Noche de copas

Parte 3

Llegan a casa de Raúl después de manejar por un par de minutos, sin ningún tipo de inconveniente.

—Adelante, pasa, estas en tu casa —le dice al castaño— ponte cómodo mientras veo que tengo para tomar —el mayor se dirige a la cocina—

Se acercan de manera cuidadosa al sofá Lukas y Bosnia donde se encuentra Reborn

—Hola guapos! hace tiempo que no los veía, pero que grandes están —les dice el castaño mientras los acaricia—

—Pues podrías verlos si vinieras más seguido a casa, —se acerca Raúl con un par de cervezas en la mano y le ofrece una al menor—, pero el señor siempre se hace del rogar.

—No me hago del rogar, tu no me invitas que es diferente —le da un sorbo a la cerveza—

—Pero que dices, si tu no necesitas invitación mamagüevo, sabes que eres bienvenido cuando quieras, no hace falta más que me escribas.

La noche transcurre entre platica y bebida, ambos amigos ya se encuentran más relajados debido a las cervezas que llevan y las copas que se habían bebido anteriormente en el bar.

—Y que tal lo llevas con Sara? —pregunta el castaño de la nada, arrepintiéndose al segundo de hacer la pregunta—

—Pues... Bien, nada nuevo, ya sabes, somos buenos roomies.

—Roomies? —pregunta el menor sorprendido—

—Si, eres el primero en saber la noticia, sabes? —Dice de forma seria el mayor— hace tiempo que no somos pareja, pero seguimos viviendo juntos por que ya sabes, las redes sociales, la gente especularía y empezaría a hablar, y a decir verdad, me cansa todo eso.

—Estas de coña, verdad? 

—Para nada, por que te mentiría en algo así? A caso crees que estoy jugando con eso?

—No tío, no quise incomodarte, es solo que me sorprendió mucho la noticia.

Reborn ya había notado ciertos coqueteos hace tiempo, pero pensaba que eran productos de su imaginación, ni el mismo sabía en qué momento se había empezado a sentir atraído por Raúl, no sabía si eran esas charlas por la madrugada, las tantas horas de jugar juntos, esas salidas con los demás amigos, lo único que sabía es que nunca se había sentido tan cómodo con una persona como con Raúl, pero le daba miedo no ser correspondido, le daba miedo el estar mal interpretando las ''señales'' que le mandaba el mayor, ya que no quería arruinar esa amistad...

—Ehhh tierra llamando a Reborn, estas bien? —Le habla el mayor mientras hace movimientos extraños con la mano—

—Perdona, me quede pensando en algo, no quise verme grosero —No sabía en que momento se había envuelto en sus pensamientos, pero por la reacción del rubio, fue un tiempo considerable—

—Tanto te impacto la noticia? Yo pensé que ya lo habías notado —comenta el mayor divertido— tan enamorado te tienen que no te das cuenta de las cosas? —le da un trago a su cerveza sin quitarle la mirada de encima—

—Como que enamorado? Sólo no esperaba la noticia.

—Venga Reborno, no me vas a decir si te gusta alguien, aunque sea un poco? Es que no me lo creo que nadie te guste, con esa personalidad que te cargas, debes de tener a mas de una a tus pies.

—Pues la verdad es que si, si hay alguien que me gusta, pero es complicado, veo muy poco probable que si quiera se pueda dar algo.

—Y puedo saber quien es? —pregunta el mayor ansioso— Alguien de la plataforma? Alguna compañera en común, o quisa alguien de tu trabajo anterior?

Reborn lo observa sin responder, por que esta tan ansioso en querer saber? Tal vez solo sea la curiosidad...

—Eh Reborn sigo aquí, yan van 2 veces que te vas a la luna, empiezo a a sentirme i-gnorado

Sin darse cuenta Auron estaba sentado mas cerca de Reborn, rosaban sus piernas y el mayor tenia su mano reposada en el hombro del castaño.

—Venga Ribourrrn dime quien te gusta, quien sabe igual y si conozco a esa persona te puedo ayudar-

—Dudo mucho que me puedas ayudar—comenta Reborn con la mirada baja— es algo complicado en realidad, por que nisiquiera se si el tenga los mismos gustos

—El? Dijiste el? —Responde el mayor sorprendido con los ojos muy abiertos y las pupilas dilatadas— Hombreee, no sabía que te gustarán los tíos— se sonroja mientras termina su cerveza—

—No, no me gustan los tíos, bueno no se, es raro, siempre había tenido novias y nunca me había sentido atraído por un hombre hasta que lo conocí a el, sabes? el me hace sentir pleno, comodo, cuando hablo con el simplemente todo al rededor desaparece, no se que es lo que me estas haciendo Raúl —dijo esto último sin pensar, nisiquiera noto lo que había dicho hasta que vio la cara del mayor—¿Qué te pasa, parece que has visto un fantasma?

—Dijiste que no sabes lo que te estoy haciendo, Reb, estabas hablando de mi? —pregunta el mayor sonronjado sin quitarle la mirada de encima— Yo soy la persona de la que estabas hablando?

Reborn se quedo callado, no sabía que decir, solo pudo pensar para si mismo ''Como pude decir eso?'' —Me tengo que ir Raúl, ya es tarde y tengo que irme— se paro enseguida y tomo sus cosas, caminando hacía la puerta.

—Pero que dices, como te vas a ir si nisiquiera trajiste tu carro, yo fui por ti, recuerdas? Reb espera—le hablaba mientras lo seguía hacía la puerta— Reborn espera —cierra la puerta que el menor ya tenía abierta para irse— No puedes irte en esas condiciones.

—Raúl de verdad me tengo que ir, no quiero incomodar mas.

—Incomodar? Y quien ha dicho algo de incomodar? Que la estamos pasando bien Reb, no entiendo por que te pones así, nisiquiera me has dejado hablar, espera por favor.

Auron estaba fuera de si, solo podía pensar si eso en verdad era real, llevaba ya un tiempo sintiendo cosas por el menor, cosas mas allá de una amistad, pero al igual que al castaño, era la primera vez que se sentía atraído a un hombre y no sabía como reaccionar, pero ahora que sabía que el menor sentía lo mismo, no iba a desaprovechar la oportunidad, Reb segía nervioso repitiendo que era de hora de irse, en un movimiento rápido Auron le dio la vuelta y lo arrincono contra la puerta.

—¿Qué hac-ees? —pregunto el menor—

Fue lo único que alcanzo a decir pues de un momento a otro sentía que estaba levitando...

De verdad estaba pasando? Auron lo había besado, sentía sus piernas temblar y que se le iba la fuerza, el beso lo arrasó, fue como haber encontrado una completa mitad de si mismo que había estado perdida, sus labios eran tibios y suaves contra los suyos, sentía que se le iba la respiración pero simplemente no quería que el beso terminara, el mayor se alejo lo suficiente para mirarlo a los ojos, el menor temblo de la necesidad de volver a sentir sus labios contra los suyos, envolvió sus brazos al rededor de su cuello, su boca encontrando la otra en un segundo beso que hizo temblar el mundo bajo sus pies...