𝐎𝐛𝐬𝐞𝐬𝐢́𝐨𝐧 ♡ - [𝐈𝐳𝐚𝐤𝐞𝐲]

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Kurokawa tomaba tranquilamente de su copa de cristal, metido en sus propios pensamientos y sin preocupaciones hasta escuchar el rechinillo de la puerta de su oficina abrirse, veía como la figura de su siervo más fiel un unos papeles, aquel Alfa pelinegro lusia neutral

---- Adelante Kakucho..

El filipino le dirijio una mirada dándole a entender al contrario que se acercara y dijera lo que tenía que decir

---- Señor Kurokawa...llegó el informe informe de shibuya, es sobre una pandilla llama Tokyo Manji y...el líder en especial...golpeo brutalmente a uno de los subordinados élite

---- Así que Tokyo Manji...quiero que le den mi recado....viernes 13, En la fábrica abandonada de Yokohama, le daremos lo que se merecen..

Mencionó el Alfa Moreno dejando su copa sobre el escritorio, mirando fijamente a esta como si fuese lo más interesante de el mundo luego de dar su orden hacia el Alfa pelinegro, Sus hombres de Élite no eran un chiste aunque personalmente no le importaban, simplemente daba mala pinta a su organización y eso no lo iba a permitir, ningunos niñatos que juegan a las pandillas lo iban a dejar mal visto

Por otra parte, Kakucho solo asintió y iso una reverencia para luego retirarse de la oficina de el Pilar de Tenjiku

Mikey se encontraba terminando una de sus reuniones nocturnas matutinas de Pandilla, visualizaba cómo cada integrante se retiraba en sus motocicletas, quedándose este sentado en las gradas de el santuario, totalmente sólo al rechazar la propuesta de sus compañeros al ir la casa de Takemichi, Sano podría ser infantil pero en pocas ocasiones le gustaba los ambientes solitarios, Sus hebras rubias se movían ante el pasifico viento, sentía una presencia observándole, hasta ver una unos unas trenzas rubias con negro salir de su escondite, con su típico uniforme de Tenjiku, tan molesto a la vista de Manjiro

---- Pensé que la paliza que le di a tu hermano fuera suficiente para que dejen de joder por mi zona

---- Tch...solo vine a Dejar el recado de el Jefe

El rubio de puntas negras emitía sus feromonas agrias para la delicada nariz de el menor, tiro un sobre blanco a él líder de ToMan y con las mismas camino hasta desaparecer de el santuario, mientras el rubio abrió con curiosidad y inocencia aquel sobre, sacando una hoja de papel escrita a mano, letra perfectamente curveada y elegante

"En la Fabrica abandonada de Yokohama, viernes trece, No falte Tokyo Manji Gang, cordialmente Tenjiku"

Patético ante el Rubio que leía aquella carta con aburrimiento, haciendo bolita aquel papel y tirándole hacia atrás, se le hacía muy patético que una supuesta organización criminal se revajara por un idiota como lo era Rindou Haitani, al cual dejó molido a golpes ante sus molestos cortejos, a su vista los Alfas eran totalmente estúpidos y sus sospechas eran confirmadas al parecer

Claro que no faltaría, era el invencible Mikey por algo, no era un cobarde, estaba dispuesto a golpear a cualquiera y si iría contra el magnate de Tenjiku lo haría, demostraría que solo por el hecho de ser un Omega no sería como el montón, eso nunca, preferiría morir antes de ser algo que en realidad no era y no quería.

Sus pensamientos fueron interrumpidos por la alarma de su movil que apuntaba a las 11:00 PM, hora de su trabajo al parecer.

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