CONQUISTANDO AL HÉROE N°1 (dekubaku)

Solo te estoy molestando

"Los omegas son seres muy atractivos para los alfas por naturaleza, no importa que tan fuerte sea un alfa, siempre caen ante sus encantos."

En lugar de Deku, Mirio había sido enviado a Reino Unido para apoyar con la investigación. Aprovechó su amistad con el alfa rubio para pedirle que le envía información sobre lo que sea que encuentre respecto a ese grupo de trata de omegas.

Entre esta y otras actividades trataba de distraer a su mente y a su alfa para tratar de estar concentrados en el trabajo, ya había pasado un mes desde que Katsuki no había entrado al entrenamiento especial para ver quien patrullaba con el número uno, eso de alguna manera lo ponía ansioso. 

En cambio, Katsuki se había concentrado en mejorar su estilo de pelea y resistencia observando y patrullando con los otros héroes que trabajaban en la agencia. Con Froppy mejoró su agilidad, de Uravity a mantenerse mas tiempo flotando en el aire con sus explosiones, de Ingenium aprendió a leer los futuros movimientos ya que le era imposible alcanzarlo en el aire, por lo que tenía que predecir a donde se dirigía. Del mismo modo lo hizo con otros héroes que trabajaban en la agencia pero que no sobresalían tanto como los primeros.

Durante todo ese mes Bakugo fue de visita a la casa de sus padres, les dijo que estaba muy ocupado y estresado con su nuevo ritmo de trabajo como héroe por lo que venía por algo de cariño de su padre omega. Masaru muy gustoso accedió a consentir a Katsuki, pero los dos padres conocían bastante bien a su hijo, algo le pasaba y no era por el trabajo, no imaginaban que era por un alfa. Sin embargo, el olor agrio de Katsuki les daba la pequeña esperanza de que tal vez el omega ya esté interesado en alguien y rogaban porque fuera así.

- ¿Seguro que está todo bien hijo? -

- Ya te dije 1000 veces que si, solo déjame descansar.-

Katsuki estaba recostado en las piernas de su padre mientras este le acariciaba el cabello.

- Sabes que puedes contarme todo lo que quieras Katsu. -

- Solo estoy cansado. -

Masaru expulsaba sus feromonas para arrullar a su cachorro, desde que llegó pudo percibir el olor de un alfa sobre su hijo pero no quería preguntar sobre su vida privada, esperaría que él mismo se lo diga, y tampoco se lo diría a Mitsuki que seguro estresaría a su hijo llenándolo de preguntas.

- ¿Qué se siente trabajar en la agencia del símbolo de la paz? Ya es un gran logro para tu carrera, de seguro lo deber ver seguido... -

Sin querer dio en el clavo al percibir como cambiaba el olor de las feromonas de su hijo. 

- Supongo que bien. - Bakugo no miraba a su padre, intuía que ya lo había descubierto. No importa que tan fuerte aparente ser Katsuki, fue rechazado y su omega lloriqueaba mientras él trataba de guardar la compostura.

- Katsuki, no me digas que...-

De pronto el celular de Katuski empezó a sonar, el rubio lo tomó para dejar de escuchar a su padre sin siquiera ver el remitente de la llamada.

- Hola -

- Katsuki tienes que cubrirme en el turno de la tarde.-

- ¿Ahh? - Se levanta se la cama. - ¿Por qué haría eso rubia falsa? -

- Ya te he dicho que me llames Camie, estoy atrapada en el centro comercial del este de la ciudad. Parece ser un grupo de terroristas que han cerrado todas las puertas y hay muchos rehenes. Ya alerté a los héroes -

- Tsk, bien, envíame tu ubicación yo también iré allá. -

Bakugo salió de la casa de sus padres sin despedirse, Mitsuki solo gritoneaba que debería estar en su departamento descansando en las piernas de un alfa, no de su padre omega. Por otro lago Masaru aun no podía asimilar los gustos de Katsuki, por ahora guardará esa información de su esposa a hasta hablar con su hijo.