Used to ~Jb~

Parte 2

Justin

Justin empujó la puerta de su casa con sigilo. Miró al salón, que estaba vacío. Algo raro.

Había un ambiente oscuro y pesado entre las paredes que lo puso en alerta al instante.

Miró a su alrededor con nerviosismo, lamiendo sus labios. Cuando oyó un par de ruidos en la cocina, y el chico no tardó en caminar con decisión hacia ella.

Deslizó la puerta corredera y entró en la estancia. El ruido del microondas lo recibió.

Suspiró al ver la figura de su madre de espaldas a él, frente a la encimera de mármol negro, mirando fijamente hacia el microondas donde la comida daba vueltas.

"Mamá..." susurró él, con cuidado de no asustarla, aunque, aún así, la mujer dio un pequeño bote en su sitio.

Se giró, y Justin pudo ver perfectamente que tenía los ojos llorosos, el labio inferior le temblaba. Dirigiendo su mirada hacia su cuello, vio que tenía un par de marcas rojas en su clavícula y su hombro.

Se acercó a ella y la abrazó inmediatamente, sintiendo la rabia y el odio consumirle al ver a su madre así, sumisa, débil, rota.

Su madre temblaba en sus brazos, mientras que Justin la sostenía contra su cuerpo, cerrando sus ojos durante unos instantes.

"¿Ha sido él? ¿Ha vuelto a pasar?" le preguntó, apartando un par de mechones oscuros de enfrente de su rostro.

"Shh, no lo despiertes, por favor" le susurró ella, como si de repente hablar en voz alta fuera un delito.

"Contéstame, ¿ha sido él?" le volvió a decir, sosteniéndola por los hombros.

Ella dejó pasar un par de segundos antes de asentir levemente.

Justin apretó sus puños a ambos lados de su cuerpo, notando las ganas de agarrar un cuchillo y matar a aquel hijo de puta. Odiaba con toda su alma ver a su madre así, y tuvo que hacer un esfuerzo por no llorar ante toda la impotencia que sentía en aquel momento.

"Llama a la policía. Ahora" le dijo, sacando su teléfono y tendiéndoselo a ella.

Pattie negó con su cabeza, y haciendo un gesto con la mano, se alejó de su hijo.

"N-no, no hace falta llamar a nadie, Justin" dijo ella, con la voz temblando.

El rubio tensó su mandíbula, volviendo a ofrecerle el teléfono, y sin poder creerse lo que su madre estaba diciendo.

"Claro que hace falta. Tenemos que acabar con esto de una maldita vez, no puedes seguir así, mamá" le rogó él, pero ella volvió a negar con la cabeza.

"No pasa nada, Justin. Estoy bien, de verdad" aseguró, aunque ni siquiera ella se creyó aquella mentira.

"No puedes estar bien, el idiota de tu novio acaba de..." comenzó a decir él, elevando más la voz, pero Pattie le tapó la boca con rapidez, mirando a su hijo como un ratoncillo asustado.

"Justin, por favor. No quiero pelear ahora, déjalo estar" pidió la mujer, aún sin soltar la boca de Justin "Por favor"

Él dejó caer los hombros y asintió, su madre apartó la mano de su boca.

Justin no dijo nada. No tenía nada que decir. Aquellas situaciones le partían el alma.

"Sube a ver a Jazzy, comprueba que ella está bien" le pidió ella en voz baja.

Justin se retiró de la cocina sin mediar palabra, subió las escaleras de su casa y se encaminó por el largo pasillo.

Cuando pasó por delante del cuarto de sus padres, sintió la ira recorrerle las venas. Allí dentro estaba el cabrón de su padre, durmiendo la mona después de haber bebido.