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Al día siguiente caminaba con Lily por los pasillos, hablando sobre la pequeña pelea que había tenido con el pelinegro hasta que llegaron al pasillo que daba hacia las mazmorras.

- Que vamos a hacer acá?

- Slurghon no está por aquí y aquí están todos los instrumentos para hacer la poción, además siempre está sola, nadie debería estar allí.

Bajaron hasta las mazmorras y entraron a un salón, en el que Remus nunca había estado, y ya veía porqué solo habían instrumentos y calderos de poción, el nunca había sido muy bueno en pociones pero el salón no estaba tan vacío como habían esperado, Severus Snape estaba en el rincón preparando una poción, Remus instintivamente arrugó su nariz, Lily suspiró un poco.

Cuando el chico los notó dió un pequeño respingo.

- Que hacen ustedes aquí? No deberían estar aquí - habló arrastrando las palabras, como si le diera flojera hablar-.

- Tu tampoco - respondió Lily sin inmutarse-. Si no nos viste, no te hemos visto.

Severus miró con recelo la mano que le tendía la chica pero terminó por estrecharla.

- Trato

Escogieron el lugar de trabajo más lejos posible del otro.

Remus sacó de su bolso los ingredientes y Lily preparaba el equipo.

- En cuánto a lo de antes no me sorprende, ustedes no pueden vivir si no están peleando.

- Sirius y yo no peleamos - Lily le alzó una ceja incrédula-. No tanto.

- Yo creo que fueron celos, siempre te tiene y que luego no lo quieras contigo o, mejor aún, que tengas una cita misteriosa y no le hayas dicho le duele.

- El no tiene sentimientos.

- Por favor! Es un perro! Le duele que su amo lo ignore.

Remus rió fuerte, Snape gruñó por lo bajo pero ninguno de los dos se dió cuenta de eso.

- No sería James el dueño?

- No es un perro pero es como su compañero de juegos, tu eres su dueño - después de un silencio Lily volvió a hablar-. Y Remus, luego de tantas discusiones aún quieres estar con él? A veces pareces no soportarlo.

Remus sonrió con indulgencia.

- No lo sé Lily, supongo que así actúa el amor no? A veces quiero lanzarlo de la Torre de Astronomía y otras veces solo no puedo ni pensar en como sería mi vida sin él.

Lily asintió con una sonrisa en los labios para luego mirar a Remus.

- No puedo creer lo enamorado que estás Remus Lupin.

- Oh, cállate.

- Ya dentro de poco estaremos comparando cuál novio es más insoportable.

- Sabes qué? Ya no quiero la poción

La chica rió.

- Oh no, ya es muy tarde para arrepentirse.

Lily se encargó de comenzar a realizar la poción y luego de cinco horas de preparación ya estaba hecha. Los espirales salían del caldero tal como deberían y el aroma inconfundible de cuero, bosque y la loción de Sirius llegaron hasta las fosas de Remus, sin duda alguna estaba lista, para terminar la vertieron en un pequeño frasco.

- Lily estás haciendo Amortentia? Ya decía yo que esa obsesión de Potter no era normal - comentó Snape ácido-.

Lily se sonrojó fuerte.

- Mira Severus si hay alguien que deba estar avergonzado por una poción debes ser tu y esa poción multijugos - Snape la miró con grandes ojos y más pálido de lo normal-. Así que más te vale guardar silencio, una Amortentia no es nada en comparación.

Remus estaba sorprendido, como pudo haber sabido ella que era una poción multijugos? Aunque lo que hiciera Snape no era asunto de él, era muy curioso

Después de agradecerle eternamente a Lily, fué a su dormitorio a guardar el frasco en su baúl para luego pensar en como dársela al de ojos grises, al entrar solo estaban Peter y Sirius, jugando con aviones de papel que volaban por toda la habitación, Sirius se incorporó al ver a Remus y Peter se tensó un poco, solo veía problemas con esos dos juntos en la misma habitación.

- Voy... Voy a las cocinas - dijo de repente, nervioso-.

- No es necesario que te vayas Peter, no vamos a discutir.

- Ah no? - preguntó Sirius sonriendo, Remus lo miró con ojos entrecerrados-.

- No y si es así házmelo saber para irme con Peter.

- No, no vamos a discutir - negó rápido-.

Peter miró de uno al otro y Sirius le hizo una seña para que se fuera cuando el otro había dado la espalda, Pet aliviado se fué, Remus frunció el ceño al oír la puerta cerrarse.

- El pobre chico nos huye, esta también es su habitación - se lamentó el castaño-.

Sirius se acercó y se sentó en la cama de Remus.

- Si es toda una lástima - comentó con desinterés-.

- Hablo en serio Padfoot.

- Remus quería disculparme por lo de ayer, yo sé que tú también tienes tu vida y...

- Está bien Sirius, no tienes por qué disculparte, dejémoslo así

- No, no Moony. Sé que me comporté mal, lo que te haga la luna no impide que tengas una vida normal y que disfrutes de ella, perdón por gritar.

Remus lo miró y quiso besarlo, era un idiota pero uno adorable, en cambio suspiró.

- Ok, está bien creo que yo también exageré un poco.

Sirius se levantó con una sonrisa y parecía querer decirle algo pero justo en ese momento entró James, jalando a Peter de un brazo.

- Vamos chicos! Ya va a empezar el partido - gritó emocionado, jalando de sus otros dos amigos-.

El último intento de RemusDonde viven las historias. Descúbrelo ahora