5-Verdades a medias

22 3 1
                                    

Empiezo a sentir como todo mi cuerpo comienza a aterrorizarse de tan siquiera pensar en meterme allí. No sé qué está sucediendo ni por qué me está pasando esto. Yo no tengo claustrofobia, sino, claramente estaría muerta.

Me retraigo aún más al pensar en ello que siento como los síntomas del ataque de pánico están surgiendo poco a poco en mi cuerpo. Odio sentirme así, lo aborrezco, no me gusta no tener el control de mi propio cuerpo.

Siento como todo mi cuerpo empieza a sentir temblores y falta de aire. Mi corazón está latiendo a tal grado que se siente como si se fuera a salir sin ayuda alguna—, no entiendo nada, ¿porque estoy sintiendo esto justo ahora? ¿Porque me siento de este modo? Ni siquiera puedo pensar o imaginar que entro a ese conducto porque todo mi cuerpo muestra un miedo irracional.

-Olivia, vamos, andando- me indica Levi a seguir gateando.

-N...no, no, no- niego rotundamente una, dos, tres veces, ni siquiera presto atención a eso. Solo sé que no quiero ni entrare ahí de ninguna manera- no lo hare no lo hare.

-Olive, ¿qué sucede?  - se acerca hacia mi mientras lleva sus manos acunando mi cara acercándose quedándose a centímetros de la mía. Intenta encontrar algo en mi mirada, pero al parecer lo que ve no le agrada.

-N...no puedo, no puedo- empiezo a lloriquear intentando centrarme en su cara- n...no se q...que sucede- intento inhalar y exhalar mientras comienzo a sentir que me ahogo tan solo de pensar en que levi me obligue a meterme a ese sitio.

-tranquila, estas teniendo un ataque de pánico- me deja apoyarme sobre él, que siento como todo mi cuerpo se desploma sobre el haciéndome ovillo contra su cuerpo mientras me rodea dejándome encerrada entre sus brazos.

Continuó desahogándome confundida y asustada, No dejo de sentir como todo mi cuerpo tiembla mientras siento que no me entra aire a mi sistema. Tengo tanto terror. Podría estar segura que mucho más de lo que lo he tenido por mi propia fobia, pero este no es mi miedo, lo sé, lo siento. Este miedo no es mío.

Pasan unos cuantos minutos y consigo calmarme poco a poco en brazos de Levi. Aunque no lo conozca del todo siento que lo he hecho. Me siento segura y tranquila en su alrededor, y su calor me hace sentir bien. Lo cual me deja inquieta a la vez, ¿por qué me hace sentir así?

Mis temblores disminuyen al tiempo en que me incorporo un poco para posicionarme mejor entre sus brazos, quedando entre sus piernas y cuerpo.

-¿Qué sucedió? ¿C...como paso?- pregunto un tanto abatida con voz nasal.

-Lo siento, lo siento tanto olive-me susurra débilmente que si no fuera porque lo está susurrando contra mi cabellera no lo escucharía.

-No fue tu culpa- levanto mi cabeza mirándolo con extrañeza. De un momento para otro observo como su rostro muestra palpable la aflicción. Lo observo un tanto consternada.

No entiendo nada. ¿Estaba... asustado por mí? ¿Acaso le preocupe?

-Perdón, tenía que cuidarte no lastimarte- suelta con pizca de molestia.

- ¿Tu sabes porque me sucedió esto? - cuestiono mientras le miro sus orbes. no dejo que responda ya que me adelanto.

-tus ojos, tus ojos son...- Ya no están negros. Al fin logro ver un poco de su pupila y un tanto de color grisáceo de sus ojos. ¿Cómo es que le cambiaron? —, asombrada me acerco un poco más intentando apreciarlos mejor. Pero de un momento a otro él los cierra volviéndolos abrir con los ojos negros al máximo. Vacíos.

- ¿Como...?

- ¿Estas mejor? - secamente me pregunta a lo que asiento con rapidez- bien, sigamos- y así es como regresa el Levi de siempre. Me confunde tanto, ¿por que siempre me evade todo?

INEFABLEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora