𝕻𝖗𝖔𝖒𝖎𝖘𝖊 (Theomione)

23. Marie

Con dificultad se puso de pie...

Sus extremidades, realmente dolían como el infierno...

Su cuerpo se sentía pesado y rígido...

El frío de la pequeña laguna le había pasado factura...

Volvió como pudo a la mansión, para encontrarse con un furioso señor oscuro

Que apenas lo vio atravesar la puerta le lanzó un cruccio que lo hizo caer de rodillas

Theo apretó la mandíbula para no gritar

—¡¿DÓNDE ESTABAS?!.- le gruñó

—C... Combatiendo el frente en el este mi señor...- respondió intentando no quebrarse

Voldemort lo soltó

—¿Eso es verdad Greyback?.- el mago tenebroso miró al hombre lobo

—Así es mi Lord, Henker estuvo peleando arduamente contra ellos y posibilitó la caída de la agrupación de rebeldes de esa zona.- respondió solemne

En momentos así, Theo de alegró de haber dejado vivo y lavarle el cerebro a Greyback...

Voldemort se quedó brevemente pensativo y luego se volteó hacia el castaño que seguía de rodillas

—Mira nada más en el estado que volviste ¿acaso te ablandaste?.- Voldemort lo miró con desinterés por sus heridas

—Mis disculpas, mi lord.- Theo se puso de pie y se irguió a pesar del dolor

—Bien, ve a que te curen y te den una poción para reponer fuerzas, los quiero a todos en óptimas condiciones, en tres días por atacaremos Hogwarts.- el señor oscuro hizo un ademán con su mano

Theo se inclinó respetuosamente y luego se fue de allí

Una vez fuera del enorme salón, Greyback lo ayudó a no trastabillar, sujetandolo de las costillas

Y ambos fueron hasta la habitación del Henker

Se dejó caer en los mullidos sillones de su amplia habitación lujosa, mientras em hombre lobo le alcanzaba las pociones

—Greyback, dame un Whisky de fuego ¿quieres?.- le pidió cansado mientras llevaba una mano a su frente

El hombre lobo cumplió sin chistar

—¿Hay algo que pueda hacer por usted?.- preguntó serio y servicial

Theo pareció pensarlo...

—¿Conservas aún, las cosas de la chica Granger, cuando estuvo en Malfoy Manor?.- preguntó

El licantropo lo miró

—Ese día, ellos tomaron el pequeño bolsito de la chica, además de unas varitas, sin embargo uno de los míos logró arrebatarle un pedazo de cristal que se desprendió de su espejo.- Greyback se lo enseñó

—¿Lo tienes siempre a mano?.- Theo preguntó arqueando una ceja

—Tiene el aroma de los tres, y me hace más fácil el rastrillaje.- se encogió de hombros

Theo asintió y comenzó a estudiarlo, con una mueca pensativa

Lo observó con detenimiento y se dio cuenta de que no lo reflejaba a él, sino más bien un lugar desconocido...

Frunció levemente el ceño... Al notar la presencia de otra persona del otro lado

—¿Quien eres?...- preguntó al ver los ojos celestes de lo que parecía ser un hombre mayor al otro lado del espejo