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Sandra, cuando llegamos a la casa mi madre me abrazo y comenzó a llorar estaba tan feliz de verme que casi se desmaya, yo acepte su abrazo para tranquilizarla y después me alejé.

Soledad
-Mi princesa hermosa, no puedo creer que estes viva, que estés entre mis brazos mi niña es como un sueño.

Sandra
-Estoy bien en mamá, podrías soltarme y déjame ir a mi habitación.

Soledad
-Acaso no te da gusto volver, te sientes mal que pasa princesa???

Sandra
-Ya te dije que estoy bien, solo necesito descansar... fue un viaje largo y bastante difícil.

Soledad
-Sandra hija por dios tienes que explicarme, que te paso???

Luca
-Luego te explicará todo, Sandra necesita descansar deja de abrumarla con tus tonterías!!!

Soledad
-Pero.... es mi hija como no quieres que este así de feliz??

Luca
-Soledad hay algo importante que debo decirte, Luís por favor sube a tú habitación y no hagas locuras o ya sabes lo que pasara.

Luís
-Como se supone que sepa cual es mi habitación, si es la primera vez que estoy dentro de esta casa??

Luca
-Tú habitación está enfrente de la de Sandra, no es nada difícil de encontrar.

Soledad
-Espera quien es el, y por qué le diste una habitación frente a la de nuestra hija??

Luca
-Vamos a mi oficina allí, te explicaré todo.

Luís, camine por la escalera hasta mi nueva habitación, mire al frente de esta y la vi ella estaba intentando escapar por la ventana así que entre de inmediato, -Que demonios crees que haces???

Sandra
-Estoy escapando no es obvió??

Luís
-No puedes irte, prometiste quedarte.

Sandra
-Ya se lo que prometí, no te preocupes no pienso irme para siempre solo saldré por unas horas.

Luís
-Es peligroso que salgas sola podrían intentar sucuestrarte o peor matarte.

Sandra
-No iré lejos y nada me pasará.

Luís
-Adonde iras??

Sandra
-Necesito hablar con alguien, y aquí no puedo.

Luís
-Quisiera que tu y yo pudiéramos llevarnos bien, al final somos familia y debemos hacerlo por favor.

Sandra
-Volveré pronto cierra la puerta cuando salgas.

Luís, ella se fue y me quedé allí parado en medio de su habitación después de minutos de estar allí, aproveche la situación y comencé a caminar por el lugar miré sus fotos, sus libros, peluches y otras cosas sin importancia, tenía que irme antes de que me vieran aquí así que tome una de sus fotos y un suéter lo abracé y de inmediato su aroma me envolvió, escuche algunos voces y me fui directo a mi habitación con algunas cosas de Sandra.

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Sandra, al salir de mí casa vi a Santiago un compañero de mi colegio que solia vender droga, me miro y yo le hice una seña de que se acercará camino hacia mi, muy en el fondo algo me decía que debía irme y no meterme en problemas, pero mi otra mitad me suplicaba que me acercará y que destruyera mi vida ya que al final no valía nada, -Santiago.

Santiago
-Hola Sandra.

Sandra
-Necesito algo para aliviar el estrés y la ansiedad.

Santiago
-Vaya si que eres directa, bueno tengo algo pero te costara algo de plata.

Síndrome de Estocolmo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora