Aprendiendo a conquistar {Larry Stylinson}

Capítulo 26.

Como siempre el lunes llego rápido. Demasiado para el gusto de todos los estudiantes. Pero no para Louis. Estaba feliz, demasiado feliz. Los recuerdos del viernes a cada rato pasaban por su mente y no podía evitar que una sonrisa estúpida se posara en sus labios.

Lo que era sábado y domingo se la había pasado todo el día hablando por mensajes con Harry. Había sido tan cursi.

Se miró al espejo como todas las mañanas y se acomodó los lentes.

Llego a la universidad y allí ya estaban los demás chicos. Los tres estaban sentados en un banco, Zayn tenía su brazo por encima de los hombros de Liam mientras que este tenía su cabeza recargada en el hombro del pelinegro.

Cuando se acercó lo suficiente. Pudo notar el sonrojo en las mejillas de su amigo.

–Hola chicos –saludo llamando la atención de los tres.

El primero en reaccionar fue Harry que se levantó y le dio un beso en la mejilla.

–Hola, precioso.

Louis le sonrió.

–Adivina –Zayn dijo mirándolo.

Harry se paró aun lado de Louis y paso su brazo por sobre sus hombros

–¿Qué?

–Liam y yo somos novios.

(...)

Los cuatro se juntaron en la hora que tenían libre en la cafetería. Hablaban animadamente unos con los otros. De vez en cuando Louis y Harry se dedicaban miraditas que no pasaban desapercibidas por los otros dos chicos que se sonreían cómplices.

Una chica de piernas largas y un profundo escote se acercó hasta ellos batiendo sus caderas.

–Hola, Harry –saludo coqueta besándolo en la comisura de sus labios.

Louis miro para otro lado, ocultando sus celos.

–¿Quieres salir esta noche? –pregunto moviendo su ondulado cabello.

–No –Harry negó–. Tengo planes con Louis.

El aludido levanto la vista sonriendo un poco. Harry había rechazado a esa puta por él.

–¿Con esa cosa? –la chica hizo una cara de asco–. No sé cómo ustedes tres –señalo a Liam, a Zayn y a Harry–, se pueden juntar con esta cosa mal envuelta.

Louis cerro sus ojos, así era como Harry lo llamaba antes. Y ella tenía razón. Todos se vestían bien, hasta Liam que había dejado de vestirse con ropa ancha.

Se levantó con sus ojos aguados. No veía bien a través de sus lentes. Y salió corriendo de allí. No quería que vieran a sus amigos con un chico que se vestía con un nerd.

(...)

Harry lo busco por toda la universidad, hasta que lo encontró en los baños. Estaba allí parado viéndose al espejo.

–Louis –susurro acercándose a él.

–Ella tiene razón, Harry –el castaño hablo mirándolo–. No puedes dejar que te vean conmigo.

El rizado ofendido. Lo agarro por la mano y entrelazo sus dedos.

–¿Qué haces? –pregunto Louis asustado.

–Tú sabes quién eres, yo sé quién eres. Eres un chico hermoso. Ya te dije que no me importa cómo te vistas.

Y durante todo el día anduvo de la mano con Louis, besándolo a todo momento. Consintiéndole, dedicándole sonrisas solo a él. Demostrándole que de verdad no le importaba como se vistiera.