Fútbol y Yo

Capítulo III - Mi Primer Equipo

Después de haber perdido dos veces el mismo tren, un amigo muy íntimo, Pedro Luís Nsue (Ibra), que a día de hoy es el capitán del que sería mi primer equipo, me dijo que fuera a jugar con él, era un equipo de segunda, pensé, vaya, hasta ahora he intentado probar con equipos de tercera y no me ha ido muy bien.

Decidí ir, pero sabía que no sería fácil ganarme al entrenador cuando ya tenía a gente con más experiencia y que conocían la categoría, jugadores que ya tenían mucha más madurez, porque para mí sería la primera experiencia en un equipo.

Fui a Santa Isabel FC, el entrenador era Esono Esono, una persona muy maja, era honesto y, para mi suerte, confiaba en la gente joven. Mi amigo y yo éramos los más jóvenes del equipo, pero, él siempre apostaba primero por nosotros y teníamos que aprovechar.
El primer partido de liga fue contra Real Rebola, conseguimos una victoria épica por 4-3 en el anexo de Malabo, mi primera experiencia, segunda división.

Real Rebola junto con Ebenezer y San Kuma tenían los mejores equipos de la categoría, pero, con esta primera victoria sobre Rebola, cogimos un subidón que nos duró toda la temporada.

Una temporada espectacular, sólo perdimos un partido en liga, fue 2-0 frente al Dvo Ebenezer. Los campeones serían San Kuma, que terminó el año sin perder en toda la liga, nos ganamos la posibilidad de poder jugar el playoff de ascenso, pero por mala suerte o por falta de galones de parte de nuestro presidente, Dvo Ebenezer jugaría el playoff de ascenso y hasta llegó a vencer al rival, que era un equipo de primera división, así ascendería San Kuma junto con el Dvo Ebenezer.

La derrota más dura de la temporada fue en la copa de su excelencia contra el Duma Duma Sport, que también sería porque el míster hace muchas rotaciones y perdimos por 4-0.
Jugadores con más experiencia y trayectoria tuvieron que irse, el que hasta mi llegada había sido fijo en mi posición, se fue al Ateneo y otros más.

Para la próxima temporada, aparecería Gustavo Ndong Edú (Siro) para hacerse con el club. Pero, el presidente rechaza la oferta y perdemos la posibilidad de dar un impulso positivo al equipo. Llega la planificación de la liga para la siguiente temporada y, tras el no del presidente a Siro, Santa Isabel no aparecería en el calendario de segunda división, a pesar de haher terminado en el tercer lugar la pasada temporada. Mientras se trata el asunto, nosotros hacíamos nuestro papel, que era entrenar, llegan rumores de que se está gestionando nuevo campo de entrenamientos.

Para nosotros sería una alegría, porque, nuestro campo de entrenamiento no tenía hierba, ni la normal, ni mucho menos césped, era en tierra, pero le sacamos provecho y dió sus frutos.

Se llega a conseguir un campo en el barrio donde antes había entrenado con el Atlético Hermandad, sólo a unos 50 metros. El equipo llega a un acuerdo con la iglesia Piedra Viva Internacional para cedernos un espacio con hierba que era bastante más amplio que nuestro campo tradicional, pensamos que estaba solucionado lo del campo con que era el inicio del peor momento del equipo.

Antes de ir al nuevo campo de entrenamientos, el anterior míster notó falta de compromiso en algunos compañeros que eran veteranos en el equipo, entonces, decide darles de baja, porque no quería tenerles más en el equipo, él decía, "si ustedes se comportaban así, que pensáis que pasará con los pequeños. Ellos al ser cercanos al presidente, la cosa se complica y el míster, decidió dejar el equipo.

La verdad es que, no necesité nunca hacer lo que hacían los que me rodeaban para guiarme, siempre fui responsable, mis padres nunca me pusieron normas, terminé decidiendo por mí que no me gustaba la calle, no sé si llegué a crear mi propio concepto de ambiente y diversión, pero no me gustaba la manera en que todos estaban acostumbrados.

Tras varios entrenamientos en el nuevo campo, con nuevo entrenador, todo parecía ir bien, hasta que un día un compañero tiene un accidente, cosa que le obligaría a dejar el equipo, porque no volvió tras dicho accidente. Seguimos con los trabajos hasta que un día, nuestro capitán Juan Francisco Bikó (Beto), tuvo un accidente y se hace un corte en la palma de la mano, detenemos el entrenamiento para interesarnos, pero el entrenador nos dice seguir, con el compañero tendido en el suelo sin nada de atención para su herida.

Le insistimos al míster que es necesario que le vea un médico, se decide seguir el entrenamiento hasta que a última hora se llevan al hospital al capitán, todo parece estar normal, hasta que se nos informa de que la herida se ha infectado y se le tiene que evacuar a Bata.

Algo muy curioso, porque en Malabo hay mejor asistencia que en Bata, pero la familia acaba decidiendo su traslado, poco tiempo después se nos informa del fallecimiento de nuestro capitán. Estaba desconsolado, porque más que una amistad me había ganado a un hermano.

Entonces nacen dudas de si debo seguir en el equipo con lo que había pasado, porque, sinceramente le echaba la culpa al equipo de lo que había pasado. Cuando pensaba que no podía ser peor, el que después hacía ya de capitán, Angel Obama (Pirlo), se informaría un tiempo después de que, él también se había puesto enfermo.

Al principio, piensas que, es de los típicos malestares por los que vas al médico y, al día siguiente ya puedes volver a salir a correr para sentirte vivo, pero no. La cosa empeora, otra vez lo mismo, su familia decide que se lo lleven al continente, cosa que jamás llegué a entender hasta hoy. Llegó el "Boum" que terminaría con el poco afecto que me enlazaba con el club, fallece otro hermano, no tenía fuerzas para seguir en el equipo, al final fui, porque quería intentarlo por ellos, pero, todo era nostalgia, recuerdos y al principio no te centrabas. Entonces, pasó algo que fue definitivo para decidirme, algo que me derrumbó por completo y decidí dejar el equipo.