𝐍𝐄𝐖 𝐑𝐔𝐋𝐄𝐒 ♡̷̷۫۫ Sungsun

✎ 12

Si lo quieres o no, voy a aferrarme a ti.

– Jungkook Cover (Only Then)

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Las mejillas de Sunoo se pintan de un leve rosa al ver lo que Sunghoon sostiene frente a él. El azabache sonríe nervioso, lo que provoca que Sunoo ría un poco, ya que jamás había presenciado a un Sunghoon así.

Su cabeza no deja de repetirle que no caiga, que sea fuerte y que resista a los encantos de Park. Pero Sunghoon es buen jugador, y en cuanto ve que el rubio intenta colocar una cara seria, para fingir que no provoca nada en él, sonríe mirando el suelo y extiende su mano.

— ¿Quieres ser mi novio, Kim Sunoo? — pregunta, la mano del menor es tomada por el azabache. Sunghoon está apunto de arrodillarse para ofrecerle el ramo de orquídeas, pero Sunoo es necio y se rehúsa a dejar que la situación sea tan fácil.

— Tendrás que hacer más que ofrecerme flores, Sunghoon. — el mencionado ríe, levantándose para sacar de la mesita de noche su segundo intento de pedir perdón.

Sun no puede dejar de revisar cada rincón del lugar al que llaman secreto, una pequeña sonrisa tira de sus labios al ver como el azabache ha decorado el cuarto. Mientras Sunghoon busca en la mesita aquel obsequió, el rubio posa su vista en las fotos que forman un corazón en la pared por encima de la cama.

— Te esforzaste en esto, ¿No es así?

— Bueno, tenía que prepararme para este día.

— ¿Tan seguro estabas de que querría venir?

— No, me arriesgué.

Los pies del menor se cruzan aun estando de pie en signo de nervios, su cabeza se inclina cuando ve que el azabache vuelve a acercarse. Sunghoon lo rodea, parándose detrás de él, haciéndolo poner más nervioso.

La piel de Sunoo se eriza en cuanto siente como el azabache toma su cintura, sus manos se posan en las contrarias, frunciendo el ceño tentado a girarse para reclamar el tacto. — No te muevas. — susurra el mayor detrás de él, retirando sus manos y pasándolas por encima de la cabellera dorada.

Los bonitos ojos azules del menor alcanzan a ver el collar que Sunghoon esta colocando en su cuello. Una vez es abrochado correctamente, Sun vuelve a sentir esas manos en su cintura.

— Sunghoon... — murmura, tomando el collar entre su mano para asegurarse de que el dije era lo que había visto; un anillo.

— Escucha, Sunoo. — pide en su oído, deslizando sus brazos alrededor de la cintura esbelta. — He pasado todos estos días tratando de pensar en otra cosa que no seas tú, pero me es imposible hacerlo. Mi vida no es el maravilloso cuento en donde el protagonista rescata a su príncipe de aquello que lo daña, probando su valentía y coraje, sino todo lo contrario. Mi príncipe me ha rescatado más veces de las que te puedas imaginar, me ha enseñado que no tienes que ser fuerte por fuera si por dentro te estás debilitando.

«Tengo secretos, secretos que no he compartido contigo, no soy quien realmente crees que soy.»

Quiso girarse, enfrentar a Sunghoon por las palabras que había dicho, pero el mayor no lo dejó. El azabache lo sostuvo en su lugar, apoyando la cabeza en su hombro luego de decir aquello, casi con miedo a dejarlo ir.

— Necesito que mi príncipe vuelva.

Todo lo que el menor puede hacer es mantenerse callado, su garganta se siente apretada cuando Sunghoon sostiene su cintura con un poco más de fuerza. Lleva sus manos a las que reposan en su estómago y las acaricia con cariño, tratando de hacer que el mayor se relaje.

— Suéltame. — dice, tomando las manos para retirarlas, sin embargo, Sunghoon no cede. — Vamos, Sunghoon, no iré a ninguna parte.

— Dame otra oportunidad, Sunoo. — los ojos de ambos se encuentran cuando el menor se gira, aún con los brazos de Sunghoon sosteniéndolo. La mejilla del menor es acariciada por una de las manos del azabache. Sunoo no sabe que hacer, su mirada se pierde en esos labios que tanto extraña, sus frentes se juntan y las manos del rubio se posan en la cadera del mayor. – Tomaré esto como un sí, haré las cosas bien esta vez, mi amor.

Y aunque el rubio aún no sabe sobre la verdadera razón por la que lo ocultaba, pronto se encuentra buscando el sabor de los labios ajenos. Porque sea como sea, Sunghoon es el único hombre al que quiere y mientras eso no cambie, el lugar de su corazón siempre será junto al azabache.