3- Conexión

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Acaban de apagar las luces y me siento ansiosa. No sé si deberíamos dejar unos minutos pasar o ya encaminarnos hacia el lugar. Mas aparte que debemos esperar a que las dos chicas de la celda se queden dormidas.

Pasan los minutos mientras siento como me voy cabeceando, oh no, no es momento para quedarme dormida. Necesitamos irnos pronto sino probablemente caeré en brazos de Morfeo.

No sé cuantos minutos han pasado ya, tal vez unos 20 a mi parecer, por lo que decido incorporarme un poco para ver a mi al rededor. Logro observar como ya todas están perdidas, junto con Alice. Le digo que tiene que aguantar y se duerme, que bien.

Me paro y me acerco hacia donde esta Alice para agitarla un poco y poder despertarla. A lo que después de 5 intentos logro hacerla reaccionar.

- ¡Rápido hay que irnos! - Le susurro mientras la voy impulsando para incorporarse.

-Voy, voy- Logra caminar y se pone sus zapatos.

Vamos encaminadas hacia el lugar, todos los pasillos están oscuros y lo único que logro observar es la tenue luz que sale de los focos—, Que prácticamente—, alumbra nada. Seguimos nuestro recorrido intentando llegar sin ser pilladas. Nunca hemos salido de nuestro cuarto por lo que no sabemos si abran guardias o algo por algún lado vigilando.

Al llegar al corredor cerca del comedor le hago una seña a Alice para que se acerque. Ella sin pensarlo dos veces comienza a trotar hasta alcanzar la puerta, a lo que la acompaño.

Al abrirla nos encontramos con todo el cuarto oscuro. Ni una luz se deja ver en ese lugar—, me arrepiento mentalmente, está claro que nos hicieron una broma—, si me siento un poco desilusionada, a decir verdad.

-Vámonos, te dije que no eran de confiar- Sin pedirlo dos veces me encamino junto con Alice hacia la salida.

-Oh no dulzuras, ustedes no se irán de aquí- Al instante en que escucho esa voz me detengo abruptamente. Siento mi cuerpo estremecerse—, no entiendo como tan solo con su voz me puede afectar tanto.

En seguida de que escuchamos esa voz salida de alguna parte del cuarto. De repente se prende un foco dejando que ilumine todo el lugar—, me doy cuenta de cómo hay 3 personas en el interior. Lo que me deja sin habla es que no solo están Liam y el pelinegro, sino también los acompaña el niño de overol blanco—, me extraño un poco ya que usualmente a los de su edad los tienen todavía más vigilados, pero si él está aquí me imagino que encontraron la forma de sacarlo sin que se dieran cuenta.

- ¿No piensan moverse? Tenemos cosas que hacer vamos- Nos incita a movernos el pelinegro, que ahora que caigo en cuenta ni siquiera se su nombre.

-Creí que solo iban a ser dos Livie- Me susurra Alice discretamente mientras nos aproximamos hacia los chicos.

-No tenía en cuenta que traerían al pequeño también- Me encojo de hombros mientras nos posicionamos ella a lado de Liam y yo al lado de ella quedando junto al niño.

-El niño le sabe a la tecnología por eso está aquí- Al parecer nos escuchó el pelinegro.

- ¿El niño? - Inquiere confundida Alice dándole una mirada de ¿wtf? Al pelinegro.

-Sí, le sé a una que otra cosa, y no soy niño ya tengo 9 añitos, soy grande niña- Le da una mirada de suficiencia a Alice mientras que ella se queda pasmada por su confesión—, posiblemente yo tenga la misma cara que ella en este instante.

- ¿Niña? Tengo 17 por lo que soy tu mayor y tienes que tratarme con respeto "niño"- Suelta un bufido alargado mientras lo observa con suficiencia remarcando la palabra "niño".

-Que no soy niño y mi nombre es Eros- Gruñe el niño rubio con rasgos tiernos, que—, ignorando esa última palabra ya que de tierno no tiene nada—, le hace saber a una incrédula Alice.

INEFABLEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora