PROLOGO

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El amor viene en formas diferentes supongo.

Al menos esa fue la imagen con la que crecí, la que mi familia me enseñó. Mis padres por ejemplo, la gran Pepa Madrigal, la más hermosa del Encanto acostumbrada a tener a sus pies a todos los solteros del pueblo, excepto a uno.

Felix el hombre coqueto y vivaracho, todo un cantante y buen bailarín. Cualquiera habría pensado que el destino los había hecho el uno para el otro.

No era del todo cierto siendo que desde el principio su relación era áspera y complicada. Pepa siempre ofendida por que él no le daba la prioridad de conquistarla y Felix aburrido por la demanda que ella representaba. La consideraba caprichosa y berrinchuda, amenazando con sus nubes y climas todo el tiempo.

Si él quería bailar con una que otra señorita, viejas amigas de él... Lluvias y vientos se hacían presentes arruinando el ambiente y obligando a este a ir hacia ella y consolar sus celos y enojos. ¿Por qué seguía con ella? Fácil. No muy tarde Felix habría descubierto las extraordinarias habilidades y formas tan salvajes y pasionales de amar que ella tenía para ofrecer.

Luego llegaría Dolores, y papá aprendería a amar a su familia y matrimonio "perfecto". Además que pasó a ser de la familia más importante del pueblo...Qué más se podría pedir.

Las personas de las que nos enamoramos, tampoco son cosa del destino, es más cosa de perspectiva y del corazón.

Así hubiera sido para mí, en primera instancia, ni de chiste habría elegido ese amor tan complicado, y no había llegado hasta mucho después cuando todo fue amenazado.

Era la niña sin don, la que se esforzaba demasiado y no lograba hacer nada bien. Ni siquiera era tan bonita, bajita, cegatona y con caderas anchas y pechos pequeños.

Qué sería de la pobre Mirabel, mi prima, de no tenerme en su vida. Yo estoy tan dispuesto a darle todo. La poderosa futura matriarca Madrigal necesitará alguien como yo a su lado.

Por varias semanas, he estado a su lado en cada tarea, su sonrisa, sus ojos detrás de esos cristales hacen que mi pecho se infle, y es que la deseo tanto. La he visto bailar cientos de veces, su forma de moverse es algo hipnotizante, la forma en que mueve sus caderas, en que su falda se levanta y deja ver sus regordetas piernas canela. Si ella supiera la cantidad de veces que me he tomado y acariciado pensando en ella, en su cuello, sus pechos y su trasero. Si yo pudiera ahora mismo le haría un bebé y la desposaría para poseerla por el resto de nuestras vidas.

Pero aun soy muy débil para siquiera intentarlo, y en todo caso la última semana la he visto más distante de lo habitual.

Ha estado pasando mucho tiempo con ese anciano de Bruno.

Lo había estado tolerando, desde que volvió no es que me afectara a manera personal, salvo por este último tiempo en que parece necesitarla todo el tiempo.

A mi parecer esos dos pasan demasiado tiempo juntos, y puede que sea yo y mis celos, pero incluso me descubro espiándolos cuando creen que están solos. Solo me aseguro que mi Mirabel está bien y ese viejo asqueroso no la incomode.

Alguna vez comenté algo en la mesa, cuando ambos habían tardado mucho en volver de llevar algo al centro del pueblo. Pero la abuela solo contestó diciendo que al Tío Bruno le costaba mucho adaptarse y Mirabel lo había está ayudando con eso.

Sentí mis entrañas arder ante esa indiferencia familiar, pero tal vez sería yo quien al final descubriría y expondría lo que ese viejo se traía.

Nunca esperé que lo que buscaba, llegaría más pronto de lo que creía y cuando menos esperaba encontrarlo.

Juego del Engaño 🦋⏳ (MiraBruno)(CamiMira)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora