Un millón de riesgos...

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Esa noche fue una noche terriblemente tensa para todos... Naegi casi no podía pegar el ojo...

Sus pensamientos sobre la seguridad de Sayaka era todo lo que estaba dentro de la cabeza de aquel suertudo...

La cabeza de el patinador Hajime estaba igual, el pensaba también muchísimo en la seguridad de su amado, Nagito Komaeda, Hajime sentía una culpa inmensa por haber dudado de su novio antes, lo quería de vuelta con él y pedirle perdón...

Incluso Mondo e Ishimaru, y Shuichi con Kaito, ambas parejas de novios se asustaban de tan solo imaginar la idea de estar el uno sin el otro, que era lo que pasaba por sus cabezas de inmediato cuando se ponían en los zapatos de Hajime y Naegi al comprenderlos sinceramente...

Todos cruzaban los dedos para desear lo mismo al unísono...

Que sus amigos regresaran sanos y salvos de vuelta con ellos...

Era la noche anterior al incio del rescate de Sayaka...

Y fue muy probablemente la noche más larga que todos nuestros protagonistas pudieron vivir, si los días últimamente pasaban lentos, esa noche fue el doble de peor...

Las Sweet Gals no pudieron ni dormir...

Naegi y Hajime apenas durmieron una hora y media con sueños bastante inquietantes sobre secuestros random, debido al estrés causado por lo que sucedía...

Kaito y Shuichi, y Mondo Ishimaru durmieron solo 3 horas, como ambas parejas de chicos dormían juntas y acurrucadas, de alguna forma ellos podían tranquilizarse un poco sintiendo la compañía del otro, pero aún así ambas parejas de chicos sentían una genuina y gran preocupación por el estado de seguridad de sus amigos...

Y después de una tortuosa noche, el amanecer llegó...

Para Naegi, incluso el sol se veía pálido, como si hubiera perdido la energía que tenía antes de que Maizono, su Maizono-san desapareciera de Japón...

Para Makoto, todo había perdido el carisma sin su amada Idol...

Extrañaba muchísimo como en las mañanas lo primero que hacían ambos era llamarse y saludarse con el mejor cariño y ternura que pudieran darse mutuamente...

Pero ya Sayaka no estaba ahí con él...

El suertudo comió poco... Komaru estaba realmente preocupada, y los señores Naegi también... El suertudo enano estaba perdiendo su punto más fuerte poco a poco; su positivismo ante las dificultades...

Ni siquiera dándole un abrazo en familia parecía recuperar fuerzas...

"Komaru... Papá... Mamá... Gracias..."

Se escuchaba cada vez más desanimado...

Se baño y se vistió con desánimo... Y se fue a la academia... A través de aquel pavimento que ahora lucía deprimente para aquel suertudo...

Cuando llegó a la academia, Chiaki, Kaede e Ibuki saludaron muy animadas a Makoto, pero este apenas mostraba alegría en su rostro, ya no era capaz de engañar a nadie; su sonrisa se veía rota... Como una máscara falsa que ocultaba sus verdaderos sentimientos...

Sus compañeros de clases claramente lo notaron también, Chihiro y Asahina eran de los más preocupados por Makoto...

Chihiro: *se acerca al asiento de Naegi al verlo cabizbajo* Na-Naegi... De verdad, siento mucho lo que estás pasando con Maizono-san...

Asahina: *se acerca también* todo esto debe ser solo un malentendido, se que Maizono-chan aparecerá para aclararlo todo más tarde que temprano, ella te quiere y no tengo dudas de ello... *Animando a Naegi*

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