Capitulo 1; Un mal recuerdo

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En Canadá, en un pueblo llamado Trollberg, una chica con cabello azul es despertada por la sensación húmeda y cosquilleante en su rostro, lentamente ella abre sus ojos y ve a su mascota lamiendo con frenesí su rostro, al verlo ella suelta una pequeña risa y dice.

-Ya estoy despierta Twig, ya puedes calmarte

Ella se sienta al borde de su cama, frota sus ojos y estira el cuerpo, aun somnolienta, la chica alzó la mirada para ver el reloj que estaba en la pared y al percatarse que la hora que este marcaba eran las 10:30 se dijo a sí misma

- ¿Son las 10:30? ¡Oh mierda son las 10:30!

Ella se levantó de un salto y corrió hacia el armario poniéndose su ropa de diario, una camisa roja, pantalon negros, botas rojas y una bufanda amarilla, mientras cambiaba su pijama a toda velocidad ella pensó.

(llegaré tarde al trabajo, la teniente Gerda me matara).

La chica apenas termina de cambiarse oye la voz de su madre desde la cocina.

Hilda baja a comer que llegarás tarde al trabajo!

Hilda al escuchar eso baja las escaleras corriendo hasta la cocina, donde encuentra a su mamá con una bolsa de papel en la mano y un maletín rectangular negro encima de la mesa, La madre de Hilda levanta la ceja al ver a su hija mal vestida.

-Supongo que te quedaste dormida ¿verdad?

Hilda suelta una risa nerviosa mientras pone su mano detrás de su cabeza

-Perdón mamá, creo que fue por el turno nocturno de ayer.

La madre de Hilda suspira dejando la bolsa de papel encima de la mesa y se acerca a su hija para arreglarse la ropa, mientras lo hace ella dice.

-No te sobre esfuerces tanto ¿si?, mira ya prepare tu equipo.

-No te preocupes mamá, no lo haré y muchas gracias. -Hilda mira a los ojos a su madre y le sonríe

Hilda ya está arreglada y su madre le entrega su comida, Hilda escucha como Twig raspa la puerta indicando que ya quiere salir, la madre de Hilda nota esto y mira el reloj de su muñeca.

-Bueno Hilda ya es momento de irte -La madre de Hilda mete su mano dentro de su bolsillo sacando un envase naranja y dándoselo a su hija.

-Ten, estas son las pastillas para esta semana

Hilda recibe las pastillas y se queda un momento viéndolas, fueron unos segundos de silencio hasta que reacciono 

-Si, gracias mamá, no olvidare tomarlas 

Hilda inconscientemente después de responder gira su cabeza hacia Twig y este le devuelve la mirada inclinando su cabeza a la derecha en forma de duda, Hilda mira nuevamente ve a su mamá con una sonrisa y guarda las pastillas en su pantalón

-Bueno, ya me tengo que ir 

Hilda agarra la bolsa de papel de la mesa y el maletín de la silla, se despide de su mamá y sale de su casa corriendo lo más rápido que puede

-!Vamos Twig hay que proteger trollberg¡

Pero algo que no noto Hilda al salir, fue la mirada de preocupación de su madre al verla irse de casa.

Mientras Hilda corre a su trabajo, pasa delante de la biblioteca y se sorprende al escuchar las puertas de la biblioteca abrirse de golpe, seguido de un insulto

-¡Carajo llego tarde!

Hilda gira su cabeza y ve a una chica de piel negra bajando las escaleras de la entrada de la biblioteca a toda prisa, era su amiga Frida, que también llevaba el mismo maletín que Hilda logra reconocer el distintivo cabello de Hilda. Frida acelera el paso y la iguala, ahora corriendo juntas ellas empiezan a hablar.

La ultima gota de esperanza. Fanfic de HildaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora