Los secretos de Dante

1. Alina

Mis ojos se me cerraban, la cabeza me daba de vueltas, además las nauseas amenazaban con volver, odiaba ser adulto, la mayoría de personas cree que al cumplir los 25 tenemos la vida resuelta.

Creemos inútilmente que a esta edad ya contaremos con departamento, carro y un gato esperando en casa, sin embargo la realidad es otra muy diferente.

Cuando acabas de salir de la Universidad nadie quiere contratar a un principiante, todos quieren a alguien con experiencia.

Debido a ello debes buscar otras opciones, un oficio que te ayude a pagar deudas, antes de conseguir el trabajo de tus sueños.

En mi caso fui mesera en un bar.

Y no quiere decir que me sienta mal con ello, ya que gracias a eso pude comprar mi apartamento, no en una zona cara, pero si en una decente y es que Madrid no es muy barato para vivir.

Un año después de ello aplique en una revista para ser escritora de espectáculos, no era mi rama favorita, debido a que quería ser escritora de temas importantes, sin embargo era una oportunidad que no podría desaprovechar y que B&K me estaba dando.

El pago no era tan malo, o bueno al menos me alcanzaba para mis gastos básicos, cómo comida y transporte.

Aunque no desaprovechaba la oportunidad de mostrarle a mi jefa que era capas de escribir cosas diferentes.

Y es que no quería ser como "Andy Anderson".

Si la de como perder a un hombre en 10 días, que solamente escribía artículos inútiles y desesperantes.

-Alina.-escuche a alguien decir mi nombre cosa que me regreso a la realidad, levante la vista.

—¿Sí? —dije tragando saliva para no sonar tan mal.

—¿Estas bien? —pregunto Alissa mi directora en jefe.

—Creo que fue el desayuno, mentí y es que no quería que mi jefa supiera sobre mis problemas personales -Alissa hizo una mueca de asco y asintió con la cabeza.

—Te necesito en mi Oficina en 10 minutos. —dicho eso se dio la vuelta y se alejo de mi lugar.

Alissa era alta rubia y de ojos claros, una chica de la cuál se podría enamorar cualquiera a simple vista, sin embargo tenía un carácter de mierda.

Su padre le había dado el puesto de editora en jefe en la sección de espectáculos en B&K y a mucha gente no le pareció ya que no contaba con experiencia.

Era una recién graduada, alguien sin práctica en la materia, pero supo como hacer que su sección fuera una de las más leídas.

Suspire pesado y me levante de la silla al hacer lo me dio un poco de vértigo, así que para no caer al suelo me detuve un momento del escritorio y suspiré.

Una vez que contaba con el equilibrio suficiente. Camine paso a lento hasta la Oficina de Alissa.

Al llegar toque la puerta.

-Adelante. - dijo y la abrí .

Las instalaciones de B&K eran bastante cómodas, cada cubículo tenía suficiente espacio como para tener una computadora y un lugar donde hacer anotaciones, las paredes eran pintadas de rosa con amarillo, una combinación muy inusual, pero elegante.

En cambio la Oficina de Alissa tenía todo de color oscuro, muebles bastantes serios, dos pizarras llenas de pendientes, un gran librero y dos pequeñas mesas.

—Necesitamos hablar contigo. —dijo señalando a su padre que se encontraba junto a ella. Trague saliva y asentí con la cabeza.

Me acerque y tome asiento en la silla que quedaba.

—Voy a ir al grano, porqué no me gustan los rodeos. —puntualizo mientras cruzaba las piernas y dejaba aún lado los papeles que tenía en las manos.

—Llevas un año trabajando en B&K y eres una escritora con bastante potencial.

Me lo has demostrado muchas veces, tu persistencia me tiene cansada.

Es por eso que te queremos encomendar una tarea muy importante.

Existe un rumor sobre cierto Buffett relacionado con el crimen organizado. Nuestro deber como comunicadores es investigar si es verdad o no.

Este artículo ayudaría a crecer la revista.

Así que la única manera de encontrar pruebas necesarias es infiltrando a gente, a alguien de confianza, necesitamos unos ojos y oídos en dicho lugar.

Alguien que pase desapercibido y que pueda darnos la información que necesitamos.

Y la única en todo el lugar eres tú.

Escribes con seudónimo, no hay registro tuyo en ningún lado, es como si no existiera.

Así que mi padre te trae una oferta. —escuchaba atentamente cada una de sus palabras. Creía saber a dónde iba el punto y estaban logrando tener toda mi curiosidad a flor de piel.

—Queremos que seas la infiltrada en dicho buffet, estuvimos esperando mucho tiempo esta oportunidad de tener a alguien y sobre todo de que abrieran convocatoria para empleados y de buena fuente sabemos que el lunes abre.

Si obtienes información valiosa serás muy bien recomendada, es más en el momento que digas aceptó tu vida cambiará ya que te daremos un apartamento, un carro nuevo, es decir una nueva vida a cambio de información. —me sentía como si estuviera en una película de espías y es que todo eso me llamaba mucho la atención.

—¿Tendré problemas con ello? — dije y él señor Becker negó con la cabeza.—y yo sentí.

Cuando entre a estudiar periodismo soñaba con hacer investigaciones que ayudarán a cambiar algo, pero meterse con gente peligrosa me daba un poco de miedo.

—Ninguno.-suspiré pesado y pensé en las ventajas y desventajas de esto.

—Alina.—Tú vida puede cambiar, puedes dejar de vivir en ese apartamento de mierda, mejorar tu salud y tener un mejor futuro, piensa en tu carrera. —era cierto, necesitaba cosas, que quizás me costaría mucho trabajo tener, llevaba 5 años trabajando y no todos los días me alcanzaba para cenar, estaba harta de tener que caminar al trabajo por falta de plata o de tener que pedir prestado a mis padres, ellos merecían lo mejor y yo merecía una buena salud.

Así que finalmente asentí con la cabeza, tenía más cosas que ganar que perder.

—Aceptó.—dije y ambos sonrieron, Alissa me tendió un sobre. -al ver el nombre fue como si me lanzarán un bote con agua helada.

Estaba a punto de retractarme cuando me dio dos llaves.

—Tu nuevo hogar y tu automóvil. —volví a ver el nombre en el sobre y suspire pesado.

Dante Casares.

El ser más repulsivo y exasperante que conocía y al que un día hice mierda su auto por engañar a mi mejor amiga.