Capítulo 1

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'Este lugar es más colorido de lo que recordaba, me imaginaba algo menos... ruidoso.' Pensaba Sora al ir caminando por las calles de la ciudad. Podía notar la gran diferencia entre su época respecto a la que se encontraba ahora.

'Ruidoso o no, es agradable que estas no sean ruinas en su mayoría.' Pensaba ella mientras observaba los edificios a su alrededor, así como los autos avanzar por la calle. 'Con tantos enfrentamientos constantes librados en esta ciudad contra Desperado era de esperar que la infraestructura de la ciudad se deteriorara tanto.'

- Tengo que hacer algo al respecto. – Habló para si misma deteniendo su avance sobre la acera. – Debo detener a Desperado antes de que sea demasiado tarde y lastimen a más personas... Antes de que todo se salga de control... Debo hacerlo... - La joven sacó el collar de su bolsillo para observarlo detenidamente. – Pero... ¿Cómo lo hago? Ahora que estoy sola en esta época no estoy muy segura de como proceder. El cambio de planes de último minuto no ayudó mucho para planear las cosas. – La chica con collar en mano comenzó a caminar de un lado hacia otro tratando de concentrarse.

- Según el plan de Nezu, lo primero que debo hacer es establecerme, para eso necesito una ubicación desde la que pueda tener acceso a lo que pueda ser de utilidad, a servicios básicos y que por ahora me sea sencillo el traslado. Este lugar es muy diferente a lo que recuerdo. No quiero perderme mientras esté por aquí, aunque no se realmente cuanto tiempo tengo. Tampoco sé si tengo mucho dinero por lo que deberá ser un lugar sencillo y al alcance. Mmm...- Sora se había quedado parada en el medio de la acera murmurando para si misma.

– Emm... Disculpa... -

- ¡Aaahhh! – La sorpresa provocada por lo escuchado a sus espaldas casi provoca que Sora soltase su collar terminando así por guardarlo nuevamente. Miró a su alrededor hasta que se percató de alguien tras ella tirando levemente de su ropa. Sora volteó dando así con un pequeño niño de alrededor de 5 años de edad que la miraba fijamente con curiosidad.

- ¿Es usted un héroe? – La pregunta la había desconcertado. 'Rayos, me quedé murmurando de nuevo. ¿Qué debería...? ¿Qué le digo?' – Este... y..yo... yo no... - Sora comenzaba a ponerse algo nerviosa al no saber que contestar.

- Discúlpeme Señorita. - Decía una mujer que recién llegada tomando al que parecía ser su hijo de la mano. – A mi hijo le gustan mucho los héroes y en cuanto la vio decidió seguirla, espero que no causara problemas. Vamos, cariño. Dejemos que la heroína continúe con su trabajo. -

- Nos vemos luego. - Agregó el chico para proceder a retirarse con su madre. Sora se quedó sin responder viendo como la pareja se retiraba. Fuera de la poca experiencia que tenía hablando con civiles, no se esperó que fuera catalogada tan rápido como una heroína. 'Es verdad.' Pensó Sora. 'Los héroes en esta época son una parte muy común en la sociedad. Bueno, eso significa que puedo pasar desapercibida vestida así. Es un problema menos.'

Luego de ese curioso evento, la chica prosiguió con su camino hasta que llegó a un cruce de avenidas en donde en una de las esquinas se encontraba un local en concreto: un banco. Fuera del lugar una pequeña fila salía de una de las puertas. Sora conocía el concepto de los bancos y su función, pero nunca había tenido la oportunidad de realizar algo en uno, lo más cercano a eso eran sus vagos recuerdos de las contadas ocasiones que llegó a acompañar a su abuela. Esto era algo muy nuevo para ella.

Se acercó a las personas formadas y procedió a formarse también. Sacó la cartera que se le entregó antes de atravesar el portal para revisar el contenido por si necesitaba información importante. Dentro de la cartera había una tarjeta con el mismo logotipo del banco, así como algunas credenciales, entre ellas una licencia de héroe con su fotografía en una pose de combate '¿En qué momento me tomaron esa foto?' Pensaba Sora mientras la fila avanzaba.

Crearemos nuestro propio destinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora