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Había un sin fin de cosas que Jeonghan podía controlar. Por ejemplo, quién entraba a Summer House, cómo y cuando lo hacía, qué hacer o no con su tiempo libre, cómo vestirse cada día, ordenar lo que quería comer, usar o desechar. Si algo no le gustaba podía simplemente dar una orden y arreglarlo. Crearlo o destruirlo, apresurarlo o detenerlo. Pero había algo que ni él, ni nadie podía manipular.

El tiempo.

Hanna y Seok crecían cada día, lo que había sido jamás volvería a ser, y tenían que aceptarlo. Tenían que concentrarse en lo que sí podían hacer. Disfrutar cada momento de ello.

Cuando Hanna y Seok comenzaron a dar sus primeros pasos, los días de grabación que antes ocupaban casi todo el fin de semana se redujeron a escasas horas, los juegos entre miembros y encuentros de sexo casuales cambiaron por jugar al escondite con los niños, y las noches de sexo con Jeonghan, simplemente desaparecieron.

Hanna desarrolló cierta dependencia física y emocional por Jeonghan y Wonwoo. Por ratos no quería caminar o alimentarse por sí sola a pesar de que sabía hacerlo. Cuando no veía a alguno de los dos lloraba hasta quedarse dormida, Jeonghan trataba siempre estar con ella, en las horas de grabación era Wonwoo quien la cuidaba, pero él no podía estar siempre allí. Tenía muchas responsabilidades. Y Jeonghan también necesitaba un descanso. Los miembros solían ayudar pero no pasaba mucho antes de que ella se volviera intolerante.

- ¿Pensaste lo que te dije? - preguntó Wonwoo

Hanna jugaba en la oficina de Jeonghan, sobre una alfombra y juguetes regados por el suelo. Wonwoo la tenía entre sus piernas.

- ¿Una guardería? No. Definitivamente no.

- Jeonghan, estás al borde del colapso, necesitas ayuda.

- ¿Qué diferencia habrá en tenerla con desconocidos? Seguirá llorando. Está mejor conmigo.

- Estar con otros niños también le hará bien, se está haciendo antisocial - dijo dándole un beso en la mejilla

- Seok es su amigo

Dijo sin dejar de mirar y firmar papeles en su escritorio.

- ¿Sabes lo que dirá mi madre si se entera? Ella se ofrecería a cuidarla y luego cobrará por sus servicios de abuela.

- Tuvimos mucha suerte de que te dejara en paz una vez que aclaramos lo de la paternidad... Pero ahora...

Jeonghan lo miró serio

- No lo digas, no te atrevas a decirlo

- Jeonghan

- ¡No! - estampó las manos sobre los papeles. Hanna saltó de susto. Se puso de pie de prisa y abrazó a Wonwoo por el cuello, comenzando a sollozar.

- No pasa nada, cariño - le dijo acariciando su cabecita y dándole besos - Papá está un poco enojado, tranquila.

Hanna lo abrazó más fuerte. Y Wonwoo miró furioso a Jeonghan. Claro, había dicho que lo amaba y no lo ponía en duda, pero su amor con comparado con el que había desarrollado por Hanna era abismal.

- Hanna... - intentó acercarse a ellos - Nena...

Hanna se escondió aún más en el cuello de Wonwoo.

- Vamos a hablar de esto - le dijo Wonwoo poniéndose de pie - Alguien te lo tiene que decir, por la buena... O por la mala.

🔥💎❤️💎🔥

- ¿Se quedó dormida? - preguntó el rubio cuando Wonwoo regresó a su oficina

- Sí, pero no dormirá por mucho tiempo - admitió sentándose frente a él.

LIGHT A FLAME (JEONGHAN X SEVENTEEN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora