Ray.
Por alguna razón odiaba los sábados, tal vez era porque tenia que hacer el aseo de mi casa, probablemente porque mi madre nunca estaba en la casa y se quedaba mi padre conmigo, o tal vez la razón más segura era porque tenia que ver a mi psicólogo, no me mal entiendan, no lo odio es solo que luego piensa que me puede curar con sus ''charlas motivacionales'' ¿no los psicólogos eran para que contaras tus problemas y pudieras salir de ellos? Tal vez. Pero cada sábado sin excepción alguna debía de ir a visitarlo y estar en un cuarto con solo dos colores los cuales, según él, es para generar paz ''blanco y gris claro'' los colores que al parecer el ama más que nada porque siempre los usa. Desde los 5 años, empecé a tener problemas con mi cuerpo porque casi siempre me llegaba a comparar con los otros niños porque ellos tenían lo que creía que no podía tener y eso me provocaba varios problemas, un recuerdo que más está presente en mi mente fue una vez en una alberca, porque había varios niños y entre ellos adolescentes que no tenían playera a la hora de nadar, mientras que yo tenía puesta una licra por el calor, al ver a todos nadando empecé a mirar mi cuerpo y empecé a hacerme ideas, también, recuerdo que un día mi madre me encontró en el baño provocándome el vómito y con lágrimas en los ojos me pregunto que pasaba y le respondí de la misma manera que lo hacía para parecerme a los demás ya que ellos tenían un cuerpo perfecto y yo me sentía inseguro con el mío, entonces desde ahí voy con mi psicólogo el señor Harry o como me gusta llamarlo Har.
Actualmente estaré iniciando el tercer semestre de preparatoria y a decir verdad lo disfruto ya que desde pequeño me decían que debía de tener buenas notas ya que eso me daría un buen futuro y trabajo, tengo 16 años recién cumplidos, tengo el cabello café un tanto ondulado y con mechas claras ya que no me gusta mi color natural, también tengo 3 tatuajes minimalistas en mi brazo de mis cosas favoritas: Un tocadiscos, unos patines y una estrella. La estrella para mi desde pequeño significa mucho, ya que siempre en las noche las veo y me entretengo buscando una constelación porque mi madre me decía que las estrellas eran un regalo de los dioses y que al momento cuando aparezca la primera estrella pidiera un deseo y los dioses me lo concedería.
Mi madre logro aceptar mi homosexualidad sin ningún problema, pero, nunca se lo he dicho a mi padre, porque se que nunca me aceptara ya que dice que la homosexualidad es una enfermedad.
El lugar donde vivo la verdad es un poco cálido, pero tiene sus toques de lluvia y viento, no me puedo quejar la verdad ya que lo disfruto, mi casa no queda muy lejos de la prepa así que la mayor parte del tiempo me voy solo escuchando música o con mi mejor amiga Hannah Greene una chica con cabello rubio y unos ojos que a cualquiera pudiera llegar a enamorar ya que son de color azul-verdosos y la verdad si tuviera gustos diferentes Hannah sin duda seria mi crush y le pediría que fuera mi novia.
Hannah sin duda fue mi amiga desde que de pequeño me caí de la resbaladilla ya que ella me tiro y según ella fue por un ''accidente'', pero después de eso su madre nos compró un helado y desde ahí somos mejores amigos, siempre nos hemos ayudado sin importar que.
El ambiente en mi familia yo no lo consideraría como la familia perfecta porque la verdad es que no lo somos, claro que tenemos nuestros errores como todas las familias, pero digamos que la mía siempre tiene un problema, con mi madre tengo una buena relación, a decir verdad, me gustaría decir lo mismo de mi padre, pero ¿Cómo puedo amar al hombre que de pequeño me quito la felicidad, la inocencia y que no existe el día que no me pegue? Me hubiera gustado que el no lo hubiera hecho, pero, pues, ¿Qué hacer? Ahora gracias a Har estoy medicado porque hace años me detectaron Ansiedad y anemia, pero ¿Cómo esperaban que fuera feliz y que comiera si veía al hombre que me jode la vida día a día?
Nunca le dije a mi madre que mi padre luego era el causante de mis moretones, pellizcos o mas cosas en mi cuerpo ya que no la quiero ver sufrir así que me lo mantengo en secreto con ella, Har es el único que lo sabe, pero le roge que no le dijera nada a mi madre.
Para mi vista mi madre era una persona muy joven ya que me tuvo cuando estaba cursando la universidad y decidió que no me abortaría porque, según ella, se encariño rápidamente conmigo y por el otro lado mi padre pensaba que no estaba listo para ser un padre tan pronto y bueno, digamos que nuestra relación de padre e hijo no es como yo esperaba.
Ellos son Alma y Julio Müller, sin duda ellos cuidaban su imagen demasiado y como no serlo, si debíamos ser la familia perfecta en todo momento.
Durante toda mi vida siempre fui un chico que casi no tenía demasiados amigos, porque no me gustaba el futbol y al parecer es el único tema que conocían los chicos y con las chicas me decían que no podía jugar con ellas por ser un chico, pero sabia que con Hannah no necesitaba a nadie mas porque ella era por así decirlo, como mi alma gemela, era mi mano derecha.
Hoy era mi primer día iniciando el tercer semestre de prepa y la verdad era la primera vez que me ponía nervioso por iniciar un nuevo año escolar y tal vez era porque volveré a la escuela después de unas pequeñas vacaciones ya que digamos que tuve una recaída y decidieron que era mejor que me tomara un tiempo para descansar y así poder recuperarme, pero de algo que estaba seguro es que este sin duda seria mi año.
Al bajar a la cocina mi madre me recibió con un tierno beso en el cachete ---Ray ¿emocionado por regresar a la escuela? — Me pregunto con una bella sonrisa en su rostro.
--Creo que sí, estoy listo para regresar, no lo sé ma— Le respondí lo último con la cabeza baja pues la verdad es que tenía miedo de lo que dirían de mí.
--Seguro que harás nuevos amigos ¿Hannah estará en tu salón? --- Me pregunto mientras preparaba el desayuno.
---La verdad, espero que si llegue a estar— Le dije con una sonrisa en mi cara.
En ese momento no me importaba si llegaba tarde ya que amaba pasar tiempo con mi madre porque para mi era como una amiga, pero como dicen todo lo bueno tiene que llegar a su final y esa felicidad acabo cuando lo vi entrar a la cocina y acto seguido sentarse en la mesa dispuesto a leer su periódico sin hacer contacto visual conmigo presente.
--Bueno, creo que es momento de que ya me retiré y empiece a caminar para no llegar tarde a mi primer día— Dije un tanto apresurado tomando mi mochila y resbalándome en el proceso ya que no quería estar en la misma habitación que él.
--¡Ray, ten cuidado mientras corres! — Me grito mi madre desde la cocina.
--Deja de mimarlo tanto, deja que caiga ya que ni andar sabe— Le dijo sin levantar la vista del periódico.
Dios, de verdad sabia como cagar una mañana y seguramente todo el día con solo abrir la boca.
--Bueno, ya me voy— Le grite a mi madre ya agarrando el cerrojo de la puerta.
--Te quiero— Me respondió y sabía que a pesar de la distancia de la cocina a la entrada me lo dijo con una sonrisa en cara.
--Igual— Le respondí y acto seguido salí de mi casa a paso rápido y en el camino me encontré Hannah que llevaba puesto su clásico uniforme de futbol que tanto amaba.
Durante el camino solo hablábamos de como esperábamos que fuera este año y me agrado que no me preguntara por qué había estado un poco callado y verdaderamente no me sentía cómodo al decirle que era por mi padre ya que ella misma sabia de que con tan solo que abriera la boca podía hacer que me sintiera mal, cabe decir que siempre fui una persona sensible a decir verdad y con gran facilidad las personas me hacían llorar.
Este año esperaba con ansias que fuera mi año, poder salir a patinar con Hannah hasta la noche, verla fumar y estar platicando tonterías, tal vez hacer un amigo o amiga ya que Har dice que es importante relacionarse con más personas, pero, es que con Hannah me siento seguro, pero no me molestaría hacer otra amistad y no lo sé, tal vez, tener una relación con alguien.
Sea lo que sea, sabía que disfrutaría de este año escolar, ya fue mucho tiempo llorando y sintiéndome mal todo el tiempo, necesitaba salir adelante, pero claro, todo a su tiempo y no presionaría las cosas, dejaría que fluyeran al natural y que disfrutara del proceso.
¿Qué podría salir mal en este nuevo año?
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Un solo universo
Teen FictionPodría decir verdaderamente, que Teo y Ray no eran como los demás chicos, claro que eran diferentes en varios aspectos, no solo por su físico y por pasatiempos que tenían, era por su alma. Los demás pensaban que esa relación no duraría mucho porque...