla con la canela antes de arroparme bien y darme un pequeño beso en la mejilla.

— Nosotros no podemos tener hijos cariño. — suspiró yendo a la bolsa de medicamentos viéndolo uno a uno. — Si esto funciona pedire un reembolso.

Sonreí débilmente, tenía razón, yo nunca podría tener hijos.. No podría jamás formar una familia.

La luz del sol me lastimó horriblemente mi mirada inmediatamente fue dirigida al techo, me incorporé y toqué mi frente todo mi cuerpo se sentía pegajoso y aún me sentia húmedo. Hyunjin no estaba en la habitación pero en el suelo estaba un pequeño colchón de esponja y frazadas posiblemente dormio en él suelo.

— Me siento tan pegajoso. — suspiré quitandome alguno suéteres, las frazadas y calentadores. — Aunque me siento muy bien y tengo sed. — me levanté yendo a la pequeña mesa de noche dónde había una jarra con agua y rápidamente tomé de ella y con mi brazo limpié mi boca. — Wow, amo el agua.

Me volví a la cama comenzando a doblar las frazadas y calentadores cuando observé un lugar у fijo, las cintas de nylon y la cinta adhesiva en la mesa de noche aún lado de la cama.

— Hyunjin. — susurre viendo hacía la puerta, vi mis pies y mis brazos, ya no estaba atado.

Sin dudarlo dejé todo y salí un poco con prisa pero a la vez con calma no sabia dónde se encontraba simplemente abriría la puerta y me voy.

— ¿Qué crees qué estás haciendo?

Nuestras miradas se conectaron, el cepillo de dientes en su mano y la espuma en su boca, no me moví para nada y sólo corrí a la puerta intentando abrirla pero esta tenía todos los seguros.

— ¡Ayuda! ¡Ayúdenme! — comencé a gritar por las orillas de la puerta. No tomó mucho tiempo para que Hyunjin me tomará con fuerza de mi cadera rodeando mi estómago y con la otra cubrir mi boca.

Comencé a patalear con fuerza pero evidentemente él era mucho más fuerte que yo. La puerta comenzó a sonar y con más razón intenté zafarme de su agarré.

— Hyunjin, cariño, soy yo tú mamá, abre la puerta. — se escucho de la pequeña televisión que había ahí y él me llevó a la habitación.

— Dejame ir. — dije entredientes y con mis uñas comencé a lastimarlo de los brazos pero el simplemente siguió haciendo fuerza para ponerme el nylon en mis muñecas y la cinta en la boca.

— Creo que no lo haré cariño. — sonrió ladeado y beso mi nariz, tomó mi cuerpo y lo dejó debajo de la cama y tirando ropa para que se viera menos.

Escuche sólo sus pasos irse, la puerta ser abierta y muchas caminatas en ese frío piso. Me sentía tan impotente y mis lágrimas no dejaban de salir, sólo tenía que salir, tenía que huir pero simplemente no podía porque la persona que me tenía aquí conocía hasta el mínimo detalle de mi tanto mis fuerzas y mis debilezas.

— Mamá, mamá te extraño, no dejes de buscarme, ¡estoy aquí! — mi subconsciente gritaba a todo pulmón a mi madre, extrañaba a mi madre. - ¡Señora Hwang, aquí estoy! ¡Soy yo Lee Felix! ¡Ayuda!

No podía incluso sollozar, la cinta adhesiva realmente cumplía su función me habían sellado de mi habla... La persona que amo me había privado de todo.

⠀

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

( ♡̷̸⁩ )

lamento la demora, en actualizar
mis historias, trataré de ya no
demorar pero no prometo nada.
T T.

(+) sigo sin superar q el pibe q
me gusta m quiso besar pero soy
imbecil y m fuí corriendo.
q alguien me mate xfavor.

🫐   .    𝖶𝗁𝖺𝗍  𝗁𝖺𝗉𝗉𝖾𝗇𝖾𝖽  𝗍𝗈  𝖥𝖾𝗅𝗂𝗑  ?     ( ♡̷̸⁩ )    Donde viven las historias. Descúbrelo ahora