Demonios

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Así es mi vida, aburrida. Tengo trece años y nunca pasa nada interesante en mi vida, es lo típico, ir al Instituto, volver a mi casa, y dormir toda la tarde esperando que pase el día y así volver a hacer lo mismo hasta el día siguiente y así constantemente. Pero un viernes, un viernes cuando por fin empieza el fin de semana, y volvía del Instituto a mi casa, noté que alguien me estaba siguiendo, lo sabía porque notaba escalofríos cada dos por tres y veía una sombra a lo lejos moverse entre la oscuridad de los callejones, pero cuando ya estaba a 5 metros de mi casa no volví a notar la presencia del que me seguía, mejor para mi pensé yo, seguí hasta llegar a mi casa, pero al estar frente a la puerta note una sensación de incomodidad, pero también olía mal, como a muerto. Entre y lo que vi fue impactante, mis padres, en el suelo con los ojos abiertos, despedazados y ensangrentados, con los ojos inexpresivos, pero lo peor de todo fue al levantar la vista del suelo, vi a alguien, un monstruo de forma humanoide, pero era rojo, estaba desnudo, tenía los pies con uñas afiladisimas y en la mano igual, dos cuernos puntiagudas en la frente, dientes afilados y unos ojos con pupilas negras, pero negras negras, no expresaban nada, eran como los de mis padres, parecía que ese ser estaba muerto, pero no, estaba a 3 metros de mi, mirándome fijamente como yo a el, pero, el silencio se rompió cuando señaló a mis padres, y el cuerpo se mis padres estalló, noté la sangre de mis padres salpicando en mi cuerpo, y en mi cara y fue muy raro la verdad, hasta ese momento me había percatado que mis padres habían muerto y los había matado una especie de monstruo a dos patas, pero no podía ni asustarme, estaba tan asombrado que no pude expresar mis emociones, sólo pude ver todo lo que sucedía en el momento. La sangre se había esparcido por todo el salón, pero, de repente la sangre empezó a moverse como si fuera un ser vivo, también la que estaba en mi cuerpo se empezó a despegar de mi cuerpo sin de pujar rastro alguno de haber estado antes en mi ropa o cara, se reunió toda la sangre en el centro del comedor, y de repente se empezó a expandirse formando un rectangulo enorme, formando una especie de puerta hacia algún lugar, eso me saco un poco de mi estafó de shock, ya que yo había leído sobre eso, hay seres que usan la sangre se las personas para crear portales a un mundo, y ese mundo es, el Infierno, lo había leído en un libro de la biblioteca, el miedo invadió mi cuerpo y en lo único en que pensaba era en echar a correr como un loco y avisar a la policía, pero había perdido de vista a ese ser ya que cuando me fui a girar me encontré con su poderosa figura alargando los brazos para agarrarme, lo hizo, pero por alguna razón superé mi miedo por un instante e intente soltarme con todas mis fuerzas, pero poseía una fuerza sobrehumana, era muy fuerte y parecía que me iba a escuchar los huesos, pero no grite de dolor ya que me concentre en intentar soltarme, pero por culpa de esto no pude darme cuenta de que el ser había caminado hasta estar delante de la puerta horizontal que había en el suelo extendido, estaba encima de la puerta y por lo que noté el ser me estaba soltando, ¡me quería llevar al infierno!. Cerré los ojos esperándome lo peor, pero antes de darme cuenta una espada atravesó el cuerpo del ser, lo sé, ya que noté algo afilado, abrí los ojos y lo vi, la espada que atravesó al demonio empezó a brillar con un blanco intenso y el ser que me tenía agarrado rugió, de dolor, el cuerpo del ser empezó a quemarse y sus manos que me tenían atrapadas empezaron a soltarme y me cai, pensé que iría al infierno al caer en el portal, pero lo único que pasó fue que caí de culo al suelo, fue todo en un instante, no podía creer todo lo que acababa de pasar, miré alrededor del salón y no había rastro de sangre alguna, seguí mirando hasta darme la vuelta, y lo único que vi fue a un hombre normal, pero con una espada que llevaba en la mano, la espada que había matado al ser misterioso. El hombre tenía una expresión sería, dijo unas palabras raras que sonaban así - destroia força malignus is ça- y la habitación se volvió toda blanca, lo siguiente que hubo fue un destello y un montón de gritos de horror, como si pidieran ayuda, cuando la habitación se volvió blanca y hubo destello por culpa del último hecho tuve que cerrar los ojos, así que los gritos solos los escuche pero no pude ver nada más, al acabar todo la casa estaba igual pero la sentía más pura, daba una sensación de seguridad increíble, me levanté me gire y el hombre estaba ahí, pero esta vez, estaba alegre y me estaba mirando, hubo un silencio, pero se rompió cuando me dijo - Hola chaval, se que todo lo que acaba de pasar es un poco raro, pero creo que ahora esto será lo más normal que veas cada día, sólo dos cosas, los demonios seres creados a partir de la locura humana, existen desde hace millones de años con la misión de crear el caos, pero ante esto un ángel respondió a las fechorías de los demonios, creando humanos con poderes angelicales, que existen para derrotar a los demonios. Yo claramente soy uno de ellos, y me llamo Máximo, Maxi para los amigos y pequeño amigo, tú eres un ser muy especial por eso los demonios vienen a por ti, como habrás visto ha matado a tus padres, bueno tus padres, porque eras adoptado, tus padres están entre nosotros, son caza demonios que así se llama la raza de humanos angelicales. Y bueno, ¿como te llamas chaval- me pregunto Máximo, -Mark, respondí yo- y perdone pero no entiendo nada de lo que me quiere decir, Maxi se rió, y me dijo - chico sólo has de saber una cosa, desde hoy, tu vida ya no volverás a tener una vida normal, a partir de ahora te convertirse en uno de los tuyos , los caza demonios-.

Caza DemoniosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora