5. Empaqué mis cosas y me voy

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–Dime, ¿quieres terminar conmigo, acaso? –El tono que el menor estaba usando comenzaba a elevarse.

–¿De qué mierda estás hablando, Jimin? –El pelinegro resopló cansado. –Carajo, estoy harto de que siempre exageres todo.

–Literalmente les dijiste a tus amigos que no te gusta estar con una persona que sea tan sensible como yo y que si fuera por ti, no estarías conmigo.

–Pues es la verdad, eres jodidamente sensible y exagerado.

Jimin sintió un dolor en su pecho, seguramente era su corazón rompiéndose por lo que acababa de escuchar.

–¡No es mi puta culpa ser así! No es como que cada día despierte y piense "oh, ¡sería maravilloso sentir que quiero llorar por todo hoy!". –Sus ojos comenzaban a arder debido a las lágrimas que se estaban acumulando y que no se permitía dejar salir. –Además, antes no parecía importarte, al contrario, decías que si quería llorar estaba bien porque estaba sintiendo y eso significaba que era humano y que tenía un corazón.

–Eso era antes de pasar tanto tiempo contigo, antes de descubrir que eres una molestia.

Jimin no pudo seguir escuchando como su novio, el que se suponía que era la persona que debía quererlo, estaba pisoteando su forma de sentir, tomó su mochila del suelo y caminó a la parada de autobús.

Ingenuamente volteó un par de veces con la esperanza de que Yoongi estuviera siguiéndolo, pero sabía de sobra que eso no iba a pasar.

¿Debería terminar con esa relación inestable? Empezó a entender esa frase que dice que a veces el amor no es suficiente y recordó cuando se lo dijo a Yoongi. Sin embargo, este sólo le respondió que no se preocupara por eso y que claro que el amor que sentían el uno por el otro iba a bastar.

Justo ahora no parece que baste.

Claro que Jimin amaba a Yoongi a pesar de todo, y se sentía como si Yoongi lo amara también. Pero estaba consciente de que a veces estar en esa relación le hacía más daño del que parecía.

Llegó a casa, afortunadamente no había nadie, por lo que inmediatamente después de cerrar la puerta de su habitación, comenzó a dejar que las lágrimas que estaba luchando por controlar salieran.

Y lloró por horas, lloró hasta que no pudo más porque sabía que el trato que su novio le daba no era el que se merecía. Se estaba conformando con tan poco, pero él lo amaba, lo amaba más de lo que se amaba a sí mismo, no podía imaginarse sin Yoongi.

Y aunque no lo aceptaba, estaba esa voz en su cabeza que constantemente le decía que tenía mucha suerte de que Yoongi se hubiera fijado en él y que si lo dejaba ir, nadie más lo iba a querer.

Sin darse cuenta, se quedó profundamente dormido.

Así permaneció un rato hasta que sonó su teléfono en alguna parte de su mochila. Se levantó con pesadez hasta encontrarlo, el nombre de su novio se podía ver en la pantalla. Lo estaba llamando.

Honestamente no sabía nunca que esperar, a veces en lugar de arreglar las cosas todo se salía de control y terminaban gritándose más.

Contestó con voz temblorosa sólo para escuchar como la voz de Yoongi se quebraba por el otro lado de la línea al pronunciar su nombre. Todo rastro de molestia de Jimin desapareció en cuanto escucho a su novio así de vulnerable, inmediatamente su instinto le gritaba por correr a abrazarlo.

–¿Yoon? ¿Qué pasa?

–Jimin, perdón. Sé que te mereces a alguien mejor que yo, pero te amo. –Se podía escuchar como intentaba respirar con dificultad. –Lo que dije hace rato fue porque estaba molesto, no lo decía en serio.

Jimin siempre pensó que eso era falso. Las personas dicen cosas hirientes cuando están molestas porque no se atreven a decirlas en el momento en que las pensaron, después terminan echándole la culpa al enojo que sentían, sin embargo, no dijo nada.

–Está bien, Yoongi. De hecho, creo que yo también te debo una disculpa.

–¿Por qué te disculpas?

–Por ser así de sensible y exagerado. Sé que no te gusta que sea así, y voy a intentar detenerlo para no molestarte.

Después de un largo silencio, el mayor finalmente habló.

–Está bien, Jimin, pero no tienes que hacer eso. Te amo y te prometo que nunca voy a volver a invalidar tus sentimientos. Siempre me dices que los míos importan, pues la forma en la que te sientas va a ser mi prioridad desde ahora.

Jimin suspiró.

–También te amo, Yoon. Gracias. –Suspiró, aunque ya no confiaba plenamente en él.

La palabra promesa empezaba a perder su valor. Perdía el significado cada vez que salía de la boca de Min Yoongi.

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⏰ Última actualización: May 11, 2022 ⏰

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