La hija de Black Widow

Episodio 54

JODETE

AVISO: ESTA HISTORIA PUEDE CONTENER FALTA DE ORTOGRAFÍA

Narra _____

_____: Analiza la prueba otra vez.

IAM: No hay resultados en la base de datos.

Aún no lograba encontrar a Wanda y eso estaba frustrándome. ¿Donde estás, mujer escarlata?

Volví a sacar sangre de mi brazo, negra y con aspecto horrible. Oí a Scooby ladrar, tenía un peluche en su hocico.

Movió su cabeza hacia la izquierda.

_____: Yo también quiero saber, Scooby.

Deje que la sangre pasara por un tubo hasta llegar a su lugar correspondiente.

_____: Analízala de nuevo.

Esperé por unos minutos hasta que dijo:

IAM: Mi sistema no logra analizar nada.

Un impulso se apoderó de mí y tiré algunos frascos que estaban delante de mi.

_____: Carajo. Scooby, ve al piso de arriba.

No pareció pensarlo dos veces, pues se fue.

Era como si una sensación de desesperación se apoderara de mi cuerpo, como si todo lo de mi alrededor me estorbara. Como si todo me molestara o sofocara. Tire cosas de un lado a otro sin pensar qué tal vez me arrepentiría de romper algo. Fue en cuestión de segundos cuando todo era desorden.

Me acomodé y recargué mi cuerpo en la fría pared mientras abrazaba mis rodillas. Escondí mi cara sintiéndome una mierda.

_____: Quiero entender, quiero entender, quiero entender.

No sabía lo que llegué a ser.

No sabía lo que era.

No sabía lo que sería.

Pero nunca me había sentido tan vacía y tan llena al mismo tiempo. Nunca había sentido tanta ira por razones sin importancia alguna.

Me encontraba sudando, pero mi cuerpo estaba frío.

Lloraba, pero mi interior exigía paz.

Me sentía inútil, desorientada y en busca de mil respuestas.

Mamá Nat, Tony y Kate aún rondaban todos los días por mi mente.

Y un grito salió de mi. Pero no era mi voz. Esta era fuerte, con coraje y fuera de este mundo.

De mi boca salió energía negra tomando lugar por todo el techo, por todo el lugar.

Después sólo regresó al interior de mi cuerpo como si nada hubiera sucedido. Me puse de pie rápidamente.

_____: ¡Ya déjame en paz!

Y aprecio entenderlo, pues una sombra de aspecto delgado como un esqueleto de gran altura estaba frente a mi.

»No puedes deshacerte de mi, no a menos de que mueras. No hay paz para ti. No esperes que un Dios inexistente escuche tus plegarias.

Volteé hacia atrás, había un cuchillo en la barra. Lo tomé entre mis manos acercándolo a mi garganta.

_____: Entonces jodete.

Pero fue más rápido. Atravesó mi cuerpo dejándome en el suelo y todo oscureció.

Narra Peter

Entre a casa luego de recibir un informe de IAM a mi celular. Todo estaba desordenado, Scooby no paraba de ladrar y _____ permanecía acostada en el suelo.

Me arrodillé ante ella tomándola con cuidado.

Peter: IAM, abre la habitación de seguridad.

Un reloj de péndulo se hizo aún lado dando paso a una entrada. Caminé con _____ en brazos bajando las escaleras hasta llegar a la habitación de seguridad, la dejé en la camilla y me encargué de revisar su pulso, darle permiso a oxigeno limpio y pedirle informes a IAM sobre su estado para así sólo conectarla a un suero.

Se encontraba bien, aunque necesitaba descanso y vitaminas.

Peter: IAM, dame acceso a las cámaras de seguridad del piso principal.

Un holograma apareció, deslice mi dedo en múltiples ocasiones hasta ver algo que me interesó. ______ nuevamente había analizado su sangre, sólo que ahora no obtenía una respuesta.

Destrozó todo lo que estaba a su alrededor, se sentó en el suelo hasta el momento en el que soltó un fuerte grito. Miraba hacia arriba con la boca entre abierta. No sabía la razón de aquello.

Después solo se puso de pie.

_____: ¡Ya déjame en paz!

Se quedó en su lugar, parecía escuchar a alguien, pero no veía ni escuchaba nada.

Tomó un cuchillo acercándolo a su garganta.

_____: Entonces jodete.

Y después solo cayó. Su cuerpo pareció convulsionar hasta después de unos segundos detenerse.

Volteé a verla. Descansaba soltando ligeros suspiros. Se le veía tan relajada, pero sabía que su mente y alma estaba siendo infectada por una dolorosa tormenta.

Me acerqué a ella tomando su mano.

Peter: Quiero que estes bien, niña. Quiero que mi mundo esté bien.