El Hechizo [Junghope]

Unico

Los pasillos del castillo están levemente iluminados por las antorchas de luz mágica. Taehyung corre por ellos tratando de no tropezar con su larga capa negra, está emocionado y no puede evitar sonreír ante la idea de que esa noche por fin utilizaría sus poderes y nada más que el mismo príncipe lo ayudaría, aunque no es como si hubiese tenido otra opción.

Taehyung solía ser muy persistente cuando quería algo, así que no lo había pensado dos veces y decidió sobornar al príncipe cuando descubrió que este se escabulliia todas las noches al pueblo. Además ambos eran muy buenos amigos, así que no contaba como un chantaje en si.

—Te tardaste demasiado —pero al parecer al príncipe eso no le interesaba demasiado.

—No seas exagerado Jungkook, solo fueron dos horas.

—No soy exagerado. Se supone que yo estaría al otro lado del mundo en este momento.

Jungkook parecía enojado, Taehyung no le tomaba mucha importancia. Se preocupó en ir en busca de los ingredientes necesarios para realizar aquel hechizo, la habitación de su maestro estaba muy bien equipada así que simplemente se deslizó por los alrededores tomando cuanto brebaje y polvo colorido se le asomara.

—Dime que no va doler —pido Jungkook con desconfianza observando con atención como Taehyung comenzaba a mezclar líquidos y polvos —No se cómo vine a acabar contigo...

—estas aquí porque te vi con el chico lindo en el pueblo.

—Me estás chantajeando.

—Eres es el príncipe. Yo solo soy un simple aprendiz. ¿Cómo podría chantajearte si somos amigos?

Taehyung volteo y sonrió dulcemente como si no sucedíera nada.

—Te odio —gruño Jungkook recibiendo el líquido azul que le ofrecía Taehyung —si me sucede algo juro que te seguiré toda tu vida y te jalare los pies cuando durmas.

—No va suceder nada. El maestro Min a hecho este hechizo frente a mi muchas veces. Confía, estarás bien.

Jungkook, nervioso por la mirada casi psicópata de Taehyung miro el brebaje con desconfianza y de un solo trago se lo bebió todo.

Mala elección...

De pronto la pequeña habitación se fue llenando de humo, Jungkook tosía y se retorcía dejando caer todo a su alrededor.

Taehyung observó aterrorizado lo que sucedía, trataba de buscar la forma de acercarse a Jungkook más el humo a su alrededor quemaba su piel y le impedía ayudarlo. De pronto el humo desapareció y en esa habitación no estaba el príncipe, no había nadie más que el mismo Taehyung que estaba en completo estado de pánico.

El príncipe Jungkook había desaparecido.

—¡Maestro Min!, ¡Tenemos un problema! ¡Maestro Min!

** **

200 años después

Hoseok no era un exagerado, nunca lo fue y nunca lo será y lo que digan sus chismosos vecinos lo tiene sin cuidado.  Asi que solo toma otra tabla de madera y la clava en la ventana del cuarto de su hermano.

Desde que Hoseok recuerda, casi todas las noches su pequeño hermano se la pasaba llorando y gritando diciendo que alguien le jalaba los pies mientras dormia. En ese entonces sus padres pensaron que era una etapa infantil en donde los niños creían en monstruos y cosas así.

Claro, Hoseok hubiera pensado lo mismo si no hubiera sido testigo de las cosas extrañas que su hermano decía ver.

—Hobi... Hay duendes en las flores...